128ONCE UPON A TIME NO ME PERTENECE NI SU HISTORIA NI SUS PERSONAJES TODO PERTENECES A LA ABC Y SUS CREADORES
Regina estaba enojada como pudo Emma hacerle esto, estaba tomando Vodka agarro la botella y lo estrello en la pared, estaba más que enojada, tenía mucha ira en sí, Había pasado una hora desde sus ataques de Rabia y Llanto, esta noche ella había perdido todo una vez mas
¿Por qué esa familia siempre tiene ese descaro de destruirla, de arrancarle ese pequeño pedacito de felicidad?
-¿PORQUE? ¿PORQUE? – grito de Rabia
Ella ahora se encontraba en su bóveda, sentada en un sillón aun no podía detener las lágrimas que pasaron por lo largo de su mejilla, Nada ella no tenía nada ni a nadie, lo única cosa que tenía era la ira y la venganza por su mente. Su madre siempre le dijo que el amor es la debilidad y ahora ella está pagando el precio completo
Si bien la idea de la venganza hizo su pequeño camino en sus pensamientos, se escucharon pequeños golpes. Se concentró y se volvió a escuchar. Alguien estaba golpeando contra la puerta secreta de su tocador. Ella hizo un gesto rápido de la mano para conocer la identidad de la persona que se atrevió a venir a molestarla.
- Henry!? - Ella abrió la puerta a la joven adolescente, que se precipitó en los brazos de su madre adoptiva.
- Henry! Pero, ¿qué estás haciendo aquí? ¿Es Emma quien te envía? - Ella preguntó con un punto de ira en la voz.
- ¡No! Vine porque me preocupe por ti. Te fuiste tan rápido y estabas tan enojado que tengo ...
- Tenías miedo que la reina malvada arrase esta ciudad y todos sus habitantes consigo - ella dice en un tono glacial.
- ¡No! Yo sé que ya no eres más ella. Tú nunca vas a ser ella.
Regina abrazó a su hijo y nuevas lágrimas fluyó sobre su mejilla
- Mamá...
- ¿Sí? - Ella respondió lentamente sin dejar de sostener firmemente a su hijo en los brazos.
- Emma se odia a sí misma por haberte hecho tan triste y de haberte quitado a Robín por volver con Marianne. Pero ya sabes, no es su culpa. Ella no sabía quién era ella, y ella quería hacer lo que le parecía bien.
En estas palabras Regina vio a su niño. Ella sabía que él tenía razón, pero estaba por encima de su capacidad. Perdonar a Emma estaba por encima de sus puntos fuertes. Para ver la felicidad de la familia Encanto estaba por encima de sus puntos fuertes. Nada. No tenía nada más. Ella miró a su hijo con ternura. Ella amaba tanto este pequeño niño que había crecido tan rápido en un año. Pero ella no lo tenía más. Buscó un apartamento para vivir con Emma, su verdadera madre. Pensando en que otras lágrimas llegó. Ella agarro con el dorso de la mano mientras sonreía a su hijo adoptivo. No quería hacerle daño. Y sobre todo que ella quería que él continúa a amarla. Había encontrado la solución a su felicidad.
- Deberías volver a casa antes de que todo el mundo se preocupe y comiencen a querer a destripar a la reina desgraciada por haberte secuestrado - se dijo, dejando escapar una risa suave.
Henry abrazó a su madre sin antes hacer su promesa de llamar mañana para que puedan almorzar juntos, los dos. Sabía que su madre le iba a necesitar para superar la pena que vivió en ella a partir de ahora. Tenía una nueva misión, para dar a su madre adoptiva la felicidad que merecía. Para él, ella había cambiado, y estaba listo para cualquier cosa que su madre necesite
- Emma... debes de volver a casa. Es tarde... – dijo Rubi
Emma miró a su amiga. Habían pasado horas desde que se apoyó en el mostrador para beber. El alcohol no ayudará a que volviera el error monumental que ella acababa de cometer, pero al menos le dio un momento de paz.
- Emma...
- Me voy... me voy...
- ¿Quieres que te lleve?
- No, gracias. Voy a caminar - Ella respondió mientras sonreía a Ruby.
Sin saber realmente donde sus pasos condujeron ella todavía pensaba en todo lo que había pasado en los últimos días. Zelena había tratado de cambiar el pasado para construir para sí un futuro mejor y que había fracasado gracias a Regina. El ex alcalde les había salvado una vez más. ¿Y cómo la hizo uno agradeció al impedirle tener derecho también a su final feliz. Gracias a ella, el llamado Salvador, Regina había perdido el amor. Daniel había muerto a causa de la nieve, y para mantener esa tradición, la propia hija de Blanca Nieves había alejado a Robín de ella
Extrañamente Emma se encontró en frente de la casa de la ex alcaldesa de Storybrooke. Miró a su teléfono. Eran casi las 2:00 am de la mañana. Todo parecía silencioso. ¿Acaso Regina ha logrado conciliar el sueño? Ella sabía que Henry había visto a su madre un poco tiempo después de que éste se fue a toda prisa de la casa de la abuela. Él había intentado consolarla, para demostrarle que la amaba y que estaba allí para ella. Esperaba haber dado todavía el deseo de luchar para encontrar su final feliz. ¿Podría ella hacer por él?
Esperanza de nuevo...
Incapaz de quitar sus ojos de la inmensa mansión, ella quería entrar, quería pedirle perdón de nuevo a Regina, no importa suplicar por su perdón pero lo haría, entro a la casa y se dio cuenta que Regina no estaba, ella se sentó en el sofá para esperarla
Regina buscó por última vez en el panel de Storybrooke. Su mercedes cruzo la frontera y con eso la reina malvada dejo de existir para dar paso a una, elegante, joven ambicioso de color marrón y que quería sonreír a la vida. Lo que no se dio cuenta era que dos jóvenes estaban escondidos detrás de los arboles observando todo y con un bebe en los brazos
ESTA ES UNA NUEVA HISTORIA QUE TENIA EN MENTE HACE TIEMPO
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