Bueno, aquí está el último capítulo de esta historia. Sé que algunos han aprendido a quererla como yo, y tengo que admitir que fue un reto escribir a una Kate tan joven, todos los problemas por la diferencia de edad con Rick... y estoy feliz porque además de estar satisfecha con el resultado, ustedes me han acompañado en el camino, protestando a veces, de acuerdo en otras, pero apoyándome! Así que muchas gracias y espero que les guste el final!
Capítulo 40
Kate se mordió el labio para no llorar cuando su madre la apretó en sus brazos…
-Ya basta, mamá… me harás llorar…- le dijo fingiendo fastidio, fastidio que su madre ya sabía que no existía, por supuesto.
-Lo siento… solo pretendía darte este collar, tu abuela me lo dio cuando me casé con papá… ella también lo usó en su casamiento…- dijo y lo cerró, observándola frente al espejo.
-Es precioso… gracias…
-Kate… quiero decirte que estoy muy orgullosa de ti…- dijo y Kate giró y la tomó de las manos.
-Lo sé…
-Te has convertido en una mujer maravillosa, y pronto o no, creo que todas las madres esperamos que este momento llegue para poder ver a nuestras hijas comenzando su proyecto… felices… convencidas de que están haciendo lo correcto…
-Aunque pueda equivocarme…
-¿Tienes dudas?
-No, para nada… pero esas cosas pasan, ¿verdad? No creo que nadie se haya casado pensando que luego se separaría…
-Creo que a la pareja hay que cuidarla y alimentarla permanentemente… habrá crisis, momentos en lo que te parecerá que no puedes seguir adelante, pero se sale… y espero que tú puedas ser tan feliz como lo soy yo…
-Espero que sí… gracias, mamá…- dijo y la abrazó, tratando de no llorar.
Luego fue el turno de Jim y por último Martha, que la abrazó con ternura y le dio casi los mismos consejos que su madre, lo cual no dejó de sorprenderla, ella amaba a ambas mujeres, sin embargo las sentía totalmente distintas… aunque estuvieran de acuerdo en verlos felices a ella y Rick…
La ceremonia fue bastante atípica, Kate llegó al pequeño altar improvisado de la mano de Alexis, que vestía de blanco al igual que ella, ambas muy sencillas, con algunas flores pequeñas, también blancas, en el cabello. Los pocos participantes a la boda, incluyendo a sus padres y Martha estaban rodeando el altar y mientras caminaba, sonriente hacia Rick, Kate se enfocó en sus ojos y se sintió la mujer más afortunada del mundo…
Vio lágrimas en los ojos de él y creyó que flaquearía, pero no sucedió, pudo contener su emoción hasta más tarde…
Rick la tomó de la mano y besó sus dedos con ternura. Le guiñó el ojo a Alexis que se quedó allí con ellos…
El ministro ofició la ceremonia y los votos fueron sencillos, pero profundos…
-Casi no puedo creer el impacto que me causó en el corazón el haberte conocido, me has enseñado que vale la pena creer en el amor, porque el amor eres tú, tú y esta pequeña que se ganó mi corazón unos segundos más tarde… espero que nuestro amor siga tan intenso y arraigado a nuestros corazones durante toda la vida… siento que te voy a amar siempre…- dijo Kate con emoción, mientras algunas lágrimas amenazaban con asomarse…
-Kate… tú eres quien más me ha enseñado a mí… y no pudo decirte en qué momento preciso me enamoré de ti, pero te metiste en mi corazón y no pude pensar en nada más… contigo me siento fuerte, con ganas de seguir intentándolo… no porque antes no pudiera, pero sé que el camino es largo y creí que lo terminaría solo… gracias por ser la mejor madre que Alexis pudiera tener… yo también siento que te amaré toda la vida…
Alexis les entregó los anillos y los intercambiaron mirándose a los ojos. El ministro pronunció unas palabras y luego dio por terminada la ceremonia, declarándolos unidos en matrimonio…
La niña juntó sus palmas para aplaudir cuando vio que su mamá y su papá se daban un beso tierno en los labios y luego no pudo hacer otra cosa que abrazarse a ambos.
Hubo mucha emoción, todos estaban muy tocados por lo que habían oído de Rick y Kate…
Esa noche, Martha se llevó a Alexis y todos volvieron a sus casas para darles algo de intimidad a los recién casados…
Rick la alzó en sus brazos antes de pasar la puerta de la habitación mientras ella reía, cargando con ambas copas de champagne, que habían llevado consigo para brindar otra vez por su amor, antes de entregarse a la pasión…
-Te amo…- dijeron ambos al mismo tiempo y chocaron las copas.
Kate lo abrazó y ahí sí dejó que la emoción le ganara y se permitió llorar un momento. Rick la apretó en sus brazos y murmuró palabras en su oído para reconfortarla…
Un rato más tarde, las caricias se tornaron más apasionadas y Rick le quitó el vestido despacio, besando su piel, haciendo que su cuerpo vibrara de alegría y de pasión…
Rick la tomó en sus brazos cuando ella descendió sobre él y la miró a los ojos…
-Es increíble sentirte así, toda mía… y ahora también eres mi esposa…
-No puedo creerlo…- dijo ella y sonrió, besándolo con ternura- y tampoco puedo creer que estuviese tan equivocada con respecto al amor físico entre un hombre y una mujer… en algún momento no creía que fuera para mí…
-Ya pasó amor… todos podemos estar equivocados en algún momento… por suerte tuviste confianza en mí y me permitiste demostrarte que era algo increíble…
-Lo es… lo es…- dijo y comenzó a moverse despacio, disfrutando de cada segundo de pasión que él le hacía sentir…
Terminaron la noche exhaustos, uno en brazos del otro, sintiendo que no querrían estar en otro lugar que juntos…
Tuvieron una primera etapa de vida muy sosegada. Él continuó escribiendo y ella pudo terminar su carrera y se recibió de abogada.
Unos años más tarde, cuando Kate ya trabajaba en el estudio con sus padres y planeaba independizarse, llegaron los gemelos… Bryan y Jimmy y por suerte Alexis tenía cerca de 12 años y ayudó mucho a sus padres a cuidarlos…
Con la ayuda de Rick y cuando los niños fueron más grandes, Kate escribió dos libros sobre su especialidad. Rick cambió de estilo y se dedicó a una literatura más seria, analizando clásicos de sus autores favoritos…
Hoy viven solos, porque sus hijos ya están en pareja y con nietos en camino… y a pesar de que la pasión fue haciéndose un poco más esporádica, aunque aún es intensa, el amor sigue tan resistente, más que nunca…
Hasta aquí llegamos, espero que hayan disfrutado de esta historia tanto como yo! No se preocupen que pronto habrá otra en reemplazo! Muchas gracias por leer y también a quienes además comentan!