Capitulo 1
"Don´t get Lost.

.. Sus latidos se sincronizaban con los míos, nuestro sudor se juntaba a medida que nuestra piel se rozaba los gemidos inundaban la habitación, y él clavaba sus uñas en mi espalda deslizándolas suavemente dejando profundas marcas y un leve ardor, cuando sus labios se posaban en mi piel sentía como el lugar donde se habían puesto quemaba con una intensidad impresionante, nuestros ojos se buscaban se encontraban y transmitían esos sentimientos que tanto nos demostrábamos día a día...
-L-leigh... no aguantare mucho mas... -susurre entre jadeos mientras sentia como mis caderas se movían involuntariamente
-A-agh... e-estas tan ajustado aun Lysandro... -dijo el joven de cabellos negros sin dejar de penetrarme, era despiadado, solo en la cama tomaba esa "maldad" por así decirlo, en verdad, era la persona más dulce de todas...-Aguanta Lys...- me susurro mientras seguía con las embestidas y me masturbaba rápidamente con su mano libre, yo me retorcía y gemía un poco fuerte, hasta que sentí como se quedaba quieto unos segundos y sentía su liquido ingresar en mi, haciendo que yo acabara junto con él. El mayor cayó sobre mi pecho y yo lo rodee con mis brazos mientras le acariciaba el cabello
-Eso fue único leigh.. -dije con una hermosa sonrisa en mis labios para luego besarle la frente, el alzo la vista enfocando sus ojos en los míos, no entendía muy bien porque la gente decía que tenia ojos negros y oscuros, eran un verde oscuro lleno de brillo y mas que hermosos, me molestaba que no notaran lo lindos que eran porque los míos eran más "atractivos"...

3 años después...

Esa fue la última noche que estuve con mi hermano, al día siguiente el se fue... Quería cumplir su sueño y hubiese sido egoísta de mi parte evitar eso... Luego de que Leigh se fue, algo cambio en mi, ya no era más el "chico callado y sumiso" de siempre, no, era literalmente... Una puta, me acostaba con cualquiera, solo así me sentía vivo, era despecho, me refugie en los brazos de Castiel, quien me perdonaba acostarme con cualquiera y luego como si fuera poco me lo tiraba a él también, me aprovechaba de su amor por mí, y no sentía ni un poco de

-A-ahh!, Lysandro, te amo!- el rubio gemía mi nombre y me gritaba que me amaba, lo único que hacía yo era penetrarlo de una forma despiadada sádica, lo lastimaba, y yo, con eso, era feliz, saber que le dolía, de alguna forma me causaba placer y me dejaba tranquilo, el ojiambar acabo, y yo acabe dentro de él dando un gemido ronco , cuando este se acerco a besarme yo me salí de este y corrí mi rostro, para mí eso eran las personas con las que me acostaba, un juguete con el que solo pasaría un muy buen rato, nunca me apegaba a ellos. Me subí mi pantalón y lo deje allí sin decir nada, me puse mi camisa y salí del departamento de nathaniel, sin prender mi camisa comencé a caminar de nuevo a la casa que antiguamente compartía con Leigh, al entrar aun se sentía el perfume del pelinegro, y eso me mataba, por lo que no estaba mucho tiempo allí, por lo general me daba una ducha me cambiaba y me volvía a lo de Castiel, muchas veces me había propuesto quedarme con él, pero yo me rehusaba. Este día sería distinto, llegue donde era mi "hogar", y lo que vi me sorprendió, ¿era un espejismo?, ¿estaba drogado o algo?

-Lysandro?...-

-Leigh...-