1Yo luché contra este Fic en El Estruendo Tierra VII, del Foro ¡El Cometa de Sozin!
.-Salvado por la Campana-.
Iba caminando por los pasillos del colegio con algo de prosa hacia su aula asignada, pues se le había hecho tarde por un incidente en su casa, solamente que ese día tenía examen y temía no llegar a tiempo.
Justo cuando localizó u cruzó la puerta de su salón sonó la campana, indicando el inicio de la primera hora de clases; camino hacia su asiento y se dejó caer pesadamente soltando un suspiro.
- Hey - escuchó que la llamaban por detrás. sonrío a sí misma al reconocer aquella voz y se giro para ver al propietario de ésta.
- ¿Qué quieres, Kai? - le pregunto al chico de manera divertida -. ¿La tarea?
- Tsk, que me ofendes, Jinora, je, je - le siguió el juego -.¿Y eso que has llegado tarde?
Esta vez se giro de manera completa para ver directamente a los ojos.
- Hummm, digamos que Ikki tardó demasiado en el baño está mañana y bueno, el tráfico no favoreció nada - se explicó haciendo gestos con las manos que hicieron al castaño reír -. Pero, ¿Y eso que has llegado tú temprano, Kai?
- Touché - guiño un ojo.
En eso el profesor entró al salón, haciendo que se enderezarán en sus asientos. Después sacó un legajo donde traía un montón de papeles, causando que Kai dejará salir un quejido.
- Me huele a que alguien no ha estudiado - susurró Jinora inclinando un poco la cabeza hacia atrás.
- En realidad, esperaba que lo hubiera olvidado...
- ¿Cómo las últimas seis veces?
- Exacto - contestó el chico con una sonrisa.
El maestro comenzó a dar las repetitivas instrucciones de la prueba a presentar mientras entregaba el examen al primero de cada fila, pidiendo que éste los pasará a cada uno hacia atrás.
Una vez todos tenían el suyo él terminó de explicar algunas preguntas, cada estudiante se concentró en lo suyo.
Media hora después Jinora ya había acabado su examen y estaba lista para entregarlo; dio un último vistazo antes de levantarse y entregarlo al profesor.
Regresó a su asiento y cruzó los brazos en la espera de que sus compañeros terminaran su examen. En eso una idea cruzó por su mente.
Se asomó a su mochila y con sus manos dejó ver un paquete de galletas; volteó de reojo al profesor y al ver que no estaba mirando las abrió y escondió en su regazo. Saco una y "despistadamente" se la metió a la boca para comerla.
- Uuuuh ¿que traes ahí? - pregunto Kai detrás de ella asomándose por encima de su hombro.
- ¡Pssst! -se quejó en un susurro -. Hazte para allá, harás que se de cuenta. Tomó otra y se la comió.
- ¡Sabes que adoro esas galletas! - exclamo de manera silenciosa pero a la vez no, a la vez que divertida -. ¡Seguro lo estás haciendo apropósito!
- ¡Shhh, Kai!
- Anda, dame una - empezó a zarandearla por los hombros para convencerla -. Dame, dame, dame, dame, dame, aprende algo, dame.
- Ja, ja, tonto - no pudo evitar una visita a su payasada -. No.
- ¡Jinora, sólo una! - siguió.
- Nope.
- Por favor, voy a explotar, ¡arg ah, muero!- insistió dramáticamente -. Anda, haré lo que sea que me pidas.
- ¿Lo que sea? - pregunto casi en trance, pues a su mente le había venido la idea de pedirle un...¿beso?
No iba a negar que desde hace tiempo el chico le había a llegado a gustar, sino es que más que sólo eso. No iba a desaprovechar esa oportunidad, ¿O sí?
- Lo que sea, incluso podría imitar la escena de Birdman e ir corriendo por la calle en calzoncillos.
Huh, eso tampoco sería una mala idea, pensó ella.
Así que sólo le pasó una galleta, que el tomo en cuenta con gusto.
- Hey, ustedes dos -les señalo el profesor causándoles un sobresalto haciendo que toda la clase los volteara a ver, seguro ya había visto las galletas, pensaron ambos chicos -. Saben que no deberían...
Pausa.
-... estar hablando, mucho menos si sus compañeros aún no terminan su prueba.
- Huh...
- Hagan el favor de guardar silencio mientras ellos acaban o cancelo su examen, a ambos.
Volvió su vista a los papeles mientras Jinora y Kai dejaban salir un suspiro mientras volvían a recargarse.
- Jinora - le llamó el profesor -. ¿Qué es lo que traes ahí?
- Amm... - intentó pensar en algo -. ¿Mi lápiz?
- No puedes comer en clase, esta prohibido - le regaño -. Ve a tirarlas y de paso un reporte.
- ¡No, no, ya las guardo!
- Profe, en realidad las galletas son mías - defendió Kai.
- ¡SACRIFICIO! - exclamo un alumno haciendo que la clase riera.
- ¡Silencio, ustedes en lo suyo! - lo calló molesto el maestro -. ¿Acaso usted también quiere uno, joven Kai?
- Ni de chiste - se mordió la lengua -. ¡Digo! es injusto.
- ¡Ambos, vayan!
Ambos muchachos no hicieron más que levantarse y caminar a la puerta ante la mirada de todos.
Jinora iba cabizbaja mientras caminaba, era su primer castigo y no se sentía para nada bien. Iba a dar vuelta hacia la dirección cuando sintió que la tomaban de la mano.
- ¿Qué haces? - pregunto al chico mientras era guíada a otra parte de la escuela -. La dirección está por allá.
Él no se detuvo hasta que llegaron a un pasillo que daba a la terraza de la institución y salieron.
- ¿Por qué hemos venido aquí? - se quejó algo asustada de que algún encargado los viera.
- No voy a dejar que te pongan un reporte por algo tan tonto, aunque... no lo vuelvas a hacer, es decir, lo rebelde no es lo tuyo, je, je.
Después de eso quedaron en silencio un rato, hasta que ella se aventuró a romperlo.
- Y bueno, ya sabes, hemos hecho un trato... tendrás que hacer lo que ...
Se detuvo al ver que el chico se desabrochaba el cinto de su pantalón.
- ¡No la escena de Birdman! - exclamó con un fuerte sonrojo.
- Ya, lo siento, lo siento - dijo volviéndolo a abrochar entre risas -. Tenía que hacerlo, bueno ¿Entonces?
Jinora se mordió el labio inferior, algo nerviosa por lo que le pediría. Después de todo sería su primer beso.
- Bien, cierra los ojos.
- ¿No me irás a lanzar del edificio, o sí? - pregunto risueño, mientras cerraba sus ojos obedientemente.
- No...
Kai se quedo callado esperando lo que fuera que Jinora hiciera o dijera. Fue paciente al no abrir ni un poco un ojo.
Jinora se acercó más y dejando una mano en el hombro del muchacho acercó su rostro al de él y de una manera lenta poso sus labios en los de Kai.
Él sorprendido no supo como reaccionar, pero después de unos segundos empezó a corresponder sin ocultar un fuerte sonrojo.
El beso fue torpe y lento, pero nada mal para ser el primero, o bueno, al menos era lo que ellos pensaban. Para los dos fue simplemente perfecto.
- Sabes, hay algo que quería decirte - comenzó el chico una vez que se hubieron separado, riendo nervioso -. Y creo que es el momento perfecto...
Jinora sólo lo miraba expectante, aún intentando salir del ensueño.
- Yo...huh...tú... tú me g...
Sin embargo no pudo continuar, pues el en ese exacto momento la campana sonó, anunciando el cambio de hora. Kai suspiró de manera sarcástica, eso no era a lo que se le llamaba salvado por la campana.
- Supongo que ya es hora de volver - dijo ella burlona.
Kai asintió con la cabeza y cogió su mano mientras comenzaban caminar de vuelta al salón.
- Tengo que pedirte más comida de vez en cuando - dijo con una sonrisa.
- Vaya que debes - le respondió de igual forma.
FIN.