Disclaimer: Ninguno de los personajes de la saga Harry Potter me pertenecen, son propiedad de la ingeniosa J. K. Rowling. Sólo me pertenecen los personajes restantes y el fic. Sólo por diversión.


La sala de reuniones del Consejo era un gran hervidero de murmuraciones por doquier. Era la primera vez en toda su extensa historia que se convocaba a una reunión extraordinaria a altas horas de la noche y más aun con todos los eruditos de cada respectivo reino, surgiendo la preocupación y la curiosidad a partes iguales en los presentes.

Como si hubiera sido ensayado, el silencio se hizo presente instantáneamente al abrirse las puertas, señal de que los monarcas harían su entrada al majestuoso salón. La tensión también se instauró en el lugar al reflejarse un mal augurio en los rostros de los líderes y de sus respectivos herederos, quienes con absoluta solemnidad ocuparon sus lugares. Después de algunos minutos de inquietud, Emerick inició la reunión.

─Se preguntarán el motivo por el cual se ha convocado una reunión extraordinaria y a estas horas de la noche. Pues bien, la situación es la siguiente: han asesinado a nuestra intercesora.

La ola de murmuraciones no se hizo de esperar ante tal revelación, pero rápidamente fueron acalladas con un gesto de líder arthemiano para proseguir con su más que pensado discurso.

─El mundo mágico ha infringido varios acuerdos en los últimos meses, causando estragos e invasiones en nuestras fronteras, y aun así les tuvimos consideraciones al restarle importancia a la situación. Hemos sido pacientes, les hemos dado muchas oportunidades. Pero esto… ─el soberano respiró profundo al sentir que su voz se entrecortaba─. Esto es imperdonable. Y es por ello que, por unanimidad, el Tridium le declaró la guerra al mundo mágico.

Los jadeos, rumores y opiniones fueron nuevamente música de fondo en el gran salón.

─El asesinato de Jessica es una falta muy grave al Tridium, pero no estoy de acuerdo con iniciar una guerra. ─le dijo Selene a su hermano, aprovechando el bullicio de los presentes por la noticia─. ¡Por Hashmir y todo el antiguo consejo! Somos asarianos, la paz es nuestra bandera.

─La paz es un estado inestable y limitable a pesar de representar lo contrario, querida hermana. Podemos hacer todo lo posible por cuidarla y mantenerla, pero llegará un momento en que ya no se podrá hacer más y se quebrará. Y, como puedes ver, la paz entre Consejo y el mundo mágico llegó a su límite ─respondió Elliot sin dejar de mirar a Emerick, quien prosiguió con su intervención─. Al igual que tú prefiero arreglar las discordias de otra manera que no sea la violencia, sin embargo, hasta para mí tal muestra de indignación es válida.

La princesa lo miró incrédula─. ¿La unanimidad es cierta? ¿Mi madre y tú votaron a favor? ─el pelinegro asintió–. Pero… pero…

─Pero nada, Selene. ─el heredero asariano adoptó una expresión seria─. No hubiese servido de nada negarnos, Acquarius y Arthemius estaban de acuerdo. Sin embargo, hasta nosotros admitimos que la situación con el mundo mágico ha llegado a un punto muy grave y que no puede dejarse de lado así nada más ─señaló disimuladamente con la mirada hacia el trono de Arthemius antes de mirarla nuevamente─. ¿Alguna vez has visto a Emerick y a Dimitri tan determinados con un tema de guerra?

Selene negó con la cabeza─. Es la primera vez que concuerdan con Acquarius en una decisión drástica ─suspiró con tristeza─. Siempre han sido los que han mantenido el raciocinio en el Tridium. Pero ahora también han perdido la objetividad.

─ ¿Y eso no te dice nada? ─el chico sonrió mientras negaba con la cabeza─. El único que siempre ha mantenido a raya los arrebatos de Raynor es Emerick. Mas ahora, la venganza es la bandera de ambos. Así que, como comprenderás, esta guerra no tiene vuelta atrás.

─La única posibilidad de enmendar todo esto…

─Disculpe mi señor…

La voz de Sir Kilian llamó la atención de todos, incluyendo a los sucesores asarianos.

─En vista de todo lo mencionado, ¿Qué pasó con el cuerpo de la senadora?

Todos centraron nuevamente su atención al arthemiano, esperando la respuesta a esa interesante pregunta.

─Yo les dije que debíamos reclamar el cuerpo de Jessica, pero no estuvieron de acuerdo conmigo ─reprochó Raynor desde su trono.

─Y ya te explicamos que sus familiares son los únicos con derecho a reclamarla ─replicó Emerick con cierta molestia.

─Es de conocimiento general que su familia no está en contacto con el mundo mágico, ¿Cómo se encargarán de la reclamación? ─esta vez intervino Sir Baltasar, dándole la razón a su soberano.

Marian aclaró su garganta antes de responder con voz neutra─. El señor Snape ya se… encargó de ese penoso asunto. Él será quien le notifique la lamentable noticia a la familia Rosenbaum.

─ ¿Y cómo estás tan segura de ello? ─el líder acquariano se levantó con brusquedad de su asiento─. Lleva días sin presentarse ante nosotros, nadie del Consejo lo ha visto. De seguro también lo asesinaron.

─Phillipe me informó de la presencia de Snape en la mansión con el… cuerpo de Jessica ─culminó la líder asariana con un sollozo que fue amortiguado por el abrazo tranquilizador de su hija.

─Pues en ese caso, deberíamos ir hasta la mansión y hacernos cargo del asunto tal como lo sugirió mi padre ─habló Patrick con una seriedad poco conocida en él─. Jessica estaba bajo nuestra protección, nos hicimos responsables de ella ante su familia y como tal, somos nosotros quienes debemos darle la cara a los Rosenbaum ante esta desgracia.

─Es cierto lo que planteas, Patrick. Ante la familia de Jessica, los villanos seremos nosotros porque nos comprometimos en su protección y… he aquí el resultado ─dijo Dimitri. Y antes de que el joven acquariano diera por hecho su victoria en la discusión, el sucesor arthemiano prosiguió─. Sin embargo, y de acuerdo a los estatutos del Consejo, el señor Snape pasa a ser intercesor temporal del Tridium, y en sus funciones está el manejo de asuntos entre jurisdicciones, incluyendo el mundo muggle. Además, estoy seguro que él mejor que nadie tratará el tema con toda la susceptibilidad que merece.

─ ¿Abordará el tema mejor nosotros? ─bramó Patrick─. ¡Jessica era importante para nosotros! Al menos para mi padre y para mí lo era ─exclamó, ganándose frías miradas por parte de los otros líderes─. ¡Mientras que para Snape será solo un cumplimiento de funciones, para nosotros será entregar a una persona valiosa en nuestras vidas!

─Te equivocas, Patrick ─intervino Marian, ya más calmada─. Snape no está viviendo un mundo de rosas en estos momentos. Te puedo asegurar que esta situación es tan difícil para él como para nosotros.

─ ¿Y cómo estás tan segura de eso, Marian? ─inquirió Raynor molesto─. Snape y Jessica eran solo compañeros de labor, nada más. Sin contar que en ningún momento se preocupó por su desaparición.

─ ¿Y cómo estás tan seguro de ello, Raynor? ─La asariana le devolvió gustosa la pregunta al acquariano─. Para tu información, la desaparición de Snape fue justamente por la incansable búsqueda que organizó para localizar a Jessica. Ella era muy especial para él, él más que nadie estaba interesado en encontrarla.

Raynor frunció el ceño─. ¿Él más que nadie? ¿A qué te refieres?

─Esto no me correspondía decirlo, pero… En fin, tarde o temprano se van a enterar. ─Marian suspiró, mirando a Raynor y a Patrick con cautela antes de soltar la bomba del siglo. Al menos para ellos de seguro que así sería─. Jessica y el señor Snape eran pareja desde hace meses.

Si a la asariana le hubiesen dicho con anterioridad de que la noticia de la relación de sus colaboradores dejaría pasmado al temerario rey de Acquarius, desde hace mucho que hubiese usado tal información. Su cara era todo un poema, al igual que la de su hijo. Lástima que ese momento no podía disfrutarlo como hubiese querido desde un principio y que no estuviera su querida Jessie para contemplarlo con ella.

─ No es el momento ni el lugar para hacer esa clase de bromas, Marian de la Roquet ─espetó el rey acquariano, su rostro había adquirido un fuerte rojo que bien podía compararse con un tomate.

─No es ninguna broma, Raynor Deus Benetan ─espetó de igual modo la soberana asariana. Odiaba que él la llamara por su nombre oficial completo, así como también odiaba que él pensara que tenía voluntad de gastar bromas en un momento tan crítico como ese─. Ellos formalizaron su relación a finales del año pasado.

─ ¡Eso no puede decir posible! ─bramó Patrick, levantándose intempestivamente de su lugar─. ¡¿Tiene pruebas de ello?!

─Jessica me lo confesó en la fiesta anual del Tridium. ¿Acaso no recuerdas cuando interrumpí unos de tus innumerables intentos de sacarla a bailar? ─replicó la pelinegra con sorna, recibiendo una furiosa mirada por parte del príncipe.

─Además…

Todos dirigieron la mirada a una muy apenada Selene, que miraba con culpabilidad al ojigris. Sin embargo, ella no podía permitir tal ataque a su madre. Su familia estaba por encima de su amistad y de sus sentimientos hacia el acquariano. Con esa afirmación, la chica se armó de valor, alzó firme la mirada y respondió.

─Soy testigo de que comenzaron a entenderse después de la selección. Ejemplo de ello es que los vi besándose en la fiesta del Elypsium y, en una breve visita a nuestro reino a finales del año pasado, ella me confirmó que tenía una relación con Snape.

─ ¿Qué Jessica te lo confirmó? ¿A ti? ─el rubio emitió una fría carcajada─. Eso es poco probable ya que no es secreto que tú y Jessica eran como el agua y el aceite.

─Bueno, eso es cierto ─admitió la rubia totalmente sonrojada─. Sin embargo, ella y yo hablamos y arreglamos nuestras diferencias. No éramos las mejores amigas, pero había cordialidad entre nosotras.

─Eso es cierto, me consta ─comentó Dimitri, mirando compresivamente a la chica al sospechar el motivo de la repentina cordialidad.

─Sus majestades ─habló Sir Gautier─. Nos estamos desviando de lo que verdaderamente requiere de nuestra atención. Ya quedó claro que el señor Snape se hará cargo de todo lo referente a mademoiselle Rosenbaum por… varias razones. Nosotros estamos de acuerdo ─expresó señalando a los demás eruditos quienes asintieron a favor del mago─. Ahora, lo que debe estar a discusión es la declaración de guerra. ¿Cuándo se dará inicio el ataque?

─Disculpen esta penosa discusión ─manifestó Emerick, fulminando con la mirada a Patrick y a Marian─. Tienen razón, en estos momentos hay un asunto más importante que requiere de nuestra atención. Contestando a su pregunta Sir Gautier, el ataque se hará dentro de seis días, al atardecer.

─ ¡Y yo sigo diciendo que le estamos dando demasiado tiempo a esos miserables! ─bramó Raynor desde su trono. Si antes estaba furioso, ahora tenía instintos asesinos. ¿Su princesa tuvo una relación con el pocionista? ¡Maldita sea la hora en que decidieron meter a ese aprovechado en Crystal Manor! Pensó casi al borde de la histeria. El atrevimiento de Snape no se iba a quedar así, eso era seguro.

─Y yo te recuerdo, Raynor, que la decisión fue aprobada por la mayoría, incluyendo a tu sucesor. Así que te agradecería que te guardaras tus comentarios si no vas a decir algo de provecho ─espetó el arthemiano, dedicándole una fría mirada a su camarada. El acquariano estaba por replicarle cuando sintió un apretón en el hombro por parte de su hijo. Al dirigir la mirada a su sucesor, vio en aquellos grisáceos ojos que él también compartía la misma rabia que sentía él, pero que no deseaba más discusiones. No de momento al menos. Con un asentimiento de cabeza, Raynor fijó nuevamente su vista hacia su camarada, dedicándole solo una mirada de desprecio.

─Caballeros ─intervino Elliot al ver que el ambiente se había tensado más de lo necesario─. Creo que ya es hora de finalizar la reunión. Por favor, terminen de dar las pautas y enviemos a nuestra gente a descansar.

Emerick asintió y se dirigió nuevamente a la pequeña multitud─. Solo resta decirles que, dentro de unas horas, cada monarca organizará a sus respectivos reinos para comenzar con los preparativos. Solo… solo les pido la mayor colaboración posible. ─el mago miró a sus súbditos de forma condescendiente, pero con la rabia brillando en sus amielados ojos─. Sé que ésta guerra es un cambio muy drástico después de tantos siglos de paz. Sin embargo, ¡debemos demostrarles que nadie insulta y agrede a nuestra unión y salen ilesos! ¡Nadie ataca a uno de los nuestros y queda sin castigo! ─aplausos y gritos de guerra se escucharon por doquier─. Dentro de seis días, el mundo mágico aprenderá que retar al Tridium tiene sus consecuencias. Dentro de seis días… el mundo mágico desaparecerá.


¡Y ya comenzamos con la segunda parte a petición del público!

Espero que les guste, tal como les gusto la primera parte :)

Les pido paciencia, estoy muuuuuuuy atareada con la tesis así que iremos a paso de Luis Fonsi, es decir: Despacito jejejejeje

Nos leemos después. Saludos.