Les diré una cosa, he estado mucho fuera de práctica aquí. Pero estos 2 personajes, los adore.


¿Podrías tolerar un mundo de demonios ejecutores, por la compañía de un ángel?. La vida aparentaba ser un juego de azar. Los deseos ocultos y la moral en plena consciencia, no podrían ser simplemente admitidos como un juego ingenuo. Mirai Trunks junto con Bra, ambos eran inexpertos en un amor secreto. Una sensibilidad que envolvía a los dos hermanos, viéndose a escondidas. Y al principio no era nada, más que un breve enamoramiento de entonación inocente y de más espontáneo. Una elemental fascinación que dio por deducción, que tanto el muchacho de cabellos lilas, como la jovencita de cabellera turquesa, se habían salvado paralelamente de todas sus pesadillas persistentes que mantenían encerrados en sus corazones.

El joven guerrero, ya no se consideraba una marioneta en aquel mundo desolado e insensible, porque Bra se acercó a él, y su alma llena de tanta culpabilidad con una ligera pesadumbre por la dimensión tan rígida en el que él vivía, le devolvió la codiciada esperanza. Trunks consideraba que su hermana del aquel tiempo presente, tenía algo dulce, así como su carácter severo, hermosa pero brutal en sus defensas, algo pura y también contaminada del mundo perdido, pero abriéndose a la madurez.

Se valdría deducir, que todas las ciudades estaban en la ruina, después de la eliminación de los androides, pero con un aire de calma que se respiraba en el ambiente, cuando se viene algo remotamente después de toda la tempestad de desde hace años. Las palabras enfiladas, como el amor, la batalla y la valentía, se enmarcaban en un nuevo viaje de reconstrucción. Mismos léxicos resonando en la mente de todos los sobrevivientes en la Capital del Oeste.

El cielo era un azul impreciso, pero lo suficiente brillante como para definir que era verano. El día era encantador, había algo místico, tan apasionante como el color del sol, así como los diferentes matices de los alrededores, jugándose la inocencia y el impulso por cumplir los más alocados sueños.