Bueeeno… ¿qué les puedo decir? Desde que revelaron el apellido de Levi en el manga de SNK de nuestro queridísimo(?) Isayama, he visto que hubo mucha polémica sobre todo contra las Rivamikas ya que "se supone" que al compartir apellido nuestros queridos Levi y Mikasa automáticamente resultan ser familiares… En mi humilde opinión personal, eso no significa nada. Quiero decir ¿Cuántas personas comparten apellido y no son familia? Y bien, sé que se ha dicho varias cosas de los Ackerman dando a entender que hay algo en su genética que los vuelve tan… badasses xDDD por lo que alguna relación deben de tener estos dos, peeero, aun con eso, no creo que sea un vínculo cercano, me baso en el físico del padre de Mikasa (alto, rubio), muy en contraste de Kenny y Levi (azabaches) y si nuestra Mikasa es azabache, es heredado de su madre, ¿no? Por lo que "llego a entender" que el señor Ackerman (padre de Mikasa) no es familiar tan directo de Kenny, ni de la madre de Levi, mucho menos de Levi. En fin.
Dicho lo anterior quiero decir que… ver tantas discusiones sobre que las Rivamikas apoyamos el incesto etc etc. Terminó por crearme una idea rara en mí para ser franca, porque a pesar de que no creo que ellos sean familia, mi mente un tanto sucia comenzó a maquinar una historia donde SÍ son hermanos y donde SÍ cometen incesto.
Sé que es un tema delicado y que hay muchas personas que lo ven muy mal, otras, como yo, que lo vemos como algo que existe y que puede pasar (sin satanizar, pero tampoco apoyar) y otras que lo apoyan. Así que de una vez advierto a quienes disgusten al extremo de esto, que este escrito es simplemente producto de tanta polémica que he visto y que si les molesta, muy simple: NO LEAN.
SNK no me pertenece, todos los créditos a su creador Hajime Isayama.
Te protegeré toda la vida.
"¡Levi! ¡Ya estamos aquí! ¡Ven para que conozcas a tu hermanita!" Llamó felizmente el señor Sylvain Ackerman a su primogénito: el pequeño Levi Lance Ackerman, de tan solo 2 años y medio de edad.
El pequeño era un niño sano, de cabello negro, de personalidad algo seria para su edad, de mirada penetrante, ojos pequeños y de un raro color azul grisáceo.
Los señores Ackerman por fin habían regresado después de que durante la cena de la noche anterior, la señora Allison había comenzado a sentir las primeras contracciones que anunciaban la llegada del segundo hijo a ese feliz matrimonio.
El matrimonio Ackerman no cabía de felicidad luego de enterarse de que pronto llegaría otro miembro a la familia, más aún cuando se enteraron que se trataba de una niña: la princesa de papá.
El pequeño Levi no compartía esa felicidad, a pesar de su corta edad entendía muy bien (o eso creía) lo que pasaría: adiós toda la atención hacia él.
FLASHBACK.
"Yo no quiero un hermano" Había dicho Levi, tan claramente como lo habría dicho un niño de mayor edad, luego de que su mamá la comunicara la llegada de un nuevo miembro a la familia.
"Pero si tienes un hermano, tendrás un compañero de juego." Había dicho dulcemente la señora Allison a su pequeño.
"Nicholas juega conmigo." Había dicho en argumentación el niño.
"Pero Nicholas no puede estar todo el tiempo aquí, ni tú en su casa. En cambio, cuando nazca tu hermanito, él podrá jugar contigo todo el tiempo, solo que tendrás que esperar un poco. Cuando nazca será tan pequeño y frágil que necesitará que papá, tú y yo lo cuidemos."
"Está bien." Había dicho sin ganas ni felicidad el pequeño mientras observaba el lugar donde su madre posaba suavemente sus manos con una dulce sonrisa en su rostro.
FIN DE FLASHBACK.
Levi había "sufrido" durante el embarazo de su madre. La "cosa" que crecía dentro de la panza de su mamá le había robado la atención de todos. Ahora, caminaba obligado hacia el cuarto de sus padres, apenas se acercó un poco comenzó a oír las voces de sus padres.
"¿No es el bebé más hermoso que has visto en la vida?" había sido su madre.
"No me canso de verla, es hermosa" había respondido su padre.
Al llegar, el niño se recargó en el marco de la puerta observando como su madre le sonreía al bulto envuelto en una cobija rosa y su padre se asomaba igualmente sonriente. Allison alzó la mirada y se encontró con la mirada fría de su niño.
"Amor, ¿qué haces ahí? Acércate y conoce a tu hermanita" le dijo con dulce voz.
"No tengo ganas." Respondió sincero el niño.
"Levi..." se levantó un tanto fastidiado Sylvain por la actitud tan apática de su hijo hacia su hermana. Tomó al niño en brazos, el cual, se dejó cargar como si fuera solo un bulto y lo llevó hasta la cama donde su esposa los esperaba.
"Ponlo a mi lado" dijo Allison. Sylvain obedeció y dejó a Levi a lado de su madre. El niño bajó la vista y comenzó a juguetear con las agujetas de sus zapatos. "Amor, no puedes seguir así…"
"Yo les dije que no quería un hermanito…" dijo serio y sin levantar la vista.
"Lance, solo mírala. Es preciosa, parece una muñequita"
"A mí no me gustan las muñecas…"
Los señores Ackerman soltaron una risita por la respuesta dada por su pequeño. Sin duda era un niño muy listo y muy obstinado también.
"Bueno, no te gustan las muñecas, es cierto, pero seguramente te gustan las cosas bonitas y tu hermanita es muy bonita."
"Si la veo, ¿me puedo ir a jugar otra vez?" preguntó el niño, no quería seguir ahí.
"Sí, Levi."
El niño dejó de jugar con sus agujetas y se acomodó para por fin conocer a su hermana. Allison se acercó más a su hijo y levantó a la pequeña entre sus brazos. Levi observó un pequeño rostro algo arrugado, en su cabeza había unos cuantos cabellos negros.
"Está rara…" dijo el niño.
"Mírala bien, Levi."
Levi se acercó más, observó los rasgos de la niña: su piel era blanca, sus mejillas estaban sonrojadas, sus pequeños labios se miraban de un color rosa pálido, como el de la cobija con la que estaba envuelta, sus ojos estaban adornados por unas largas y tupidas pestañas, las cejas encima de sus ojos eran largas, delgadas y negras. Por primera vez, Levi sintió empatía por esa pequeña.
"Es muy pequeña" dijo con un tono de curiosidad.
Sylvain notó el pequeño cambio en la actitud de su hijo, lo tomó en brazos y se sentó a lado de su mujer acomodando al niño en su regazo.
"Es porque acaba de nacer. Así estabas tú también cuando naciste." Le dijo cariñosamente su padre.
"¿De verdad?" preguntó viendo a ambos.
"Sí, y tú papá y yo te cuidamos para que siempre estuvieras bien y crecieras sano y fuerte."
"Ella ahora necesita que también la cuidemos. Y tú nos vas a ayudar." Dijo el señor Ackerman.
"¿Cómo?"
"Pues estando al pendiente de ella, avisar a mamá o a mí cuando llore."
Levi volteó a ver a su hermanita, la pequeña dio un bostezo largo y abrió los ojos, Levi se encontró con los grandes ojos negros de la niña que lo miraron con curiosidad.
"Mira mi amor, él es tu hermano mayor: Levi Lance. Él te va a cuidar y a querer mucho y se van a divertir mucho cuando crezcas." Dijo Allison a su hija.
La niña seguía observando a su hermano, Levi levantó su mano y la acercó con cuidado a la manita de su hermana, la niña tomó con su manita la mano de su hermano y la apretó.
"Me está apretando la mano." Dijo divertido a sus padres.
"Te está saludando." Dijo Allison.
"¿Y cómo se llama?"
"Tu mamá y yo pensamos llamarla Mikasa."
"Hola Mikasa, me llamo Levi, soy tu hermano mayor. No estaba contento de que vinieras pero me has caído bien y te prometo que te voy a cuidar mucho para que crezcas fuerte y podamos jugar mucho."
La niña sonrió y Levi volteó a ver a sus padres.
"Tú también le caíste bien a tu hermana." Dijo Allison.
"Levi, como hermano mayor, debes saber que cuidarla será una responsabilidad tuya que durará toda tu vida. Aun cuando tú y ella sean grandes siempre debes velar por que nada malo le pase, por que nada la lastime o la haga llorar, ¿entiendes?" dijo Sylvain a su hijo
"Sí, yo la cuidaré" dijo sin dudar el niño "Te protegeré siempre" dijo viendo a los ojos a su hermana.
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El tiempo pasó y Levi procuró cumplir su promesa de cuidar siempre a su hermana: La atendía cuando lloraba, la cuidaba mientras dormía. Cuando la niña comenzó a tener suficiente fuerza, la enseñó a gatear y después, la ayudó con sus primeros pasos.
Jugaba con ella, le encantaba ver la sonrisa de su hermana.
Cuando Levi entró a preescolar, dejaba claras instrucciones a su madre para que cuidara bien a su hermana:
"A Mikasa le gusta jugar con sus muñecas en el patio, juega con ella y préstale mis carritos, también le gustan. Si se pone de mal humor, seguramente se cansó. Llévala adentro para que vea películas, le gusta mucho Peter Pan…"
Cuando el niño regresaba, su hermana corría a recibirlo.
"¿Te portaste bien?" siempre le preguntaba, la pequeña azabache asentía y Levi le regalaba un dulce.
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Cuando la niña tuvo edad para entrar a preescolar, Levi se encargó de advertirle a la educadora que no quería que su hermana llorara ni una sola vez. A pesar de que el niño solo tenía 7 años, su mirada era lo suficientemente amenazadora como para que la educadora hiciera todo lo posible para que ningún otro niño molestara a la pequeña princesa Ackerman.
Una tarde la pequeña Ackerman sorprendió a su hermano:
"¡Mamá, ya regresé!"
"¡Levi!"
Mikasa corría a recibir a su hermano mayor.
"Hola Mikasa, ¿qué hiciste hoy?"
"La señorita Julie nos pidió que dibujaramos a la persona que más queríamos"
"¿Ah sí? ¿Y cómo te salió mamá?" Mikasa le hizo señas a su hermano mayor para que se agachara un poco y poder contarle un secreto.
"Es que no dibujé a mamá" le dijo en susurros y al oído a su hermano.
"¿Entonces a quién dibujaste?" le preguntó en el mismo tono Levi.
"A ti." Le dijo sacando de la bolsa de su short una hoja de papel doblada que le entregó a su hermano.
Levi desdobló la hoja y vio el sencillo dibujo de su hermana: un circulo irregular representando su cabeza, coronada por rayones negros simulando su cabello, gran parte de su cuerpo era azul, seguramente lo dibujó con su uniforme del colegio, sus ojos eran pequeños pero su hermana había tratado de imitar su color, pues se notaba que había intentado combinar el color gris con el azul y, además, lo había dibujado con una gran sonrisa, que fue la característica que más sorprendió a la señorita Julie, pues recordaba que el niño Ackerman parecía más bien un niño malhumorado.
"Te quedó muy bonito, Mikasa." Y le dio un abrazo a su hermana.
"Levi, Mikasa, vengan a comer, su comida se va a enfriar." Llegó diciendo la señora Ackerman a sus hijos y se encontró con la tierna imagen de sus pequeños abrazados.
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Cuando Mikasa ingresó a la primaria, Levi procuraba ir a verla de vez en cuando para asegurarse que estuviera bien.
Hubo una ocasión en la que unos niños mayores, al estar jugando futbol, le propinaron un fuerte pelotazo a Mikasa, en ese entonces ella estaba en segundo grado y Levi en quinto, Levi llegó justo en el momento en el que su hermanita recibía el doloroso golpe, sabía bien que había sido un accidente, pero lo que no toleró fue que ninguno de ambos chiquillos ayudara a levantarse a su hermanita y ni siquiera ofrecieran una disculpa.
"¡Oigan ustedes, par de idiotas!" le gritó a los chiquillos, a uno de ellos ya se le notaba el crecimiento de bigote de puberto, el otro comenzaba con la aparición de acné, seguramente eran de sexto grado.
"¿Qué quieres?" dijo el chiquillo del bigote.
"La niña a la que golpearon es mi hermanita, discúlpense" dijo serio.
"Fue un accidente, mocoso."
"No me importa, la lastimaron y es lo menos que pueden hacer"
"No lo haremos. ¿Qué harás al respecto?
"Una opción es obligarlos, la otra es causarles el mismo dolor. Creo que lo justo es lo segundo."
Los niños de sexto se vieron uno a otro, y fue lo último que hicieron antes de caer sin aire al suelo pues Levi había actuado demasiado rápido y les había sembrado a ambos, a la vez, un golpe en la boca del estómago sofocándolos. Mikasa corrió a los brazos de su hermano.
"No todo el tiempo estaré contigo, Mikasa. Te enseñaré a que te defiendas sola, ¿sí?" Mikasa asintió.
"¿Te duele el estómago?"
"Ya no."
"¿Quieres un helado?"
"Ya me gasté el dinero que me dio mi mamá."
"Yo tengo dinero. Vamos por tu helado."
Después de ese incidente, Levi se dio a la tarea de enseñarle a su hermanita a pelear, aunque su mamá no estaba de acuerdo.
"No es para que busque pleitos, es para que nadie abuse de ella. No tiene que usar lo que le estoy enseñando si no es necesario, y ella lo sabe. ¿Verdad Mikasa?"
"Levi dice que solo pelee cuando me quieran hacer daño."
"En un año entraré a la secundaria y Mikasa se quedará sola. Quiero estar seguro de que ella estará bien."
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Al momento que Levi ingresó a la secundaria, las cosas comenzaron a cambiar un poco en la relación de los hermanos Ackerman, Levi comenzó a interesarse más en otras cosas, como salir con sus amigos… y amigas.
Mikasa notaba que su hermano pasaba la mayor parte del tiempo fuera de casa, después de regresar de la secundaria solo comía y salía, pues se iba con sus amigos al cine, al parque, a fiestas. A veces, llegaba con amigos y jugaba videojuegos hasta tarde con ellos.
Mikasa extrañaba a su hermano de antes, ahora solo platicaba muy poco con él.
"Levi."
"¿Qué pasa, Mikasa?"
"¿Ya no te gusta jugar conmigo?" preguntó tímidamente la niña.
"¿Por qué dices eso?" Preguntó extrañado el jovencito.
"Porque casi no te veo. Y cuando vienen tus amigos no me dejas que juegue con ustedes y cierras con seguro tu cuarto." Le dijo triste. Levi sonrió un poco y se acercó a su hermana.
"Verás, Mikasa. Yo ya crecí, un poco y, hay cosas que me interesan a mí que tú no estás preparada para ver, en primera porque estás chica aun y en segunda porque eres niña."
"¿Y eso qué tiene que ver?" Insistió la niña.
"Mucho. Porque eres mi hermanita y te quiero proteger. Mis amigos, muchos de ellos no tienen hermanas y no saben tratar a las niñas como tú, no quiero que te molesten ni que te incomoden. Si eso llega a pasar, me enojaría mucho con ellos y, seguramente me quedaría sin amigos." Le respondió de la manera más comprensiva que encontró.
"No los necesitas. Me tienes a mí." Dijo Mikasa de forma tan segura que sorprendió a su hermano, mayor.
"Mikasa… No es lo mismo un amigo a una hermana…" Trató de explicar Levi.
"A mí no me importaría quedarme sin amigas, si me quedo solo contigo. No me importaría." Le dijo viéndolo intensamente a los ojos, dejando sin capacidad de reacción al chico.
"Mikasa..."Intentó decir algo, pero la niña ya se había ido.
Ese día, Levi se dio cuenta del inmenso amor que su hermana menor le tenía, sin embargo, no estaba seguro si eso estaba bien, pero, no tenía otro ejemplo de hermanos para saber si todas las relaciones eran así. Supuso, que su hermana aun era pequeña y que cuando llegara a la edad que tenía él, abriría su mundo y vería que hay mucho más allá que solo él, al final de cuentas, él siempre había sido el mejor amigo de su hermana.
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Cuando Levi estaba en 3ro de secundaria, Mikasa estaba en sexto grado ya.
"Petra me ha pedido que sea su chambelán de honor en su fiesta de XV años, yo acepté." Había dicho Levi una tarde mientras comía después de haber regresado de la secundaria.
"¡Ay, qué lindo! ¿Cuándo será la fiesta?" preguntó su madre emocionada.
"En 4 meses más, sus papás están comenzando a preparar todo."
"Hacen bien. Yo creo que comenzaré a preparar la fiesta de Mikasa con un año de anticipación, porque, si te gustaría tener tu fiesta ¿verdad hija?"
"No es mi gran sueño, mamá, pero, si eso te hace feliz, no me opondré. Eso sí, quiero que Levi sea mi chambelán de honor también."
Levi y su madre intercambiaron miradas. La señora Ackerman estaba conmovida por el amor que su hija le tenía a su hermano mayor, en cambio, Levi se sintió un poco incómodo. Se supone que las niñas piden que su chambelán de honor sea el niño que les gusta… No, no… estaba loco… qué absurdo. Seguramente a su hermana aun no le interesaban los niños, de un modo romántico, claro.
Eso estaba bien, pensó, no tendría que estarla cuidando de pubertos pervertidos, por el momento.
"Acepto, hermanita" dijo con una amplia sonrisa. Mikasa volteó a verlo y de igual manera le sonrió.
…
Por fin llegó la famosa fiesta de XV de Petra, la familia Ackerman fue invitada al ser la familia del chambelán de honor de la festejada. Levi se había vestido de militar, a petición de la festejada. Mikasa miraba a su hermano charlar con demás muchachos vestidos igual que él, de pronto su hermano llegó hasta su mesa y presentó a sus amigos con su familia.
"Ellos son Gunter y Erd, papá. Mamá ya los conoce, los he llevado a casa a jugar videojuegos. Miren, ella es mi hermana menor, Mikasa."
"Es un gusto señor" dijeron al tiempo los muchachos.
"Hola Mikasa, Levi habla maravillas de su hermana menor siempre" dijo Erd.
"Eres una niña muy bonita, tal como nos había dicho. No me extraña que te cuide tanto." Le dijo Gunter.
Mikasa sonrió apenada y se sonrojó cuando Gunter le tomó la mano para besarla. Levi observó eso y empujó disimuladamente a su amigo para alejarlo de su hermana menor y se llevó a sus amigos de ahí.
…
Comenzó el vals, Petra pidió que su vestido fuera lo más parecido posible al de Cenicienta, "Qué boba" pensó Mikasa, sin embargo, poco le importó después cómo se viera la quinceañera, sino en cómo su hermano mayor la miraba. Levi le dedicaba una mirada muy dulce y una amplia sonrisa a la chica. Esa mirada solo se la había dedicado a ella, según recordaba. Eso le molestó mucho.
"Tu hermano se ve muy guapo, ¿no crees, hija?"
"Levi se ve guapo siempre, mamá, no sólo hoy."
Pero la emocionada madre poca atención le prestó al comentario un tanto extraño de su hija menor.
La fiesta continuó hasta muy entrada la noche, los señores Ackerman se retiraron del salón poco después de la media noche solo con Mikasa, pues Levi pidió permiso para quedarse a toda la fiesta prometiendo ir a casa apenas haya concluido y llamar para reportarse. Mikasa no estaba muy contenta. Su hermano pasó toda la noche pegado a Petra, hablaban muy pegados y se sonreían demasiado. Eso no le gustaba.
Otro día, algunas semanas después, eran vacaciones de verano, Levi estaba por ingresar a la preparatoria y Mikasa a secundaria, el mayor de los Ackerman llegó a la hora de la comida acompañado por nada más ni nada menos que Petra.
"Mamá, invité a Petra a comer con nosotros, espero que no te moleste." Dijo abrazando por la cintura a la castaña.
"Claro que no Levi, sabes que todos tus amigos son bienvenidos." Dijo amablemente la señora Ackerman.
"Es que Petra no es solo mi amiga, mamá. Petra y yo somos novios."
Mikasa ingresó al comedor justo en el momento en el que su hermano pronunció esas palabras y sin esperar ni un segundo más salió de ahí y subió corriendo hasta su cuarto, de donde no hubo poder humano que la sacara hasta que Petra ya no estuvo más en la casa.
"Mikasa, soy Levi, ¿estás bien? ¿Por qué no quisiste comer con nosotros? Ni siquiera saludaste apropiadamente a Petra…"
"No tenía hambre…" respondió desde su cama.
"¿Estás enferma?, Mikasa, ábreme"
"Vete, Levi. No me molestes."
"Mikasa, mamá está muy preocupada…"
"Estoy bien, solo no tengo hambre ni quiero estar con nadie."
"¿Te molestaste por lo de Petra?"
Mikasa se levantó de su cama y abrió la puerta. Levi vio el enojo en la mirada de su hermana.
"No me cae bien." Le dijo Mikasa directamente.
"Vamos Mikasa, ni siquiera has convivido con ella…"
"Pues solo de verla no me agrada. Es muy boba y fresa… y no sé, no me agrada. No me gusta."
Levi rio un poco "A quien le tiene que gustar es a mí, no a ti. Así como cuando tu salgas con un chico saldrás con el que a ti te guste, aunque me pese…"
"Petra es muy especial para ti, ¿verdad?"
"Así es, Mikasa. La quiero."
"¿Cómo a mí?"
Levi se sorprendió por la pregunta de su hermana.
"Son cariños diferentes, Mikasa. A ti te quiero muchísimo y ese cariño existirá toda mi vida. Con Petra, pues, ¿cómo explicarlo? Nada es seguro, quiero decir, no sé si estaré con ella para toda la vida, como mamá y papá, o solo será un tiempo."
Mikasa sonrió al escuchar eso, desconcertando aún más a su hermano.
"Entonces, no tengo de qué preocuparme." Y salió de su cuarto seguramente a la cocina a buscar algo de comer.
"Mikasa" Levi la llamó "recuerda que yo te protegeré siempre" Mikasa continuó con su camino y Levi la vio alejarse sin saber qué pensar de lo que su hermana acababa de decirle.
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Sé que tengo ya dos fics iniciados y que muchas de ustedes esperan sus respectivas continuaciones, no crean que me complicaré la vida con un tercero xD este será un fic cort caps a lo mucho, y, como pudieron ver en este capitulo inicial, solo centrándome en lo que nos interesa, sin tantos detalles ni adornos (me gustaría poderlo escribir como usualmente lo hago, pero es una historia que me llegó de pronto y que quise escribir pero por la escuela no puedo desarrollarla tanto como quisiera, me disculpo de antemano por eso) y… para que estén enteradas de una vez: subiré cap de esta historia una vez al mes u,u lo siento, la escuela, los otros fics, el capitulo 2 de "¿Dulce o travesura?" (por el próximo Halloween, por cierto, creo que ese será un fic anual xD )
En fin, espero saber que opinan sobre esta historia… y que no me satanicen ._.
Como dije al principio, soy neutral en este tema porque sé que es algo que existe y pues, realmente no me siento con tanta autoridad moral para juzgarlo de bueno o malo. (Yo me entiendo).