¡Wassup gente! Kamen Rider Predator esta de regreso y hoy les traigo la continuación de "Monster Musume no Uzumaki". Como siempre, les doy las gracias a los antiguos y nuevos lectores que leen y sigan esta historia, eso me motiva a continuar con esto al igual que mis nuevos proyectos. Antes que nada, quiero informarle que en este capítulo aparecerá un nuevo personaje a partir del capitulo 39 del manga de Monster Musume no Iru Nichijō, y uno de mis favoritas, además de tener cierto parecido a una Kunoichi de Konoha… el cual me olvide mencionar en el capitulo anterior. Bueno, sin nada mas que decirles… ¡disfruten del fucking capitulo!

"Blah blah blah" (Personajes pensando)

'Blah blah blah' (Personajes pensando)

Capítulo 39 – Saliendo con una zombi

Han pasado varios días desde el último episodio del programa "Monster Musume no Uzumaki". En ese episodio, Lala, la Dullahan, causó un caos en el hospital al convertir accidentalmente a la pequeña Yuuki en una zombi. Todo ocurrió porque un diente de Zombina terminó incrustado en la piel de Yuuki, provocando la zombificación.

Sin embargo, más adelante se reveló que Lala había removido ese diente sin permiso de Zombina, lo que desencadenó la confusión. La Srta. Smith no tardó en actuar, pero, fiel a su estilo, impuso arresto domiciliario no solo a Zombina, sino también a Tionishia, Manako y Doppel, argumentando que, como equipo, todas eran responsables. Esto dejó a las chicas MON en shock y sin poder participar en nuevas misiones por el momento.

Mientras tanto, en la playa del País de las Aguas Termales, la situación es muy diferente. Turistas y habitantes locales siguen comentando con entusiasmo lo emocionante que fue el último episodio del programa. A la vez, muchos especulan sobre qué ocurrirá en el próximo episodio, que se transmitirá dentro de tres días.

Anko Mitarashi se encontraba acostada en su cama dentro de la habitación de la cabaña, con vendas frescas en brazos y piernas. Aún sentía los estragos de su desafortunada caída por las escaleras desde el segundo piso. Había sido una consecuencia directa de la paciencia agotada de Kurenai y Yugao, quienes, cansadas de las órdenes abusivas de Anko, decidieron desquitarse dejándola caer por las escaleras.

Para su suerte, aunque no sufrió heridas mortales, sus brazos y piernas, ya debilitados por las fracturas previas a manos de Kagura, recibieron un impacto más severo al rodar escaleras abajo. Ahora, mientras Anko respiraba con dificultad y lanzaba alguna que otra queja dolorosa, Tsunade se encargaba de sanarla con su Chakra médico.

"Deberías considerarte con suerte" -comentó Tsunade sin apartar la vista de su tarea, mientras el brillo verde de su Chakra envolvía las extremidades de Anko- "después de tantas caídas y golpes, sigues viva. Como dice el dicho: 'hierba mala nunca muere'."

Anko soltó un suspiro dramático mientras dos torrentes de lágrimas falsas se formaban en sus ojos.

"¡Lo juro, he aprendido mi lección! ¡No abusaré más de mi suerte ni de mis amigas!" -gimoteó Anko, fingiendo arrepentimiento-.

Tsunade la miró con una mezcla de paciencia y severidad.

"Eso espero" -respondió la rubia- "pero eso no cambia el hecho de que sigues castigada por haber enviado ese mensaje innecesario a Kakashi. No había razón para informarle sobre los problemas del programa de Naruto."

Anko infló las mejillas, frustrada, pero aceptando su error. "¡Lo hice porque me preocupaba por la aldea! No pensé que eso terminaría así."

"Preocuparte es una cosa, Anko. Meterte donde no debes es otra" -Tsunade mantuvo un tono firme- "permanecerás aquí mientras tus brazos y piernas se recuperan completamente."

Anko asintió con la cabeza, aunque no pudo evitar preguntar con cierta inquietud. "¿Habrá alguien que me atienda mientras me recupero?"

Tsunade arqueó una ceja y mantuvo su tono sereno. "Kurenai y Yugao no están dispuestas. La próxima vez que las hagas enfadar, puede que te arrojen desde el tercer piso."

Un escalofrío recorrió la columna de Anko al imaginar esa escena. Se mordió el labio inferior y preguntó rápidamente: "¿No hay otra opción?"

Tsunade cruzó los brazos y dio su veredicto: "Tienes dos opciones: Ino o Kagura."

El color abandonó el rostro de Anko al escuchar el segundo nombre. Por un instante, recordó la paliza que Kagura le dio semanas atrás, y el miedo se apoderó de ella.

"¡Elijo a Ino!" -exclamó Anko de inmediato, casi desesperada-.

Tsunade mantuvo su calma, aunque internamente luchaba por no reírse ante la reacción de la pelivioleta.

"Hablaré con Ino para ver si acepta cuidarte" -dijo la Senju con seriedad- "pero más te vale no aprovecharte de ella. Sabes lo que podría hacerte si la haces enfadar, especialmente con las técnicas mentales de su clan."

Anko palideció por segunda vez.

"Tal vez… no fue tan buena idea elegir a mi antigua alumna…" -murmuró para sí misma, imaginando escenarios nada agradables-.

Tsunade, sin dejar de sonreír internamente, dio por terminado el asunto.

"Descansa, Anko. Te quiero en perfectas condiciones pronto. Y recuerda: no quiero más problemas."

Anko asintió débilmente, dejando caer la cabeza sobre la almohada, consciente de que sus días de convalecencia iban a ser largos… y complicados.

Las cosas siguieron de forma tranquila en la cabaña mientras las mujeres disfrutaban sus vacaciones. Tsunade, acompañada de Kurenai, Yugao y Kagura, prefería pasar los días descansando en la comodidad del salón o en la terraza de la cabaña, lejos del bullicio de los turistas. Aprovechaban cada momento para conversar, beber sake y relajarse bajo el sol, compartiendo anécdotas y olvidando las preocupaciones de Konoha.

Kagura parecía especialmente relajada, disfrutando del silencio y la compañía de las otras mujeres.

"Este es el tipo de vida que podría acostumbrarme a tener" -bromeó mientras estiraba los brazos y se dejaba caer en una tumbona- "sin jefes, misiones ni estrés."

Por otro lado, Sasame, Temari, Tayuya, Shion y Misaki preferían salir a explorar. Pasaban el tiempo recorriendo las playas cercanas, probando comidas locales, o visitando tiendas en las zonas turísticas. Temari se había convertido en la guía improvisada del grupo, gracias a su experiencia previa en la región, mientras que Tayuya se dedicaba a comentar lo "ridículamente turísticos" que eran algunos lugares. Shion, con su paciencia habitual, encontraba divertidas las quejas constantes de la pelirroja, mientras Misaki las observaba en silencio, como siempre.

Mientras tanto, Ino había aceptado con cierta resignación la tarea de cuidar a Anko, quien no la estaba pasando del todo bien en su habitación. A pesar de que Tsunade había sanado sus fracturas, la caída por las escaleras había agravado sus lesiones, dejándola bastante adolorida. Además, el hecho de haber sido enviada al "arresto domiciliario" en la cabaña la tenía de mal humor. Sin embargo, algo más parecía estar inquietando a Anko: cada vez que Ino entraba a la habitación para ayudarla, su sensei se mostraba inusualmente nerviosa, como si temiera decir algo equivocado.

"Es extraño verte así, sensei" -comentó Ino en un momento, mientras cambiaba las vendas de los brazos de Anko- "nunca pensé que te pondrías nerviosa tan fácilmente."

Anko, evitando el contacto visual, murmuró algo ininteligible y rápidamente cambió de tema, fingiendo estar más preocupada por su recuperación. Ino alzó una ceja, intrigada, pero decidió ignorarlo por el momento y centrarse en su tarea.

Los días pasaron sin incidentes, y el clima agradable de la región ayudaba a mantener el buen ánimo entre todas. El grupo se acostumbró al ritmo lento y relajado de las vacaciones, disfrutando del lujo de no tener horarios que seguir ni responsabilidades urgentes. La playa, con su arena suave y aguas cristalinas, se convirtió en el refugio favorito de muchas, especialmente después del atardecer, cuando las temperaturas bajaban y las risas llenaban la costa.

Finalmente, llegó el esperado viernes, día del estreno de un nuevo episodio del programa Monster Musume no Uzumaki. La emoción se sentía en el aire, y como era costumbre, todas se reunieron en la sala de la cabaña para verlo juntas.

Kurenai, Yugao y Kagura ya estaban acomodadas, cada una con una bebida en la mano, mientras que Tsunade revisaba que el televisor estuviera en el canal correcto. El ambiente era de relajación total, con algunas bocanadas de brisa marina que se colaban por las ventanas abiertas, refrescando la habitación.

Sasame, mirando alrededor, fue la primera en notar una ausencia.

"¿Dónde está Ino? Pensé que ya estaría aquí" -pregunto Sasame-.

Tayuya, como siempre directa, soltó: "Tal vez la rubia se quedó dormida o se cansó de esta tontería y se fue a la playa."

Antes de que alguien respondiera, Tsunade intervino con su tono despreocupado. "Ino se ofreció a cuidar de Anko. Ya saben, después de que ciertas personas decidieran lanzarla por las escaleras."

Kurenai y Yugao no mostraron ni un ápice de remordimiento. Ambas se encogieron de hombros y, al unísono, declararon: "Se lo buscó."

En ese momento, la puerta del pasillo se abrió y apareció Ino, entrando con su habitual energía.

"Anko-sensei ya tomó sus medicamentos y se quedó dormida" -anunció mientras se dejaba caer en el sofá- "¿Me perdí de algo?"

Sasame sacudió la cabeza con una sonrisa.

"Llegaste justo a tiempo. El programa está por empezar" -menciono la pelinaranja-.

Temari se cruzó de brazos, mirando la pantalla del televisor con cierto escepticismo. "Espero que este episodio sea mejor que el último. Lo de la niña zombi fue... complicado."

Tsunade, tomando el control remoto, sonrió. "Bueno, ya lo descubriremos. Ahora cállense y disfruten."

El sonido de la introducción del programa llenó la habitación mientras todas se acomodaban, listas para disfrutar del nuevo episodio de Monster Musume no Uzumaki. Afuera, el sol empezaba a ocultarse en el horizonte, pintando el cielo con tonos anaranjados, mientras el sonido del oleaje se mezclaba con las risas ocasionales que llenaban la cabaña.

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"¡Lo sentimos muchísimo!" -exclamo Naruto arrodillándose frente a las chicas de MON. Junto a él, también esta Lala arrodillada-.

Naruto y Lala fueron al departamento donde viven Zombina, Manako, Doppel y Tionishia para disculparse lo que sucedió en el hospital con el pequeño incidente de la pequeña Yuuhi Hajime que se convirtió en zombi por culpa de Zombina, quien al parecer perdió uno de sus dientes y termino atorado en la piel de la pequeña, causando una zombificación en ella. Pero Naruto descubrió que Lala es la responsable que le arranco uno de los dientes de Zombina con un alicate. Es por eso que estaban arrodillados frente a los miembros de MON mientras se disculpaban una y otra vez.

"¡Por culpa de Lala todas fueron castigadas! ¡¿Cómo podemos compensarlo?!" -Naruto volvió a disculparse una vez más frente a las chicas que solo lo miran tranquilamente, excepto Manako que luce apenada- "¡vamos Lala, discúlpate!" -levanto su cabeza y le dijo a la Dullahan que se disculpara, después de todo, ella es la responsable del problema-.

"S-si inclino mi cabeza con vergüenza- ¡Wah!" -dijo Lala que grito cuando su cabeza se separó de su cuerpo y cayó al suelo-.

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"¡HAHAHA! ¿Viste eso? ¡La cabeza de Lala salió volando!" -exclamó Tayuya, soltando una risa escandalosa-.

"Esto no puede ser real…" -dijo Temari, riendo a carcajadas- "¿Cómo puede pasar algo así tan seguido en ese programa?"

"Pobre Naruto..." -Shion suspiró con una sonrisa- "siempre metido en cosas raras."

"¿Por qué no sujetan la cabeza de Lala con algo? No puede ser tan difícil" -comentó Misaki, sin sorprenderse en lo más mínimo-.

"Eso es como pedir que Mero deje de ser fan de la tragedia" -añadió Kagura, con un tono seco-.

Todas asintieron al escuchar el comentario de Misaki, y una risa general se extendió por la habitación.

"¿Y dicen que esto fue por un diente perdido?" -preguntó Yugao, incrédula- "ese equipo es un desastre."

"Definitivamente, no quiero estar cerca de esa tal Lala" -agregó Kurenai, sonriendo de lado-.

Sasame se tapó la boca, tratando de contener una risa. "¡Naruto siempre termina disculpándose por cosas que ni son su culpa!"

"Y lo peor es que lo hace con tanta seriedad..." -añadió Ino, riéndose-.

La escena siguió provocando carcajadas entre todas, mientras Tayuya recuperaba el aliento.

"Este programa nunca decepciona" -opino la Uzumaki-.

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"No, en serio, está bien" -dijo Zombina para que el Uzumaki deje de disculparse-.

"Esa chica enferma no iba a lograrlo, ¿verdad?" -dijo Doppel de lo más tranquila-.

"De hecho, ¡su mami y papi nos agradecieron por ello!" -menciono Tionishia con una gran sonrisa-.

"Por supuesto, la Srta. Smith lo sabe" -dijo Manako para sorpresa del Uzumaki-.

"¡Todo este asunto del arresto domiciliario es solo para guardar las apariencias!" -revelo Zombina- "¡así que no tienes que compensarnos ni nada! De cualquier manera, hemos estado esperando por un descanso. Y deja de ser tan amable con nosotras todo el tiempo. ¡Relájate y tómalo con calma!"

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"¿Qué demonios...?" -Tsunade frunció el ceño, sorprendida- "¿Todo ese escándalo por nada?"

"Eso sí que no me lo esperaba" -añadió Kagura con calma- "parece que les salió bien la jugada."

"Entonces, ¿todo esto fue una excusa para darles vacaciones?" -preguntó Temari con una ceja alzada- "qué conveniente."

"¿Y el arresto domiciliario era puro teatro?" -Tayuya soltó una carcajada sarcástica- "me agrada cómo piensan."

Kurenai cruzó los brazos, pensativa. "Tiene sentido. Si se armaba un escándalo público, eso complicaría las cosas."

"Y de paso se aseguran de que no haya más 'accidentes' con zombificaciones." -añadió Yugao- "listo y resuelto."

"Honestamente, me parece inteligente" -comentó Sasame- "pero me pregunto si Naruto lo entenderá o terminará preocupándose más."

Ino soltó un suspiro. "Naruto siendo Naruto... Seguro no dejará de disculparse hasta que MON lo obligue a relajarse."

"Pobre chico, siempre tan bondadoso" -agregó Shion, sonriendo ligeramente- "es como si llevara la carga del mundo en los hombros."

Misaki, con los brazos detrás de la cabeza, se encogió de hombros. "Bueno, al menos todo salió bien. ¿Y quién no querría unas vacaciones forzadas?"

La sala se llenó de risas suaves mientras las mujeres asimilaban el inesperado giro de la escena, disfrutando de la inesperada ligereza del momento.

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"Pero podría causarles algunos problemas en el futuro… por ejemplo, para recibir aumento o ser ascendidas…" -insistió Naruto sintiéndose culpable de lo que hizo Lala. Y hablando de la Dullahan, su cuerpo trata desesperadamente atrapar la cabeza mientras daba vueltas en el aire-.

"¡Siempre te preocupas demasiado!" -señalo Tionishia. Ella le encanta ese lado amable de Naruto por preocuparse por todas-.

"En realidad no tienes que preocu- ¡MPH!" -Manako fue callada por Zombina que le tapó la boca con una mano-.

"Bueno, si insistes…" -decia con una gran sonrisa- "¡queremos que tengas una cita con cada una de nosotras!" -pidió Zombina para sorpresa de Tionishia, Doppel y una apenada Manako-.

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"¿¡Qué demonios dijo!?" -exclamó Ino, sentándose al borde de su asiento- "¡Naruto no tiene que salir con ellas!"

"¡Esa maldita zombi se está aprovechando!" -bufó Sasame con indignación- "solo porque él es demasiado amable..."

Shion, frunciendo el ceño, cruzó los brazos con evidente molestia. "No es justo. Aún tiene una promesa pendiente conmigo, ¿y ya está saliendo con otras?"

Misaki, que estaba a su lado, se cubrió el rostro con una mano. "Aquí vamos otra vez..." -murmuró para sí misma- "tres años y sigue esperando que Naruto-san cumpla con aquella promesa…"

Tsunade soltó una carcajada baja, claramente entretenida con la situación. "Parece que Naruto tiene más problemas amorosos de los que puede manejar."

Temari se río junto a Tayuya. "Si le toca cumplir esa petición, no va a salir vivo" -bromeó Temari-.

"Pobre Naruto..." -comentó Kurenai con una sonrisa divertida- "al final, su amabilidad siempre lo mete en problemas."

Yugao asintió, pero con una leve sonrisa. "Conociéndolo, igual se sentirá obligado a decir que sí."

"¿Una cita con todas ellas?" -dijo Kagura, arqueando una ceja- "Naruto definitivamente tiene un imán para los líos."

"Pero debo admitir que Zombina tiene agallas" -añadió Sasame- "eso de pedir citas como condición fue... audaz."

Shion bufó, cruzando las piernas. "No le veo nada audaz. Lo que yo veo es que no se le da prioridad a lo importante."

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Al día siguiente, Naruto se encuentra en el lugar donde tendría su "cita" con Zombina. El lugar donde tenía que esperar a Zombina está ubicado a unos metros cerca del puerto de la ciudad, un sitio extraño para tener una cita, pero Zombina lo podio por alguna razón. Después de todo, es su manera de pagar los problemas que causo Lala. Luego saco su teléfono al recibir la notificación de mensaje, al revisar el mensaje, se percata que lo envió Zombina. El mensaje que le mando decia: "¡Lo siento mucho! ¡Llegare un poco tarde! ¡Solo espera un poco más!"

"Llega tarde, eh… como sea, Zombina…" -dijo Naruto guardando su teléfono- "¿Qué es lo que intenta hacer llamándome a un lugar como este? ¿Vamos a ir a ver otra película de zombis?" -menciono mientras recuerda su cita falsa con Zombina. Luego Naruto noto algo que esta debajo de sus pies- "¿Qué es esto? ¿un sobre rojo?" -levanto el sobre tirado en el suelo- "quizás se le cayó a alguien. Debería revisar que es lo que tiene…" -abrió el sobre rojo y ver su contenido. Al ver lo que hay dentro del sobre, se llevó una sorpresa- "dinero… un certificado de matrimonio… una foto y… ¡¿cabello?!" -exclamo lo último al ver lo que contiene el sobre rojo- "¿Qué demonios? Esto es muy extraño. No me digas que la persona que escribió esas cartas amenazantes sigue por aquí…" -pregunto preocupado- "debería llevar esto a la policía. Ah, pero Zombina va a…"

"¡WEI!" -se escuchó un grito cerca de donde esta Naruto, quien miro a su alrededor, buscando a la persona que grito de esa forma-.

Luego Naruto escucho el sonido de unos pasos acercándose, volteo en dirección de donde viene aquel sonido y alguien se acercaba. Se trata de una chica de estatura media, su cabello azul oscuro está bastante despeinado en la parte delantera, pero trenzado en una trenza larga en la parte trasera. Su cabello está bastante despeinado en la parte delantera, pero trenzado en una trenza larga en la parte trasera. Su vestimenta es una blusa sin mangas, una faja tradicional, falda corta tipo escolar, sus brazos son cubiertos por unas mangas que se vuelven más anchas y holgadas conforme llegan al área de las manos, las cuales son cubiertas por estas, un sombrero rectangular típico de la antigua china, usa unas calcetas largas y unos zapatos tradicionales chinos. Naruto se quedó observando aquella chica que se le acerca, preguntándose a que vino a este sitio.

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"¿Quién es esa chica?" -preguntó Ino, entrecerrando los ojos- "hay algo en ella… como si la conociera de algún lado."

"Sí, yo también lo siento" -añadió Temari con el ceño fruncido- "pero no puedo recordar a quién me recuerda exactamente."

Tsunade, apoyando el mentón en una mano, asintió lentamente. "Esa apariencia… me hace pensar en alguien, pero su ropa confunde todo."

"Estoy de acuerdo" -comentó Yugao, mirando atentamente la pantalla- "no puedo ubicarla, pero esa sensación de familiaridad es extraña."

"Es como si conociéramos a esa chica, pero no podemos identificarla porque parece… fuera de lugar" -murmuró Kurenai, sin apartar la vista-.

Shion frunció los labios, inquieta. "Es molesto. Sé que la he visto antes, pero no en ese tipo de ropa ni con ese peinado…"

"Exacto" -secundó Misaki, cruzando los brazos- "es como cuando ves a alguien en un sueño, pero no puedes recordar exactamente quién es."

Sasame se quedó en silencio unos segundos antes de murmurar: "Hay algo en sus ojos... me recuerda a alguien, pero no puedo poner el dedo sobre quién."

Tayuya rodó los ojos, visiblemente frustrada. "¿Todas ustedes conocen a esta chica o qué? Porque yo no tengo ni idea de quién demonios están hablando."

"Lo mismo digo" -intervino Kagura, encogiéndose de hombros- "no entiendo de qué están hablando, pero ahora me dieron curiosidad."

"Tal vez sea alguien disfrazado..." -especuló Temari- "podría ser una trampa o alguna clase de broma."

Tsunade soltó una risa baja. "Conociendo a Naruto, seguramente terminará envuelto en otro problema antes de que sepa lo que pasa."

Todas las mujeres continuaron observando la escena con atención, algunas más intrigadas que otras, mientras intentaban desentrañar la identidad de la misteriosa chica. Aunque frustradas por no poder recordar quién le venía a la mente, no podían evitar sentirse atraídas por la extraña situación que se desarrollaba ante sus ojos.

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"Así que, ¡encontraste mi sobre!" -dijo la misteriosa chica acercándose al Uzumaki-.

"¡¿Eh?! Espera, ¡¿es tuyo?!" -exclamo Naruto que no esperaba que el dueño del sobre resulte ser la chica que acaba de aparecer- "es decir, lo acabo de recoger. ¡No iba a robarlo ni nada! Ten, ¡puedes tenerlo!" -dijo mientras le ofrece el sobre de regreso-.

"No hay problema. Puse el dinero dentro, es para ti. Te lo encuentras, te lo quedas" -respondió la chica estando a unos metros cerca de Naruto- "a cambio… te casaras en el otro mundo…" -dicho eso, la chica dio un gran salto y cayendo ante un desprevenido Naruto- "¡sí! ¡Te casaras conmigo!" -grito ella lanzándose encima del rubio-.

"¡Al suelo, baby!" -de pronto se escuchó la voz de Zombina detrás de Naruto que rápidamente se agacho y puso sus manos sobre su cabeza para proteger. Luego Zombina, quien llego a tiempo y armada con dos escopetas Striker, disparo sin vacilar a la misteriosa chica antes que pueda acercarse más al Uzumaki- "¡la tengo!" -exclamo Zombina viendo como la chica cayo de forma estrepitosa al suelo ante un Naruto que casi se le cae la mandíbula con lo que acaba de ver-.

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Tayuya, con los ojos muy abiertos y señalando la pantalla, gritó: "¡¿Esa loca le disparó a una chica con una escopeta?! ¡¿Qué demonios?!"

Kagura se llevó la mano a la frente, incrédula. "Sí… sí, le disparó. ¡Con una escopeta! ¡A una humana! ¿Qué está pasando aquí?"

Kurenai, visiblemente preocupada, comentó con seriedad: "Esto es grave… Si alguien se entera que una interespecie le disparó a un humano, podría arruinar todo el Programa de Intercambio Cultural."

Yugao asintió con el ceño fruncido. "Exacto. Esto podría causar un escándalo internacional. Nadie va a tomarlo a la ligera si se corre la voz."

Mientras tanto, Ino y Temari intercambiaron miradas, sin poder creer lo que acababan de ver.

"¿En serio tenía que sacar las escopetas?" -murmuró Temari-.

Shion, con una mezcla de nerviosismo y celos, cruzó los brazos. "Ya sabía que esa Zombina era un problema, pero… ¡esto es demasiado!"

Sasame, preocupada, murmuró: "Pobre chica… no importa lo que haya hecho, esto es demasiado extremo."

Tsunade, sin embargo, permaneció más tranquila que las demás. "Esperen un momento…" -dijo con calma, pero firme-. "Zombina no es tonta. No dispara sin razón, especialmente no a un humano. Algo raro hay en esa chica para que reaccionara así."

Misaki, reflexionando sobre las palabras de Tsunade, asintió lentamente. "Tiene sentido… Si Zombina la vio como una amenaza, quizá no es lo que parece."

Las mujeres comenzaron a intercambiar ideas, intentando encontrar una lógica detrás de lo sucedido. Kurenai finalmente comentó: "Puede que esa chica no sea humana después de todo. Es la única explicación que tiene sentido."

Ino, aún intrigada, añadió: "Y ahora que lo pienso… ¿por qué le daría un sobre con dinero y un certificado de matrimonio a Naruto? Definitivamente esto no es normal."

Tayuya, sin perder su actitud sarcástica, bufó: "Naruto y las cosas raras… siempre atrae problemas como un imán."

Con una mezcla de inquietud, curiosidad y sospechas, todas las mujeres siguieron observando la escena, sabiendo que algo más profundo debía estar ocurriendo. La duda sobre la verdadera naturaleza de la misteriosa chica se instaló en el aire, y la situación se volvió aún más intrigante para todas.

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"¡¿Un arma?! ¡¿le disparaste?! ¡¿Quién era ella?! ¡¿matrimonio?! ¡¿qué hay de las leyes de armas?! ¡¿Por qué la mataste?!" -pregunto un desesperado Uzumaki que no esperaba que Zombina fuera capaz de dispararle a una persona-.

"Cálmate, Baby. ¿Cómo se supone que debo responder tantas preguntas al mismo tiempo?" -dijo Zombina completamente calmada a pesar de haber disparado a una persona humana- "además, no la mate."

"¡¿Qué?! Pero si acabas de dispararle con…" -señalo Naruto todavía en shock-.

"Bueno, ella ya está muerta, así que está bien" -informo Zombina al rubio. En ese momento, la misteriosa chica que se encuentra tirada en el suelo, mostro una sonrisa, revelando unos afilados dientes como los que posee Zombina-.

"¡Aiya!" -de pronto la chica se levantó del suelo de un gran salto y caer de pie frente Zombina y un impactado Naruto- "¡¿no nos hemos reunido en tanto tiempo, y me saludas con un disparo?! ¡Tan grosera como siempre, Zombina!" -exclamo la chica estando en frente a la mencionada-.

"¡Tú tampoco has cambiado nada!" -respondió Zombina- "tratando de hacer que un hombre se case contigo en el segundo que los ves! ¡Shiishii la Jiang Shi!" -al decir eso Naruto se percató que aquella chica resulto ser una interespecie como Zombina. Al mirarla bien, pudo notar que el color de su piel tiene un tono grisáceo y sus ojos son de color rojo-.

"¡Ni hao!" -salido la chica llamada Shiishii alzando su rostro con una sonrisa, mostrando nuevamente sus afilados dientes-.

(N/A: En la traducción en español del manga, por alguna razón lo tradujeron como Cici, cuando su verdadero nombre es Shiishii.)

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"¡¿TENTEN?!" -gritaron todas al unísono, incapaces de procesar lo que estaban viendo-.

"Es igual a Tenten… pero, ¿qué hace una Jiang Shi luciendo como ella?" -dijo Tsunade completamente impactada ante la revelación-.

"¡No puedo creerlo! ¡Finalmente Tenten tiene un personaje en el programa de Naruto!" -exclamó Ino con la mandíbula casi desencajada-.

"El peinado y ese traje le quedarían muy bien a Tenten…" -añadió Sasame mientras observaba a Shiishii con curiosidad- "aunque claro, jamás la veríamos usar una falda tan corta."

"Ni en mil años. Tenten odia las faldas. No las usa ni por accidente" -bufó Ino, aún en estado de shock-.

"¿Qué pasaría si Tenten estuviera aquí? Probablemente se pondría como loca" -comentó Kurenai, todavía impresionada por la situación-.

"Seguro estallaría en gritos como algunas que conocemos" -dijo Yugao con una sonrisa divertida-.

"¿Qué es exactamente una Jiang Shi? ¿Es como un zombi?" -susurró Shion a Misaki, intrigada por la revelación-.

"Parece ser una interespecie muerta, algo similar a un zombi" -respondió Misaki con calma, recordando las palabras de Zombina-.

"¿Qué les pasa? ¿Por qué gritan como locas? ¿Quién rayos es esa tal Tenten?" -preguntó Tayuya, mirando a las demás con confusión-.

"Sí, nunca había escuchado hablar de ella" -añadió Kagura, igual de desconcertada-.

"Es una Kunoichi de Konoha… pero esto es ridículo. No puedo entender cómo esa Jiang Shi puede parecerse tanto a ella" -dijo Temari mientras se frotaba la frente con frustración-.

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"¿E-ella es una Jiang Shi?" -pregunto el Uzumaki sorprendido que aquella chica que le dispararon sea una interespecie-.

"Es una infractora reincidente que ha pervertido la tradición taiwanesa del Matrimonio Fantasma' para forzar a alguien a un matrimonio internacional con ella. incluso últimamente la agencia de seguridad de intercambio de interespecies ha estado vigilándola, por eso viaje de polizona en los transportes de carga para entrar ilegalmente en el país" -explico Zombina mientras Shiishii hacia algo de estiramiento y quejándose que estar oculta en uno de los contenedores puso rígido sus articulaciones- "sabía que iba a haber un barco de carga en Taiwán arribando hoy a este puerto, ¡así que la he estado vigilando!"

"¿Entonces por qué tuve que esperar ahí?" -pregunto el Uzumaki que estuvo casi una hora esperando a Zombina-.

"Eh, esperaba usarte como carnada, pero olvide estirarme antes de irme a dormir anoche, así que apenas podía moverme esta mañana; es por eso que llegue tarde" -explico ella. Cosa que Naruto no molesto un poco por ser usado como carnada-.

"¡Eso no es bueno, Zombina!" -exclamo Shiishii uniéndose a la conversación- "¡el estiramiento puede significar la diferencia entre la vida y la muerte!" -explico ella, a lo que Zombina menciona que ambas están muertas- "¡yo hago Tai Chi todas las mañanas y todas las noches! ¡soy diferente a ti, Zombina!" -explico ella haciendo una pose de kung fu-.

"¡El burro hablando de orejas! ¡Recuerdo que las articulaciones de la rodilla de cierta persona se congelaron tanto que tenía que avanzar dando saltos! ¡Eso fue tan Jiang Shi que me pude haber muerto de la risa!" -revelo Zombina con una sonrisa burlona-.

"¡E-eso fue porque hacia frio! ¡Era inevitable!" -se defendió la Jiang Shi avergonzada de aquel suceso-.

"¿E-en verdad ustedes son amigas?" -se preguntó Naruto viendo como interactúan ambas chicas-.

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"¿Qué tipo de relación tienen Zombina y esa tal Sisi?" -preguntó Tayuya, algo confundida-.

"Se llama Shiishii" -corrigió Shion con tranquilidad- "y parece que ella y Zombina se conocen desde hace mucho tiempo."

"Sí, eso parece" -añadió Misaki, cruzando los brazos- "la verdad, me da curiosidad saber cómo se conocieron."

"No me gusta que Zombina haya usado a Naruto como carnada" -comentó Tsunade con el ceño fruncido-.

"Estoy de acuerdo" -dijo Kurenai con un suspiro- "ese tipo de planes suenan a algo que Anko haría."

"Sin duda" -secundó Yugao con una ligera sonrisa de resignación-.

"¡Oh, claro que lo haría!" -intervino Ino molesta- "de hecho, hace un año Anko-sensei me obligó a usar un micro bikini para atraer a un grupo de ladrones."

"¿Qué? ¿En serio?" -preguntó Kurenai, mirando a Ino con sorpresa-.

"Sí, en serio" -respondió Ino, cruzándose de brazos, visiblemente molesta- "después de ese día, quemé ese maldito bikini y prometí no volver a ser carnada nunca más."

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"¡Gah, estoy ocupada hoy! ¡No tengo tiempo para esto! ¡DATE PRISA Y CÁSATE CONMIGO!" -exclamo ella lanzándose nuevamente al Uzumaki-.

"Crees que puedo hacerlo, ¡¿eh, Shiishii?!" -dijo Zombina apuntado con sus escopetas a la Jiang Shi- "¡solo tendré que enfriar tu cabeza con mi as de siempre-.

"¡No hay problema!" -respondió Shiishii con una sonrisa desafiante- "¡esta vez entre ilegalmente a este país! ¡Así que traje un montón de armas!" -luego unas largas y afiladas cuchillas salieron de las mangas de sus brazos, cosa que Zombina no esperaba-.

"¡Rayos!" -exclamo ella que no tuvo tiempo para esquivar. En un abrir y cerrar de ojos, Shiishii se encuentra detrás de Zombina con sus brazos extendidos a los lados- "…maldición" -se quejó mientras su cuerpo recibió un corte horizontal- "y yo que acababa de coserme tan bien…" -a decir eso, el cuerpo de Zombina fue cortado en varias partes al igual que sus escopetas-.

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"Esa chica… no solo se parece a Tenten, ¡también sabe usar armas!" -dijo Ino, impresionada y con un toque de miedo en la voz-.

"Es cierto" -añadió Sasame, mirando a Shiishii con asombro- "¿Cómo pudo atacar a Zombina tan fácilmente si son amigas?"

"Quizás no son tan amigas como pensábamos…" -comentó Shion, frunciendo el ceño mientras analizaba la situación-.

"Esa Jiang Shi no es solo peligrosa" -intervino Temari con seriedad- "es increíblemente rápida. Ni siquiera vi en qué momento se movió."

"Y el cómo ocultó esas cuchillas en sus mangas…" -agregó Kagura, cruzando los brazos, claramente impresionada- "podría engañar a cualquiera con ese truco."

"Tengo que admitirlo…" -dijo Tsunade, mirando a Shiishii con expresión grave- "esta chica es como una versión peligrosa de Tenten… incluso en su habilidad para manejar armas."

"Sí… es cierto" -secundaron las demás mujeres en la sala, todas en acuerdo con la Senju, todavía impactadas por lo que acababan de presenciar-.

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"¡Hao! ¡Ya no queda nadie en mi camino!" -declaro Shiishii al 'deshacerse' de Zombina para voltear a ver a Naruto- "así que, apresúrate. Firma el registro de matrimonio y…" -fue interrumpida cuando recibió un disparo desde atrás, dándole en su hombro derecho- "¡¿NGH?!" -Shiishii miro detrás suyo y se sorprende que Zombina, aun cortada en pedazos, le haya disparado aun tirada en el suelo con una escopeta recortada-.

"Tch, ¡apenas te roce!" -dijo Zombina apuntando con su arma a la Jiang Shi con su brazo derecho que no fue cortado- "¡supongo que realmente no puedo apuntar bien desde esta posición-.

"Aiyaa… ¡no puedo creer que no haya podido cortarle ese brazo!" -se quejó Shiishii tomándose su hombro, justo donde le dispararon- "… ¡no puedo mover!" -exclamo sintiendo que no podía moverse con libertad- "Zombina…" -volteo a ver a la mencionada… pero ella como el resto de su cuerpo desapareció- "… se fue" -murmuro viendo los restos de las escopetas en el suelo-.

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"¿Zombina sigue viva… después de ser cortada en pedazos?" -dijo Yugao, sorprendida, sin poder creer lo que acaba de ver- "¿Y todavía tenía otra arma escondida?"

"Sí… sigue viva" -comentó Kurenai, aún asombrada- "aunque supongo que tiene sentido… siendo un zombi, no puede morir de nuevo."

"¿Qué le pasó a Shiishii?" -preguntó Ino, inclinándose hacia adelante con curiosidad- "hace un momento se movía tan rápido, y ahora apenas puede mantenerse de pie…"

"Esa velocidad impresionante parece haber desaparecido…" -murmuró Temari, observando cómo la Jiang Shi apenas podía mantenerse erguida-.

"Debe ser ese disparo en el hombro" -dijo Kagura con tono analítico- "no creo que fuera una bala común… probablemente tenía algún efecto especial que está impidiendo que se mueva."

"¿Una bala paralizante?" -dudó Tayuya, cruzando los brazos- "No lo sé… debe ser otro tipo de munición especial. Algo hecho para afectar a zombis o criaturas similares."

"Sea lo que haya sido…" -intervino Tsunade con los brazos cruzados- "Zombina logró neutralizar a Tenten Versión 2.0."

Las demás mujeres se quedaron mirando a la Senju con expresión de confusión.

"¿Por qué me miran así?" -preguntó Tsunade, frunciendo el ceño al notar las miradas-.

"Tsunade-sama, ¿Por qué la llamo 'Tenten Versión 2.0'?" -preguntó Sasame con curiosidad-.

"Porque es igual a la Tenten que conocemos" -respondió Tsunade con naturalidad- "solo que más letal y peligrosa."

Las mujeres intercambiaron miradas entre ellas y, al final, todas asintieron ligeramente.

"Bueno… no podemos decir que su lógica sea incorrecta" -murmuró Ino, inclinando la cabeza en señal de acuerdo-.

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Mientras tanto, en el puerto de la ciudad, Naruto y Zombina se escondieron dentro de unos de los contenedores del puerto. El Uzumaki aprovecho el momento que la Jiang Shi se descuidó, tomo rápidamente a Zombina y el resto de su cuerpo y correr lo más lejos de ella y esconderse en el puerto con la esperanza de perderla de vista.

"E… ¡escapamos! De alguna manera…" -dijo el rubio respirando agitadamente mientras sostiene a Zombina y parte de ellas en sus brazos-.

"¡Perdón por eso! ¡Ella si me venció! Supongo que baje la guardia" -se disculpó Zombina. Ella no esperaba que Shiishii estuviera armada con esas cuchillas ocultas-.

"También lo siento. No pude salvarte de ella" -también se disculpó Naruto, cosa que Zombina no entendió-.

"¿Eh? ¿Salvarme?" -ella no comprendido lo que el Uzumaki quiso decirle hasta que se percató que el brazo derecho está sangrando- "espera, ¡¿trataste de protegerme?!" -exclamo al ver la corte en el brazo que tenía el Uzumaki- 'ya veo… la razón por la cual Shiishii no corto mi otro brazo, ¡fue porque el recibió el golpe por mí!' -dedujo ella. Naruto se puso al frente para protegerla de Shiishii, y que, gracias a eso, su brazo derecho no fue cortado. Esa deducción causo que Zombina se enfadara- "… ¡oye!" -grito mientras agarra la playera del Uzumaki- "¡idiota! ¡¿En qué rayos estabas pensando?! ¡Soy una zombi! ¡No trates de 'salvarme' o 'protegerme'! ¡No tiene un maldito sentido!" -le dijo a un nervioso Naruto-.

"Lo sé, pero… ¡no digas que no tiene sentido solo porque eres una zombi!" -menciono el rubio, a lo que Zombina está a punto de reclamarle- "¡sigues siendo una chica, Zombina!"

"¡¿EH?!" -aquellas palabras del Uzumaki causaron que el rostro de Zombina se ponga del mismo color que su cabello- "¡GH…! ¡MGH! ¡GAH…!" -comenzó a murmurar cosas sin sentidos mientras se retuerce en el suelo, muerta de la pena por lo que acaban de decirle-.

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Kurenai fue la primera en estallar en carcajadas al ver cómo Zombina se retorcía en el suelo, ahogada de vergüenza. "¡Ja, ja, ja! ¡No puedo con esto! ¡Es idéntica!" -dijo, llevándose ambas manos al estómago, incapaz de contener la risa-.

El resto de las mujeres observaban a Kurenai con curiosidad. Temari frunció el ceño. "¿Qué es lo tan gracioso como para que te rías así?"

Kurenai, aun riendo, se inclinó hacia adelante para recuperar el aliento. "Es que... ¡Zombina y Yugao no solo se parecen físicamente, sino que también reaccionan igual cuando les dicen un cumplido!"

Yugao, que hasta ese momento había permanecido tranquila, sintió cómo su rostro se sonrojaba de inmediato.

"Como aquella vez que Hayate le dijo un cumplido" -continuó Kurenai sin detenerse- "y tú reaccionaste igual... ¡Oh, Dios! ¿Recuerdas ese día?" -soltó una carcajada más fuerte, incapaz de resistirse al recuerdo-.

El rostro de Yugao pasó de avergonzado a furioso en cuestión de segundos. Se levantó bruscamente del sofá, con las mejillas completamente rojas. "¡Kurenai! ¡Juraste que nunca íbamos a hablar de eso!" -exclamó, apuntándola con un dedo acusador-.

Ino sonrió mientras se unía a la conversación. "Ay, Yugao-sensei, no es tan grave. Que te digan un cumplido no es para avergonzarse tanto."

Sasame, Shion, y Misaki asintieron de acuerdo.

"Es cierto" -dijo Shion- "no tiene nada de malo sentirse así cuando alguien que te importa te dice algo bonito."

Kurenai se metió de nuevo en la conversación, esta vez con un tono más divertido. "El problema es que Yugao siempre fue un caso perdido con Hayate" -comentó ella- "cada vez que él le decía algo lindo, se ponía super nerviosa."

Todas las mujeres quedaron en silencio, girando sus miradas hacia una avergonzada Yugao, que se cubría la cara con las manos, maldiciendo a Kurenai en su mente.

Finalmente, Yugao, sin levantar la cabeza, murmuró entre dientes: "Voy a matarte... lentamente."

Kurenai, aún entre risas, le lanzó una mirada burlona. "Lo intentas, amiga, lo intentas."

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"Por cierto, esa Jiang Shi, ¿en verdad es tu amiga?" -pregunto Naruto. Quería saber qué tipo de relación tenía Shiishii con Zombina-.

"…No, solo es una sanguijuela de la que no me puedo librar" -respondió Zombina de malhumor-.

"¿No te puedes librar?" -decia el Uzumaki confundido mientras se vendaba la herida en su brazo- "pero no tienes ningún problema librándote de cualquier cosa pegada a tu cuerpo. Porque eres una zombi" -bromeo en ese momento-.

"¡Cállate!" -grito Zombina molesta que le arrojo su mano izquierda a la cabeza de Naruto. Luego de unos segundos, ella se calmó y le conto de su pasado y como conoció a Shiishii- "Ya que las dos somos de razas similares; cada vez que causa algún tipo de problema, tengo que ir a encargarme de ella. después de un tiempo, empezamos a llevarnos bien, pero… ¡ahora siempre me avisas cuando vendrá a Japón!" -grito furiosa recordando aquellas veces que despertaba a mitad de la noche porque Shiishii la llamaba a esa hora- "¡esta vez incluso me dijo en donde y cuando vendría! ¡¿Por qué es tan amigable conmigo?!"

"Demonios…" -fue la única palabra que expreso Naruto al escuchar el pasado entre ambas chicas zombis-.

"Bueno, supongo que tenemos los mismos intereses, pero…" -dijo Zombina, pero Naruto no entendió que quiso decir con eso- "bueno… podre ser una muerta viviente, pero solía ser una humana. Apenas soy una interespecie en sí. Quizás solo me gusta pasar el rato con una cabeza hueca como yo" -expreso ella revelando más de su pasado-.

"Zombina…" -Naruto por primera vez ve otro lado de Zombina, uno siendo sincera y expresando como se siente-.

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"Ahora entiendo por qué se llevan bien. A veces, los amigos más cercanos también pueden ser los más irritantes" -comentó la Senju con un suspiro- "tener a alguien que te molesta constantemente, pero que de alguna forma siempre termina siendo parte de tu vida, no es tan raro. Aunque quieras sacarlo de tu camino, lo necesitas más de lo que crees."

"Es como tener a un amigo molesto del que no puedes alejarte porque te conoce demasiado bien" -añadió Kagura, cruzando los brazos mientras meditaba en voz alta- "al final, aunque te saque de quicio y no lo admitas, siempre terminas preocupándote por esa persona. A veces, es inevitable crear ese tipo de vínculo con alguien."

"Claro, es lo mismo que yo decía. Zombina y Cici se llevan bien porque son zombis, ¿qué más se puede esperar?" -comentó Tayuya con su característico tono sarcástico. Sin embargo, no tardó en recibir la habitual corrección de Shion-.

"Es Shiishii, no 'Cici'" -le recordó Shion con calma, esbozando una sonrisa educada, pero con un dejo de burla-.

"Como sea" -respondió la pelirroja con un bufido, claramente irritada por la interrupción- "al final, las dos son básicamente iguales: zombis con cuchillas y armas… y ni un gramo de sentido común. Se complementan perfectamente, aunque eso no signifique que no quieran matarse la una a la otra."

"Me llamó la atención cuando Zombina mencionó que ambas tienen los mismos intereses" -añadió Sasame con tono curioso- "¿qué tipo de intereses podrían ser? ¿Qué cosas puede compartir alguien como ella con una Jiang Shi?"

"Tal vez tengan fascinación por las armas" -sugirió Ino, apoyando el mentón en la palma de su mano, mientras dejaba volar su imaginación- "me recuerda un poco a Tenten. Ella se hace amiga de cualquiera que comparta su entusiasmo por un buen arsenal… Imagínate a Zombina y Shiishii en una competencia de tiro o probando cuchillas ocultas."

"No todo tiene que ser sobre armas" -comentó Shion, inclinando la cabeza con una expresión reflexiva- "quizás coleccionan cosas… objetos curiosos, reliquias o algo más simbólico. A veces, los lazos entre personas extrañas nacen de gustos peculiares que los demás no entenderían."

Temari se unió a la conversación con una sonrisa divertida: "¿Te imaginas si coleccionaran figuras raras? Algo como… figuritas de zombis o sets de cuchillas especiales" -la ocurrencia provocó algunas risas, relajando el ambiente entre ellas-.

"Sea lo que sea, parece que Zombina tiene una relación complicada con esa Shiishii" -murmuró Tsunade, acomodándose en su asiento- "pero a veces, esas amistades que no puedes explicar terminan siendo las más importantes. Te mantienen en equilibrio, aunque no siempre lo parezca."

Yugao, que hasta ese momento había permanecido en silencio, asintió sin levantar la mirada. Aunque no dijo nada, en su interior sabía exactamente a qué se refería Tsunade. A veces, las relaciones más complejas son las que te marcan más profundamente, y lidiar con alguien que conoce cada rincón de tu personalidad puede ser agotador… pero también invaluable.

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De pronto algo golpeo la parte superior del contenedor, dándole un buen susto a Naruto y Zombina. Ambos, con cuidado, asomaron sus cabezas para ver qué fue lo que golpe por fuera y vieron a Jiang Shi, quien luce bastante molesta.

"¡¿A dónde fuiste, futuro esposo?!" -exclamo Shiishii buscando a Naruto- "¡sigue mi plan de vida y cásate conmigo!" -luego dio un salto y seguir buscando al Uzumaki que temblaba de miedo y abrazaba a Zombina-.

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Kurenai estalló en carcajadas apenas vio la escena. "Esto me recuerda al día en que Yugao se puso igual de furiosa cuando Hayate se olvidó por completo de su cumpleaños. ¡Le persiguió por toda la aldea con una expresión que parecía la de un demonio!" -comento entre risas, sosteniéndose el estómago por la intensidad de su risa- "¡asustó a medio Konoha, aldeanos y ninjas por igual!"

Todas las miradas se dirigieron hacia Yugao, cuyo rostro estaba completamente rojo de la vergüenza. "¡Kurenai! ¡¿Por qué tenías que contar eso?! ¡Ese fue el peor día de mi vida!" -le reclamó con frustración mientras se llevaba una mano al rostro, tratando de ocultar su vergüenza- "desde ese día, un montón de aldeanos prefirieron evitar cruzarse conmigo…"

Ino, sin poder contener una sonrisa traviesa, se inclinó hacia Shion, Misaki, Temari y Tayuya para susurrarles al oído: "Eso me recuerda ese mito urbano que escuche cuando niña y circulaba por Konoha. El que hablaba de una mujer endemoniada que persiguió a un pobre tipo que la enfadó… Estoy empezando a creer que esa historia no era solo un rumor. Tal vez hablaba de Yugao-sensei persiguiendo a Hayate."

"Eso tendría mucho sentido" -susurró Shion con una sonrisa divertida, imaginando la escena-.

"Y lo peor es que ni siquiera era un mito... Solo una versión exagerada de la realidad" -añadió Temari, cruzando los brazos con una media sonrisa- "parece que Yugao tiene más en común con Shiishii de lo que pensábamos."

"Bah, estas historias siempre tienen algo de verdad" -comentó Tayuya con aire despreocupado- "no me sorprende que los aldeanos las hayan adornado. Yo también evitaría a alguien que corre por la aldea con ganas de arrancarte la cabeza."

Misaki intentó contener la risa, pero no pudo evitar soltar una pequeña carcajada. "Me pregunto si en ese entonces Hayate también se escondió como Naruto ahora..."

Mientras tanto, Yugao se hundía cada vez más en el sofá, cruzando los brazos y apretando los labios en un vano intento de calmar su creciente incomodidad. En su mente, maldecía a Kurenai por arruinar cualquier chance de que aquella historia quedara en el olvido.

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"Maldición, solo rozarla no funciono… se pone muy violenta cuando esta herida" -dijo Zombina viendo que la situación se complicó- "supongo que tendré que darle en el lugar correcto, incluso con mi as" -decia mientras toma su escopeta recortada-.

"Oh, sí, ¿Cuál es ese 'as' del que has estado hablando? ¿te refieres a esa arma?" -pregunto el rubio observando la escopeta-.

"Oh, en realidad…" -Zombina procedió a sacar el cartucho dentro de su escopeta- "estoy hablando de estas. Son balas de sal de roca. La sal tiene un poder de purificación" -le explico al Uzumaki- "así que, si puedes darle con una de estas, ella se congelara."

"¿A qué te refiere con que si puedo?" -pregunto Naruto que no entendió la última parte de la explicación-.

"Ese es el problema. Apenas fui capaz de hacerle un rasguño con una mano, y eso que estaba dando lo mejor. No hay manera de que un novato de las armas como tu pueda darle" -menciono Zombina. Era imposible que el Uzumaki pueda disparar correctamente con su escopeta-.

"¡Entonces tenemos que coserte rápido!" -exclamo Naruto sabiendo que la única que puede detener a Shiishii es Zombina que tiene mejor puntería-.

"¡¿Tienes un kit de costura?!" -pregunto Zombina-.

"¡Supuse que lo necesitaríamos! ¡Aunque solo será hilván!" -respondió el rubio que llevaba consigo dicho kit sabiendo que Zombina pierde parte de sus cuerpos-.

"¡No importa! ¡Siempre y cuando me mantenga unida!" -menciono Zombina, cosa que Naruto comenzó a hacer su trabajo en unir el resto del cuerpo de la pelirroja- "espera… que rayos, ¡si estas cosiendo rápido!" -exclamo sorprendida. En tan solo unos minutos, el Uzumaki logro unir todas las partes en su lugar- "guau. Me uniste en un santiamén. ¿estas mejorando en estas cosas del hogar?" -pregunta ella viendo como sus brazos quedaron unidos-.

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"Es impresionante que Naruto llevara eso consigo. Parece que sabía que Zombina podría necesitarlo" -comentó Tsunade, alzando una ceja con una mezcla de sorpresa y aprobación-.

"Sí, impresionante… como también lo fue la vez que Zombina dejó caer uno de sus senos solo para poner nervioso a Naruto" -añadió Ino, claramente molesta mientras cruzaba los brazos-.

"¿Qué clase de broma fue esa?" -dijo Sasame con disgusto- "¿Cómo se atreve a hacer algo así?"

"Si Naruto-kun quiere tocar a una mujer, yo estoy dispuesta" -intervino Shion con una expresión desafiante- "¡es hora de que cumpla la promesa que me hizo hace tres años!"

El silencio reinó por unos segundos hasta que Misaki, sin inmutarse, le dio un fuerte golpe en la cabeza.

"¡Idiota!" -espetó Misaki, frunciendo el ceño, mientras Shion se sobaba la cabeza con los ojos llorosos-.

"¡¿Por qué me pegas?!" -protestó Shion, mirando a su amiga con una expresión de auténtico dolor-.

"Porque decir que le ofreces tu cuerpo es una estupidez. Madura y compórtate como la Daimyō que eres" -le recriminó Misaki, manteniendo su mirada severa-.

"Lo siento…" -murmuró Shion con voz temblorosa, sintiéndose como una niña regañada.

Sasame le dio una palmadita en la espalda. "Ya, ya, no fue para tanto. No llores."

"Sí, aunque, en serio, Shion… Esta vez se te fue un poco la mano" -dijo Ino con un tono sarcástico, aunque intentando calmar la situación-.

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"Hace no mucho le hice a Miia un calentador para cola. Era de 6 metros de largo" -explico que se encargaba de la parte inferior de Zombina- "solo falta coser tu parte superior con la inferior. ¿podrías recostarte boca arriba?" -le pidió a Zombina-.

"¡Bien!" -dijo Zombina dándose media vuelta- "¿eh?" -luego se percató de un pequeño problema. Su playera quedo destrozada por culpa de Shiishii, quedando tan corta que apenas puede cubrir sus pechos. Cuando Zombina se percató de eso, ella se sonrojo por completo- "¿q-qué tal si me pongo boca abajo?" -sugirio ella dando media vuelta, de esa forma cubriría sus pechos y su rostro que está completamente rojo de la vergüenza-.

"Eh, está bien" -accedió el rubio tomando la parte inferior de Zombina-.

'¿D-de que me estoy avergonzando? El cosió mi seno antes. ¿Por qué las estoy ocultando ahora?' -pensó Zombina avergonzada que el rubio vea sus pechos casi descubiertos-.

"Bien, empezare con tu espalda" -dijo Naruto alineando la parte inferior con la parte superior de Zombina- "pero cuando termine, tendré que coser adelante" -menciono en ese momento-.

"S-sí, me lo imaginaba…" -dijo Zombina nerviosa-.

Una vez que Naruto acomodo ambas partes de Zombina para poder coserlas y unirlas. Pero en el momento que coloco una mano sobre la espalda de Zombina… ella reacciona de una forma inesperada.

"¡¿HYA?!" -grito ella para sorpresa del Uzumaki. Lejos del lugar, Shiishii continuaba buscando a Naruto, de paso alcanzo a escuchar algo, pero decidió ignorarlo-.

"¡Oye, Zombina! ¡Guarda silencio o Shiishii nos oirá!" -advirtió Naruto a la mencionada-.

"¡Y-ya lo se! Lo sé, ¡¿de acuerdo?!" -se disculpó Zombina- "¡p-pero mi espalda es muy sensible! ¡HYA! ¡KH!" -siguió gimiendo mientras el Uzumaki seguía cosiendo-.

"¿Entonces por qué me pediste que empezara por aquí?" -pregunto Naruto sintiéndose un poco incomodo-.

"U-usualmente no es tan sensible! ¡AH! ¡MN!" -dijo Zombina tapándose la boca para callar sus gemidos- "¡c-como sea! ¡olvida mi espalda, solo haz el frente!" -pidió ella dando media vuelta. Para su mala suerte, su playera quedo enganchada en el suelo del contenedor, causando que se rompa y deje al descubierto sus enormes senos, de paso Zombina se puso roja como un tomate-.

A lo lejos, Shiishii alcanzo a escuchar un grito de una persona, uno que reconoció fácilmente.

"¡Te escuche, cariño! ¡Ríndete y firma el certificado de matrimonio ahora!" -grito la Jiang Shi dirigiéndose hacia el lugar donde vino aquel grito-.

"¡Mierda, nos escuchó!" -maldijo Zombina aun con el rostro sonrojado-.

"Ahhhh, ¡acababa de coser tu espalda…!" -dijo Naruto con la mejilla izquierda roja porque Zombina le dio un puñetazo por mirar sus pechos- "¿Qué vamos a hacer? ¡Ya no tenemos tiempo para coserte!" -menciono el rubio sabiendo que les queda poco tiempo para que Shiishii los encuentre-.

"¡Solo me queda una bala! Y soy la única que puede darle. Debe haber… alguna forma…" -dijo Zombina tratando de pensar en una idea antes que Shiishii los encuentre-.

"De momento, ¿Por qué no te pones un poco de ropa?" -sugirio Naruto ofreciendo su camiseta a Zombina que acepto ponérsela. Pero en este momento, el Uzumaki tuvo una idea que serviría de ayuda para detener de una vez a Shiishii-.

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"Hahahaha, ¡Zombina con espalda sensible! ¡Esto es demasiado bueno!" -comentó Kurenai entre carcajadas, secándose una lágrima del ojo-. "Y pensar que Yugao también es igual…"

Las demás mujeres quedaron boquiabiertas por la revelación, mirando a Yugao en completo silencio.

"¡Kurenai, eres lo peor!" -gritó Yugao, roja de vergüenza y rabia, mientras tomaba un cojín y lo lanzaba con fuerza hacia su amiga. Sin embargo, Kurenai, aun riendo, lo esquivó con facilidad- "¡no tenías que decir algo tan personal, traidora!" -reclamó Yugao, furiosa y con las manos en puños, mientras su amiga seguía burlándose entre risas-.

Sin previo aviso, Tayuya se acercó por detrás de Yugao con una sonrisa maliciosa. Sin decir una palabra, deslizó su dedo índice suavemente por la columna de la mujer, de arriba hacia abajo.

"¡HYAAA!" -chilló Yugao de forma involuntaria, su grito resonando en toda la sala mientras se encogía por el estremecimiento-.

Todas quedaron paralizadas por unos segundos, asimilando lo que acababan de presenciar.

"Vaya, parece que Kurenai no estaba mintiendo" -comentó Tayuya con una sonrisa burlona, disfrutando el momento-.

El rostro de Yugao se tornó rojo como un tomate. "¡T-Tayuya!" -gritó, pero la pelirroja solo soltó una carcajada-.

"Tranquila, Yugao-sensei. Ahora sabemos tu punto débil" -añadió Ino con una sonrisa cómplice, mientras Misaki y Sasame intentaban contener la risa-.

Shion, con un toque de envidia, murmuró para sí misma: "Quizás debería intentar eso con Naruto-kun… quién sabe, tal vez tenga una espalda sensible también."

Misaki, al escucharla, le dio otro zape en la cabeza. "¡Deja de decir tonterías, Shion!" -le reclamó, mientras la sacerdotisa se frotaba la cabeza con ojos llorosos-.

"¡Oigan, déjenme en paz!" -suplicó Yugao, sintiéndose atrapada en medio de las burlas. Mientras tanto, Kurenai seguía riéndose, disfrutando más de lo que debería-.

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-Mientras tanto con Shiishii-

"¡Sal de una vez, Zombina! ¡Es hora de que pagues por meterte en el camino del matrimonio!" -decia la Jiang Shi avanzando por los contenedores del puerto mientras buscaba al Uzumaki y obligarlo a que se casara con ella-.

Entre los contenedores, se vio una sombra corriendo detrás de ellos, cosa que Shiishii alcanzo a ver.

"Ha ha ha! ¡Conque escondiéndote detrás de mí, Zombina! ¡que ingenua!" -exclamo la Jiang Shi que arrojo una espada que salió de sus mangas y se clavó en uno de los contenedores y de esa forma, detener a Zombina… o eso es lo que creía-.

"¡EEK!" -grito Naruto que se detuvo a tiempo cuando la espada se clavó en el contenedor-.

"¡¿No es Zombina?!" -exclamo Shiishii que no esperaba que se trataba del humano con el que quiere casarse-.

"¡Yuujuu!" -Shiishii se alarmo cuando escucho alguien parado detrás suyo-.

'¡No, detrás de mí!' -pensó ella dando media vuelta- "¡Sha!" -grito mientras arrojaba más espadas hacia la persona que se encuentra a su espalda. Pero su ataque fue en vano cuando las espadas quedaron clavadas a otro contenedor, no porque ella fallara, sino por otra cosa-.

"Se ha contactado con el cadáver más animado del mundo, ¡Zombina-chan! Deje su mensaje después del tono y yo le…" -lo que se escuchaba era el teléfono de Zombina, y a su lado está la parte inferior de ella sentada tranquilamente en una pila de embalajes de madera-.

'¡S-solo es su mitad inferior!' -pensó Shiishii dándose cuenta que acaban de engañarla-.

"¡Yuujuu!" -Shiishii volvió a escuchar la voz de Zombina que venía nuevamente- "¡estoy por aquí!" -dijo Zombina sujetada al cuerpo de Naruto usando su playera destrozada para luego apuntar y disparar su escopeta a la Jiang Shi-.

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"¡Vaya, Naruto se las ingenió bien esta vez!" -comentó Kurenai, todavía sorprendida- "no es algo que esperaría de él, pero fue una trampa perfecta. Shiishii cayó redondita."

Kagura asintió, aún impresionada. "No es una estrategia típica, pero funcionó. Usar la parte inferior de Zombina y esa grabación fue astuto."

Tsunade cruzó los brazos y levantó una ceja. "Es… definitivamente una forma muy poco ortodoxa de resolver un problema." -suspiró, aunque con una pequeña sonrisa-. "No es algo digno de un Jōnin, pero lo importante es que lograron su objetivo."

"Bueno, siempre ha sido más de improvisar que de seguir estrategias complejas" -añadió Ino con una sonrisa- "eso es tan Naruto."

Misaki soltó una risa leve. "Y pensar que usaron la mitad inferior de Zombina como señuelo… eso es algo que no verías ni en un examen Chūnin."

Shion, con los brazos cruzados, comentó en tono algo celoso: "Naruto-kun está lleno de sorpresas... pero no me gusta que otra chica lo esté abrazando así, aunque sea parte del plan."

Tayuya, sin poder contener la risa, se burló: "Es como si Naruto y Zombina fueran un dúo cómico. Si se ponen serios, podrían montar un circo."

"¡Ay, Tayuya, siempre con tus comentarios!" -respondió Sasame entre risas, mientras Kagura intentaba mantener la compostura-.

"Bueno, por lo menos Shiishii aprendió la lección… por ahora" -murmuró Yugao- "pero no puedo dejar de pensar en cómo se le ocurrió todo esto a Naruto tan rápido."

Kurenai se encogió de hombros, aún divertida. "Es Naruto. La lógica nunca ha sido su fuerte, pero el chico tiene talento para salir de los líos... incluso si eso implica usar las piernas de su amiga como parte del plan."

Tsunade, con una expresión mezcla de incredulidad y diversión, añadió: "Si no fuera porque funcionó, diría que este es uno de los planes más ridículos que he visto."

Todas las mujeres rieron, compartiendo la misma sensación de asombro por la peculiaridad del plan, pero al mismo tiempo admirando la habilidad de Naruto para improvisar en cualquier situación.

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-Minutos después-

"Aiyaa… lo siento, te cause un gran problema…" -se disculpó Shiishii arrodillada en el suelo y con un talismán pegado en su cabeza que tenía escrito 'En espera'-.

"Ahora estas purificada. Esa cosa funciona demasiado bien" -dijo Zombina en el suelo mientras Naruto cargaba la parte inferior para luego ponerla encima de unas ruedas-.

"Bien, Zombina, te voy a coser a la parte inferior; así que sujétate de mis hombros" -pidió Naruto a la menciona que se sonrojo en menos de un segundo-.

"Ho… ¡¿hombros?!" -dijo Zombina apenada- "e… está bien" -acepto ella bastante sonrojada, cosa que Shiishii noto el extraño comportamiento de su 'amiga'-.

"¡Tú tampoco estas tan purificada, Zombina!" -comento la Jiang Shi como broma, cosa que Naruto no entendió, pero Zombina si capto el comentario y grita '¡CÁLLATE!' a Shiishii- "a propósito, ¿ese chico es tu novio, Zombina?" -le pregunto a la mencionada-.

"¡N-NO!" -exclamo Zombina como respuesta- "tiene a seis chicas y tiene que escoger a una para casarse" -señalo ella mientras que Naruto se sintió un poco incomodo que revelen de su situación-.

"¡¿SEIS?!" -exclamo Shiishii impactada- "¡¿sales con seis chicas?! Aiyaa, no parece de mi tipo… buscare a un tipo diferente para casarme…" -dijo ella olvidándose de su plan de casarse con el Uzumaki-.

'Lo entendió mal' -pensaron Naruto y Zombina luego de escuchar las palabras de Shiishii-.

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"¡¿Cómo que no es un buen partido?! ¡Naruto es más valioso que cualquier hombre en Konoha! ¿Quién más sabe cocinar, hacer los quehaceres y además es buen costurero? ¡Eso es un esposo ideal!" -reclamó una muy molesta Ino mientras se levantaba de su asiento y colocaba las manos en sus caderas-.

"Ino tiene razón. ¡Naruto es todo lo que cualquiera querría en un hombre!" -secundó Sasame, asintiendo con firmeza-.

"Y aún tiene que cumplir la promesa que me hizo hace tres años…" -añadió Shion con tono soñador, mientras las demás la miraban con desaprobación-.

"¡Ya deja de mencionar esa tonta promesa!" -gritaron al unísono Misaki, Ino y Sasame, frustradas por la insistencia de la sacerdotisa-.

"¡No tienen que gritarme así!" -sollozó Shion, sintiéndose herida por la reacción de las demás-.

"Ja, este idiota tiene más problemas con las mujeres que si estuviera peleando en la guerra" -se burló Tayuya, disfrutando del caos que se desarrollaba frente a ella-.

"Definitivamente, es difícil encontrar a un hombre como Naruto, pero estas chicas parecen más un caos organizado." -comentó Kurenai, riendo por lo bajo-.

"Nunca imaginé que tendría tantas pretendientas… y que todas estuvieran tan dispuestas a pelear por él" -añadió Kagura con una sonrisa leve, divertida por la situación-.

"Parece que Naruto va a tener que aprender rápido a manejar estos dramas… Esto es apenas el comienzo" -suspiró Tsunade, aunque no pudo evitar sonreír levemente ante el espectáculo que se desarrollaba ante sus ojos-.

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"Zombina, tus puntadas están un poco flojas. Ve al hospital a que te las arreglen" -sugirio Shiishii notando que las costuras en su brazo izquierda se ven un poco sueltas-.

Zombina solo volteo a ver a Naruto que tenía algo de problema con coser su espalda con lo que paso minutos atrás para luego sonreír.

"Está bien" -dijo Zombina para sorpresa de Shiishii- "no me importa… dejarlas así por un rato…" -expreso ella con una sonrisa genuina y se sonroje, cosa que la Jiang Shi no entendió-.

"A propósito, ¿Qué intereses comparten?" -pregunto Naruto recordando la conversación que tuvo minutos atrás con Zombina. A lo que ambas chicas zombis voltean y miran al rubio bastante molestas-.

"¡Muy bien! ¡Te coseré rápidamente! ¡No llegare al evento a tiempo!" -exclamo Shiishii comenzando a coser a gran velocidad las costuras flojas de Zombina. Luego Naruto, muy confundido, pregunta sobre que evento acaba de mencionar- "¡es por eso que vine a este país!" -respondió ella, cosa que Naruto no entendió-.

"¡Rayos, olvidé completamente porque lo traje aquí!" -exclamo Zombina que también cosía su propio cuerpo-.

"¿Por qué?" -pregunto el Uzumaki que no comprendido el extraño comportamiento de las chicas que lucen muy apresuradas-.

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"¿Qué clase de evento será ese para que estén tan desesperadas?" -se preguntó Kagura con el ceño fruncido, intentando entender el comportamiento de las dos zombis-.

"Tampoco entiendo. Además, Zombina dijo que trajo a Naruto para ese evento" -añadió Tsunade mientras cruzaba los brazos, intrigada-.

"¿Será un festival de armas? ¿O tal vez algo de comida?" -sugirió Shion, tratando de adivinar-.

"No lo sé… Si es un evento para el público, tiene que ser algo más que eso" -opinó Temari, llevándose una mano al mentón en actitud pensativa-.

"¿Qué tipo de evento sería tan importante como para que ellas estén así de desesperadas?" -se preguntó Misaki, mirando a las demás en busca de respuestas-.

"Quizás algo que les interese a ambas" -comentó Sasame- "después de todo, Zombina dijo que comparten los mismos gustos."

"¿Qué tipo de 'gustos' tendrán esas dos?" -preguntó Tayuya, alzando una ceja con curiosidad-.

Kurenai, con una sonrisa burlona, miró de reojo a Yugao. "Y tú, Yugao, ¿no tendrás alguna idea sobre esos gustos?" -preguntó 'inocentemente' mientras la mencionada comenzaba a sudar frío-.

"¡N-No tengo idea!" -exclamó Yugao, visiblemente nerviosa, antes de salir apresurada de la habitación, sonrojada hasta las orejas-.

"¿Qué le pasó?" -preguntó Tayuya, confundida por la repentina huida de Yugao-.

Kurenai se llevó una mano a los labios, luchando por contener la risa. "Ya lo descubrirán pronto."

Todas las mujeres intercambiaron miradas aún más confusas que antes, sin comprender a qué se refería Kurenai.

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-Tres Doritos después-

Zombina y Shiishii llevaron arrastrando a Naruto hacia el centro de la ciudad donde se llevaba una feria de comic, más específico… una convención de Doujinshi de mujeres donde venden mangas… Yaoi.

"¡¿Este es el evento al que querían ir?! ¡¿P-porque son zombis?!" -exclamo Naruto entre una furiosa multitud de Fujoshis que compraban todo lo que hay a la venta-.

"¡Ok! ¡Escucha baby! Tienes la lista, ¿verdad?" -pregunto Zombina que compro varios mangas Yaoi-.

"¡Mira! ¡Es un grupo super popular! ¡Entremos en ese muro de gente!" -señalo Shiishii que también compro muchos mangas-.

-Otros tres Doritos después-

"Entonces, ¿Por qué querías casarte en Japón tan desesperadamente, Shiishii?" -pregunto un agotado Naruto que tuvo que cargar todo lo que las chicas compraron y llevar al departamento donde Zombina y el resto del grupo MON viven-.

"¡Si vivo en Japón, puedo asistir a eventos con frecuencia!" -respondió la Jiang Shi leyendo uno de los mangas que compro al igual que Zombina-.

"Ah…" -fue lo único que dijo el Uzumaki que no le quedaba energía para decir una oración-.

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Todas las mujeres se quedaron con la mandíbula abierta, incapaces de procesar lo que acababan de escuchar.

Kurenai, tumbada en el suelo, apenas podía respirar de tanto reírse. "¡Ja, ja, ja! ¡Se los dije, chicas! ¡Les dije que lo descubrirían pronto!"

"¡Ahora entiendo por qué Yugao-san salió corriendo tan avergonzada!" -exclamó Tayuya, llevándose una mano a la frente como si acabara de resolver un misterio-.

"¡No tenía idea de que Yugao-sensei tuviera esos gustos!" -comentó Ino con incomodidad, cruzándose de brazos y desviando la mirada-.

"Yo tampoco…" -admitió Sasame, sonrojándose ligeramente- "nunca pensé que le gustaran ese tipo de libros… ¿y que además fuera una Fujoshi?"

"Las personas serias siempre ocultan algo… pero no esperaba esto de Yugao" -dijo Temari, alzando una ceja con sorpresa-.

Shion, tratando de calmar los ánimos, alzó ambas manos. "No deberíamos juzgar los gustos de los demás, chicas. En especial si se trata de… de..." -Shion intentó continuar, pero se quedó sin palabras, completamente sonrojada-.

Incluso Misaki, siempre calmada, quedó en shock. Se quedó completamente inmóvil, con los ojos dando vueltas en espirales.

"Pobre Misaki…" -murmuró Ino con una sonrisa nerviosa mientras miraba a su amiga congelada-.

Kurenai seguía riéndose sin control, incapaz de contenerse. "¡Ay, Yugao! ¡Nunca volveremos a verte igual!"

Tsunade aclaró su garganta con fuerza, llamando la atención de todas en la sala. "Dejen de hablar de Yugao y de sus gustos… por más raros que sean. Están haciendo que parezca igual que Mero y sus… locuras por las tragedias románticas."

Justo en ese momento, un fuerte grito se escuchó desde el segundo piso, provocando que todas las mujeres dieran un respingo. Era evidente que el grito había salido de la habitación de Yugao.

Tsunade alzó una ceja, preguntándose en voz alta: "¿Es posible que Yugao nos haya escuchado desde su habitación?"

Tayuya y Temari intercambiaron miradas incrédulas. "A menos que tenga un oído súper agudo, no lo creo…" -comentó Temari mientras se cruzaba de brazos, aun procesando lo que había pasado-.

Tsunade suspiró con cansancio y se pasó una mano por la frente. "A partir de ahora, habrá una nueva regla" -su tono fue firme y serio, haciendo que todas prestaran atención- "desde hoy, están prohibidas las palabras 'Fujoshi' y 'Yaoi'."

Todas las mujeres en la sala asintieron obedientes… bueno, casi todas.

Kurenai seguía en el suelo, riéndose sin parar y golpeando el suelo con el puño como si la situación fuera la cosa más divertida del mundo.

"Kurenai…" -comenzó a decir Tsunade, frunciendo el ceño- "¡deja de reírte de las desgracias de los demás!"

Pero era como si Kurenai estuviera en su propio mundo. Aun riéndose a carcajadas, ni siquiera registró las palabras de la Hokage.

Tsunade suspiró pesadamente, rindiéndose ante la situación. "Mañana pensaré en un castigo para ti…" -murmuró con cansancio mientras se dirigía a su habitación para descansar-.

Las demás mujeres, aun procesando la extraña situación, comenzaron a retirarse también a sus respectivas habitaciones.

Kurenai se quedó sola en la sala, sin dejar de reír. Cada vez que intentaba calmarse, una nueva ola de risas la sacudía, incapaz de detenerse por completo.

-Fin del capítulo-