10Capitulo 13: Aunque duela...
"Finalmente". Una persona mayor comenzó a hablar. "El día esperado ha llegado, es hora de experimentar". Continuo hablando mientras frotaba sus manos arrugadas juntas.
Este anciano es el dueño de una de las voces que he escuchado anteriormente, todos estos días, semanas. Él es un anciano con unas claras arrugas en su rostro, de baja estatura, pero a la vez ancho y fornido. Sus brazos no son del tipo débil y arrugado, sino que son gruesos y musculosos. Y unos cabellos grises para representar su casi inexistente cabellera, más unos cortos pelos que cubren la parte inferior de su cara, cubriéndolo todo menos un pequeño espacio alrededor de su boca.
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La constante oscuridad la he pasado tranquilo, no muy diferente a echarse una siesta de unas 12 horas. Ha habido veces que creí que me volvería loco. Pero, esos sentimientos se esfumaron. Dejando un gran vació de estas emociones descontroladas dentro de mí. Espere paciente...
Desde mi despertar, en el cual he sido capaz de escuchar por primer vez sus voces, a pasado más un mes. Según se me ha dicho, he recuperado rápidamente la conciencia luego de ese último desmayo. Actualmente llevo casi dos semanas sin volver a caer inconsciente, y por cada día que pasaba regresaba un poco el control de mi cuerpo. Aún más importante, mis sentidos faltantes.
Hace más de una semana soy capaz de levantar el parpado de un ojo y con eso recupere parcialmente la vista de un ojo, y a los pocos días el otro. En ese día en adelante mi vista se fue aclarando, siendo ahora no solo para mi ser posible levantar los párpados sino que también veo con claridad. Al recuperar la vista, finalmente le puedo dar una descripción a la apariencia de estas dos personas que me han estado cuidando.
Mi sentido del tacto aun sigue medio apagado. Por ahora lo único que siento es la comida de la cama en la cual mi cuerpo descansa. Si, cama (pequeña). Es una sorpresa que me traten de esta manera estos desconocidos, incluso hubo un momento que trataron de alimentarme. No les salió bien, casi me ahogo con esa comida... Al saber que no necesito beber o comer para vivir dejaron de intentar alimentarme por la fuerza, ¿Cómo se enteraron de eso? Ni la menor idea.
Los parpados es lo único en lo cual tengo un buen control. Lo demás, va mejorando...
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Suspiro imaginario. Como quisiera suspirar de verdad.
Nada está bien. Quizás me estén cuidando, todos los días revisan el estado de mi cuerpo sin falta y se alegran con forme voy mostrando avances en mi recuperación. Sinceramente, es como tener a un doctor cuidándote las 24 horas y que este se preocupe por tu recuperación ¿Qué mejor cuidado que este para alguien en mi estado? Ojala fuera así. Es una completa mentira, ellos no están feliz por mí...
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"Hoy es el día pequeño". Haciendo un buen control de sus fuertes y hábiles manos el anciano me levanta con cuidado de la cama y me coloca en su hombro. Teniendo una de sus manos en mi espalda, haciendo así presión hacia su hombro para evitar que me caiga, comienza a caminar por esta casa.
Ignoro la habitación, sus acciones y al lugar al que me lleva. Qué importancia tiene el exterior si ahora mismo mi interior es un caos...
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Cuanto deseo negarlo, la llegada de este día...
Estas personas me cuidan y la vez me tienen atrapado aquí. Me quieren con ellos por un motivo y se aseguran de que no escape. Mis habilidades están bloqueadas, tengo este collar en mi cuello que me impide activarlas. Tampoco puedo moverme, no hay nada que pueda hacer. No hay forma de defenderse.
"Eres muy importante, en ti se encuentra la cura". Mientras me transportaba da inicio a su habitual monologo, él está feliz por esto. Esperando grandes resultados en este 'estudio'. "Por muchas décadas esas criaturas infernales han sido un fastidio para todas las razas. Sus horrible grito pasa libremente por el sistema auditivo, pasándolo sin dañarlo hasta llegar al cerebro. Y, ahí es cuando se rebela lo horrible de su habilidad, las ondas de este grito, o chillido, se ve constantemente rebotando en el cráneo al cerebro y viceversa, provocando un eco bastante largo, un eco agonizante. Siendo imposible para estas ondas el salir, esas ondas tienen rodeado al cerebro, dañándolo más y más por cada segundo que se encuentran en el interior del cráneo. A los pocos minutos, el objetivo sufre un derrame cerebral. El cual lo dejare en una parálisis permanente".
Tantas veces la misma y larga narración. Estoy casado de ella. Recordándome cada día lo importante que soy para este hombre, su salvación para él y unos cuantos miles.
Abre una puerta que da al exterior y abandona la casa sin siquiera molestarse en cerrarla. Quisiera saber a dónde me lleva, pero al colgar de su hombro solo soy capaz de ver el camino por el cual paso. Debería disfrutar este sol, es un agradable día, quizás sea el último que tenga.
Suelta un largo suspiro, uno largo y cansado, pero que pareciera que se estuviera quitando un gran peso de encima al mostrar una clara determinación en su rostro. "Tantas víctimas en cada año, humano o monstruo. Ninguno muestra signos de poder recuperarse. Excepto tú". Hace presión con su mano en mi espalda." cada día muestras un avance en tu recuperación, una recuperación nunca antes vista. Eres valioso, y por eso... no voy a correr el riesgo de que te escapes si te recuperas lo suficiente, comenzare a investigarte inmediatamente". Una gran determinación como ninguna otra suena en su firme voz mientras su ojos ardían en una inquebrantable voluntad, afirmando, no, declarando su posición en este asunto. El mal que ha sufrido hasta ahora y la luz de la esperanza que le he otorgado.
Ojala pudiera hablarte, hacerte entender mis pensamiento. Pero no, la verdad es que ni yo mismo entiendo mi posición en todo esto. Si me dijera que en sangre esta la cura de una enfermedad incurable la ofrecería con justo, claro, mientras no arriesgue mi misma vida. No he visto ninguna de todos estos humanos afectados, o si incluso hay alguno por aquí, es algo con solo mencionar una cifra ya hace impacto en mi...
Ayudar... ¡Claro! ¡Encantado! Solo... se gentil. No me ha dicho que métodos recurrirá para dar con la supuesta cura, es mi propia mente lo que teme lo peor. Lo cual es lo usual...
Por lo cual parecieron largas horas finalmente el hombre detiene su caminar y hablar. Exhala una gran cantidad de aire de un vez, como si buscara palabras para decir su última frase. "Tú... tienes unos lindos ojos, iluminados por una gran bondad, pero que no reflejan tus buenos actos. Pareciendo que estos sean inexistentes. No, reflejan una ansiedad a lo desconocido, buscar aquello que no se encuentra a simple vista y explorar este mismo mundo sintiendo una gran felicidad. Yo..."Por primera vez, su voz se quebró. "Lamento arruinarte tu sueño haciendo promesa de que contigo poder salvarlos. Si te sirve de consuelo... esto no es fácil para mí. Lo siento, pero no voy a poder acabar rápido...".
Siendo eso lo último que quiere decirme, escucho el rechinar de las bisagras de una gran puerta, sellando así mi destino.
Aunque le duela, él no retrocederá en sus actos. Se arrepentirá, de eso está seguro, aun así, aquí mismo se acaban sus dudas.
... Maldición. ¡Desgraciado! ¡No me compliques más la vida!