UNWIND

Summary:

Espero que disfrutes tu regalo, decía el mensaje de Erica. Ya me hice cargo del pago. Puedes agradecérmelo mañana.

"Así que eres un hombre lobo, ¿eh?" Dijo el tipo cuando Derek lo miró otra vez. Sus ojos se deslizaron desde la cara de Derek al resto de su cuerpo, lentamente, sin pudor. Cuando vuelve a subir la mirada y sus ojos encuentran de nuevo, la comisura de la boca del tipo se alzó ligeramente en una pequeña y arrogante sonrisa. "Amo trabajar con hombres lobos." AU en donde Derek es un hombre de negocios que se enamora de un hombre de la noche como Stiles.

Nota de la traductura:

Ni los personajes ni el fic me pertenecen, muchas gracias a coffeeinallcaps quien es el autor original de esta obra y por darme la autorización de poder traducir esta maravillosa historia. Espero que les guste y disfruten leyendo la historia tanto como yo disfruté traduciéndola.
La historia también se encuentra en

"Necesitas relajarte, Derek" Fue lo último que le dijo Erica antes de salir de la oficina esa misma noche, Derek, había asentido con la cabeza distraídamente y se había olvidado de todo cuando escuchó el timbre. Ahora hay un chico alto y delgado en la puerta de su apartamento, pasándose una mano por el cabello y observando a Derek con unos cálidos y oscuros ojos, Derek no puede evitar pensar en que no le importaría relajarse con él.

"¿Pizza?" Pregunta, aunque en realidad no recuerda haber pedido ninguna. Había sido un largo día y tal vez su cerebro se había hecho cargo de la cena sin que se hubiera dado cuenta. No sería la primera vez.

El chico se encoge de hombros. "Claro, si tú la ofreces." Dice en una profunda y rasgada voz que lo ayuda a reconocer su edad, probablemente estaba a finales de la adolescencia o a mitad de los veinte. "Me encanta la pizza con champiñones. Para que sepas." Su mirada estaba fijada sobre el hombro de Derek mientras hablaba, sus cejas se alzaron. "Hombre, ella de verdad no estaba bromeando. Espero que des buenas propinas." Sacó las manos de los bolsillos y se movió tratando de pasar por un lado de Derek.

Derek lo detuvo. "Espera," dice, entendiendo todo. "Un segundo."

El chico se volvió a encoger de hombros. Se rascó la quijada mientras veía como Derek revisaba su celular. Espero que disfrutes tu regalo. Decía el mensaje de Erica. Ya me hice cargo del pago. Puedes agradecérmelo mañana.

"Así que eres un hombre lobo, ¿eh?" Dijo el tipo cuando Derek lo miró otra vez. Sus ojos se deslizaron desde la cara de Derek al resto de su cuerpo, lentamente, sin pudor. Cuando vuelve a subir la mirada y sus ojos encuentran de nuevo, la comisura de la boca del tipo se alzó ligeramente en una pequeña y arrogante sonrisa. "Amo trabajar con hombres lobos."

El nombre del tipo – seudónimo o lo que sea – es Stiles. "No puedo creer que nunca hayas oído hablar de mí." Dice antes de arrastrar con firmeza su lengua por la cabeza de la polla de Derek. "Solía hacer porno bastante bueno, sabes. Hace un tiempo." Sus ojos se cierran y deja salir un suspiro ahogado, deslizando su mano hacia la base de la polla de Derek antes de seguir el movimiento con sus labios, consumiendo a Derek con su húmeda y caliente boca.

La columna de Derek se arquea lejos del respaldo del sofá mientras tiembla. "Yo no puedo creer que tú nunca hayas oído hablar de mí." Dijo sin aliento, rindiéndose a la necesidad de poner su mano en la curva de la cabeza de Stiles. "Solía hacer algunas apariciones en la TV hace un tiempo."

Stiles suelta una risa ahogada alrededor de su polla, luego se quedó quieto hasta que Derek hiciera contacto visual con él otra vez antes de metérselo por completo en la boca. Derek se siente por un breve momento agradecido por la capa de látex que se interpone entre él y la talentosa e implacable boca de Stiles; no habría durado ni treinta segundos sin ella.

Stiles se ve bien con el jersey gris y los vaqueros ajustados que lleva, pero se ve incluso mejor cuando se deshace de ellos con movimientos rápidos y elegantes. "Dios, eres tan sexy" Dice Stiles mientras vuelve a sentarse a horcajadas sobre las caderas de Derek, con confianza, con facilidad, como si lo hubiera hecho toda su vida, como si los dos hubieran hecho esto un millón de veces antes. Las calientes yemas de sus dedos comienzan a recorrer el estómago de Derek, dejando un rastro de piel de gallina a su paso. Después, las manos de Stiles estaban sobre sus hombros, empujándolo contra el colchón. "Mírate, eres jodidamente impresionante, en serio, joder, ¿puedo—"

"Claro" Responde Derek, sin saber y sin importarle siquiera a lo que está aceptando. Estar acostado le recuerda lo agotado que está su cuerpo. Stiles es placenteramente pesado encima de él y hay algo sobre su aroma, un aroma a limpio que es reconfortante, calmante. La mente de Derek se agudiza y al mismo tiempo se relaja un poco, todavía con el recuerdo de la mamada, el profundo sonido de la voz de Stiles, la forma en la que Stiles se sigue moviendo, hablando, tocando, soltando pequeños jadeos contra su piel. A Derek no le importa qué es exactamente lo que Stiles quiere hacerle; todo lo que quiere es más de Stiles. Mucho más, y después, dormir un buen rato.

"Oh si," respira Stiles. Apoyando la nariz contra la quijada de Derek. "Hueles tan bien, joder, no puedo esperar a sentirte dentro de mí." Y presiona largos besos con la boca abierta en la garganta de Derek, empezando desde su manzana de Adam, subiendo por la mandíbula, llegando a la comisura de sus labios.

"¿Puedo sólo—" Murmura de nuevo, y entonces sus bocas se encuentran, los dedos de Stiles descansan ligeramente contra la mejilla de Derek. Stiles gime contra su boca, presionando su lengua contra la lengua de Derek, con la mano bajado por el cuerpo del más grande, agarrando la polla palpitante de Derek, y Derek no puede evitar pensar si y oh, joder, joder.

Stiles lo cabalga hasta el orgasmo, caliente, apretado y húmedo, con el embriagante olor a sexo y sudor rodeándolos. Los ojos de Derek se cierran justo después de correrse. Se esfuerza para mantenerlos abiertos y observa como Stiles le quita el condón y lo hace un nudo mientras se mueve como si fuera a salir de la cama. Su polla todavía está medio dura, enrojecida, con la punta brillante con pre-semen.

"Espera," Dice Derek. Es lento, pero lo suficientemente fuerte para hacer que Stiles se detenga y le devuelva la mirada. Sus mejillas están sonrojadas y su cabello está desordenado. Él se ve – se ve desaliñado, bien follado, y una pequeña corriente de lujuria recorre el cuerpo de Derek.

"Vuelve aquí," Dice bruscamente extendiendo la mano, "deberías, quiero que tu—" y Stiles le dedica una rápida sonrisa de sorpresa. Vuelve a alinear su cálido y pesado cuerpo con el de Derek y se rodea con una mano, la cabeza de su polla deslizándose por el pliegue de la cadera de Derek. Derek pasa los dedos por el cabello de Stiles y acaricia la suave piel de su cuello y hombros, escuchando los hermosos sonidos que hace Stiles, mientras cierra los ojos.

Cuando abre los ojos otra vez, Stiles está de pie junto a la cama, vestido y moviendo el celular entre sus manos. "Le pediré a tu secretaria que añada el habitual cinco por ciento a la factura," Dice en voz baja. "¿Está bien?"

Derek parpadea un par de veces. "Si" dice, cuando por fin entiende lo que acabó de salir de la boca de Stiles. "Si, por supuesto." Comienza a levantarse apoyandose sobre uno de sus codos. "Debería…"

"No, no," Dice Stiles, agitando la mano hacia él. "Deberías dormir. Duerme ¿Vale? No te preocupes de que te robe alguno de tus escandalosamente bien combinados y probablemente igual de escandalosamente caros muebles minimalistas, tu secretaria sabrá donde—"

"Ella es mi jefa," murmura Derek contra la almohada.

Stiles inclina la cabeza, mirándolo. "¿Qué dijiste?"

"Ella, huh." Quiere decir que no se preocupe, que no importa, pero Stiles sigue mirándolo con curiosidad. "Erica no es mi secretaria. Es mi jefa."

Stiles levanta las cejas. "¿En serio? ¿Tu jefa te consigue prostitutas?"

Derek intenta no hacer ninguna mueca— ninguna de las personas que Erica había enviado con anterioridad a su apartamento se habían referido así mismas de esa manera. De igual forma, ya había deducido que Stiles no era del tipo que endulzara las cosas.

"Si," dice. "De vez en cuanto."

Desde que renunció a las relaciones convencionales y con el creciente éxito de Hale Consultancy que lo dejaba con muy poco tiempo o energía para intentar relaciones de una noche. A Erica le gusta bromear diciendo que Derek está casado con el trabajo y que contratar prostitutas no es engañar si son las tarjetas de crédito de la empresa las que lo pagan. Derek realmente espera que ella este bromeando sobre la segunda parte; el hecho de que se haya retirado del mando de la compañía no significaba que no siguiera envuelto emocionalmente.

Stiles aún no había dejado de mirarlo, entonces Derek especifica. "Cuando ella piensa que necesito relajarme o desahogarme."

¿Sabes lo que necesitas, Derek? Una buena y dura follada, le había dicho Erica— quien no tiene ningún concepto de vergüenza ni de privacidad, ya sea propia o ajena— hace más de medio año, y así fue como habían empezado – maso menos - a llegar trabajadoras sexuales a la puerta de la casa de Derek cada cierto tiempo. Hay días en los que deseaba nunca haber invitado a Erica a su manada; pero había más días en los que desearía haberla conocido mucho antes. Algo le dice que no habría estado ni la mitad de perdido después de Kate, después de la muerte de sus padres y de Laura, si Erica ya hubiera formado parte de su vida en ese entonces.

Stiles silba. "Bueno, suena como que lo tienes todo resuelto," dice, desviando la mirada hacia el suelo. Comienza a juguetear otra vez con el teléfono entre sus manos. "Genial, okay, tal vez nos veamos por ahí." Hace un pequeño gesto con la mano y empieza a alejarse de la cama de Derek, con sus delgadas caderas balanceándose mientras se alejaba. Sus hombros se ven más anchos desde atrás. Inesperadamente, algo se retuerce en las tripas de Derek.

"Hey," dice antes de que Stiles desaparezca por la esquina. "Stiles. Dile que sea diez por ciento, ¿okay?"

Stiles se gira y le dedica la misma media sonrisa de antes. Pero esta vez no hay ningún signo de arrogancia. "Lo haré," dice, y después en un tono más suave, "gracias, Derek," y después se fue.

"Buenos días," Dice Erica con voz cantarina desde donde está apoyada contra el marco de la puerta del despacho de Derek. "¿Tuviste una buena noche?"

Derek sube la mirada desde la pantalla de su portátil. "¿Es un frappuccino lo que tienes en la mano?" Pregunta con suspicacia. "¿Y no me has traído café porque…?"

"Porque esto es, de hecho, una malteada de chocolate y mantequilla de maní y si te hubiera traído uno, probablemente me lo habrías tirado a la cara y habrías gruñido algo sobre a qué está llegando el mundo occidental," Dice Erica. "Entonces, ¿tuviste una buena noche?"

"Erica," dice Derek, ignorando su pregunta por segunda vez sólo para irritarla. "Somos una empresa respetable. Tenemos una reputación que mantener. No puedes pasearte por la oficina bebiendo malteadas de chocolate y mantequilla de maní. La gente te pasará por encima."

Erica saca perezosamente las garras de su mano libre una a una y deja brillar sus ojos de color amarillo. "Me encantaría ver como lo intentan. Ahora, dime que te pareció de mi regalo."

Derek suspira y se aleja de su escritorio. Su silla giratoria rechina con el movimiento. "Me gustó tu regalo." Dice. "Mucho. Gracias. Fue muy considerado de tu parte."

Erica entra a su oficina con grandes zancadas y toma un asiento opuesto al suyo, levantando las piernas para apoyar sus tacones sobre el escritorio de Derek. "Me imagine que había pasado un tiempo," dice. "y pensé que tal vez te gustaría probar algo diferente para variar. ¿Me equivoqué?"

Derek no está exactamente seguro a lo que ella se refiere con algo diferente, pero sus pensamientos ya están volviendo a Stiles— su voz, sus largos y seguros dedos, el reconfortante sentimiento de su peso. Los suaves sonidos que hacía mientras cabalgaba a Derek. "No," dice bruscamente. "No te equivocaste."

Erica lo contempla durante unos segundos. "Muy bien," dice. "Démosle una mirada a las solicitudes de subvención de investigación que han llegado para su finalización esta mañana." Sorbiendo de su batido, se acerca a la mesa para coger el portátil de Derek.

La cena de esa noche es comida china para llevar para una persona. Después de terminar, Derek se encuentra sentado en la encimera de su cocina, con las mangas de la camisa remangadas en sus antebrazos y un vaso de whiskey cerca de su codo, buscando en Google la página web de Stiles.

Sabe que, si llamara a Erica, ella le pasaría la información de contacto de Stiles en un latido. Joder, ella probablemente lo animaría. No sabe por qué no la llama. Tal vez sea porque no quiere admitir en voz alta, que una parte de él ya quiere volver a ver a Stiles, volver a sentir su seguro tacto, bañarse en su entusiasmo.

El sitio web, una vez que Derek lo encuentra, no es nada de lo que esperaba. Parece profesional; elegante, discreto, minimalista. No puede evitar sonreír, recordando la burla de Stiles a costa del diseño de los muebles de su apartamento. En realidad, no sabe qué era lo que estaba esperando. Tal vez errores ortográficos. Colores chillones. Anuncios llamativos.

Lo que definitivamente no estaba esperando era el tipo de imágenes que encuentra. Stiles completamente vestido en cada una de ellas, sin poses provocativas. Derek le da un sorbo a su bebida y le da click a la galería de fotos. Todo estaba ahí; los grandes ojos, los lunares salpicados a lo largo de la mandíbula y el cuello de Stiles, la nariz respingada ligeramente grande para su cara pero que le queda de manera encantadora, dándole un aire infantil. La forma y la plenitud de sus labios, que distraen la atención de cualquiera que lo mire. Las líneas del contorno de su boca cuando mira directamente a la cámara, tratando de no sonreír. Las largas pestañas y la ligera inclinación provocativa de su barbilla.

También hay una página de videos. Solía hacer porno bastante bueno, sabes, resuena en la mente de Derek. Deja que el cursor pase por encima de uno de los botones de reproducción durante un rato. Luego, le pone una estrella al link para guardarlo en su barra de marcadores y cierra la página de búsqueda para irse a servir otro vaso de whiskey.

Es una semana agitada, y Derek siente una extraña mezcla de nerviosismo y agotamiento al final de esta. Los tiempos han cambiado mucho desde que sus padres fundaron la empresa. La posición social de los hombres lobos había seguido mejorando y las oportunidades de trabajo surgían en consecuencia. Hoy en día, Hale Consultancy ofrece una amplia gama de servicios: desde hacer presentaciones corporativas hasta distribuir paquetes informativos, desde financiar investigaciones relacionadas con los hombres lobos hasta representar legalmente a los licántropos estadounidenses. En otras palabras, siempre tienen las manos llenas.

Erica manejaba la posición de CEO sin problemas, pero cada vez que Derek la ve en todo su esplendor se alegra de estar ahora en un puesto de asesor y no de mando. Ya no es la persona enojada y desconfiada que solía ser; ahora sabe, y reconoce, que él se hubiera derrumbado bajo la presión. Ver a Erica aplastar a una junta de representantes empresariales hoy mismo fue una experiencia tan angustiosa como gratificante. Pero prefirió declinar la salida a beber con Isaac y Boyd y se había ido mejor a su casa, aunque su cuerpo sigue zumbando, la piel le picaba. Se siente como si hubiera algo arañando el interior de su garganta. Algo que quiere salir.

Contempla desenterrar sus zapatillas de correr y salir a hacer algo de ejercicio. También contempla la idea de llamar a Malia e ir a correr de verdad, pisarse los talones, perseguirse por el bosque, tal vez derribar un venado sólo por la emoción de hacerlo. Sin embargo, no la llama y se queda en el sofá, entrando y saliendo en varios programas de Netflix. Se toma su segundo vaso de whiskey a pesar de que el alcohol se diluye en sus vasos sanguíneos antes de que tenga la oportunidad de llegar a su cerebro.

Termina entrando otra vez a la página web de Stiles.

Las imágenes son todo lo contrario a eróticas, pero de alguna forma irradiaban una sexualidad llamativa. Hay algo de Stiles que hipnotiza incluso cuando está quieto, en una imagen pixelada, incluso así, atraía a Derek, tentándolo.

Derek vuelve a la página de los videos, considerando ver uno de ellos. La sola idea le hace estar medio empalmado en su pantaloneta, con un cosquilleo de excitación en la entrepierna, pero no presiona ninguno de los videos. Vuelve a desplazarse hacia arriba y mira la dirección de correo electrónico y el número de teléfono que aparece en la parte superior de la página. RESERVAME AHORA! Dice justo encima de ellos.

Todavía se siente inquieto y nervioso. Tal vez por eso se rinde tan rápido.

Stiles coge el teléfono en el segundo timbre, antes de que Derek pueda decidir que es una mala idea, después de todo. Antes de que pueda colgar y ver uno de los videos de Stiles en su lugar, masturbarse con él con la mano bajo los pantalones porque no puede molestarse en quitárselos por completo o siquiera bajarlos hasta las rodillas. Antes de que pueda sentirse vagamente avergonzado por masturbarse con uno de los videos de Stiles como un adolescente y se bañe y se vaya a la cama temprano, olvidándose de Stiles y de su talentosa boca y sus firmes dedos y sus cálidos ojos oscuros.

"Stiles Stilinski"

Sonaba… normal. De nuevo, Derek no tiene ni idea de qué era lo que estaba esperando. ¿Una sensual voz de sexo telefónico?

"Hola" Responde Derek. "Stiles. Es Derek. Derek Hale" Hace una pausa, preguntándose si quizás debería ser más específico, tal vez mencionar la fecha del primer encuentro que habían tenido, pero Stiles ya se estaba riendo al otro lado de la línea.

"Hey, Derek," dice. "Me alegra escucharte. ¿Cómo van tus escandalosos y caros muebles?"

"Bien." Dice Derek." Es decir, todo sigue en su lugar, así que…" Hace una mueca cuando se da cuenta de lo que está insinuando, pero Stiles vuelve a reírse otra vez.

"Tengo que admitir que me sentí tentado por esa exprimidora," dice. "Muy tentado, pero al final me decidí a no hacerlo. Ya sabes, integridad profesional y todo eso. Aunque se veía como una exprimidora buenísima."

"Si, mi hermana pequeña me la regaló de cumpleaños. Creo que pretendía ser una especie de regalo irónico." Nunca se sabe con Cora.

"De todos modos, ¿Para qué necesita un tipo como tu un exprimidor? ¿No tienes personas que haga el zumo por ti? Eso es simplemente trágico."

Derek se sobresalta con el sonido de su propia risa. "En realidad, soy el tipo de personas que prefiere ir por un café, me imagino que, si tuviera a alguien que me hiciera el zumo, lo cual, no tengo, sólo para aclarar, esa persona probablemente sería… yo."

"¿En serio?" Dice Stiles. "¿Prefieres el café? Whoa. Nunca lo hubiera—pero, en fin, mierda, lamento haberme desviado del tema. ¿Supongo que estabas llamando para pedir otra cita? Porque llamar está bien, por supuesto, es sólo que la mayoría de la gente prefieren enviarme un correo electrónico, o concretan la primera cita por teléfono y que el resto de nuestra correspondencia sea por correo electrónico a partir de ahí. Es más fácil."

"Um," Dice Derek. Realmente no había tenido un propósito concreto en mente. Sólo se había sentido nervioso e imprudente. "Si, me gustaría pedir otra cita."

"Genial," Dice Stiles, y parecía que lo decía en serio. Derek no puede evitar sentirse complacido con eso. "¿Tienes alguna preferencia por un día o una hora determinada?"

"Um," dice Derek de nuevo. Golpea sus dedos contra su rodilla, pensando, Oh, que demonios. "¿Qué tal de esta noche?"

"¿Esta noche?" Repite Stiles. "¿Esta noche como en, ahora mismo?"

Suena un poco incrédulo y un poco… algo más. Derek dice en voz baja. "Por supuesto que no estoy esperando que tu—"

"No, quiero decir, es una posibilidad," Dice Stiles y esta vez Derek es capaz de identificar el algo más en su voz: diversión. "Resulta que esta noche estoy libre. Pero es un pedido de último minuto, Señor Hale, le va a costar un poco más. Mucho más." Su voz es diferente ahora, profunda y coqueta.

"Está bien." Dice Derek con la palma de la mano sobre su polla, presionando una vez, sólo para quitarse la tensión. "No me importa."

"Como mucho, mucho más."

"Okay."

"Mucho, mucho, mucho más."

Stiles ahora sólo parece estarse divirtiendo. Es por eso y por el alivio de toda esa agitación acumulada que se une lentamente y se transforma en lujuria anticipada, que Derek se siente cómodo diciendo, en una voz baja (se imagina que parecida a la voz que usan en las llamadas sexuales, sensual y grave), "No me importa lo que me cobres. Te quiero ahora."

Stiles llega media hora más tarde y sorprende a Derek dándole un beso lleno de lengua cuando le abre la puerta. "Hey, grandote," respira contra la barba de Derek mientras mete las manos en la camisa de Derek y lo empuja hacia atrás, entrándolo al apartamento, cerrando la puerta detrás de él. "Fuiste muy atrevido en el teléfono. Tengo que decirlo, me gustó bastante."

"Bien," Dice Derek y no puede evitarlo, están tan cerca a la pared: empuja a Stiles contra ella y coge su cara entre las manos alineando vez sus bocas una vez más. Stiles sabe y huele maravillosamente limpio y fresco, igual a la última vez, y Derek se pregunta si utiliza productos para enmascarar su aroma, quizás alguna de las líneas financiadas por el departamento de investigación de Hale Consultancy.

Entonces, Stiles succiona el labio inferior de Derek entre sus labios y le entierra los dientes suavemente, separando las piernas y deslizando sus manos hacia el trasero de Derek para tirar de él contra su cuerpo, contra el caliente y apretado espacio entre los muslos de Stiles. Los bultos de sus erecciones se encuentran y la respiración de Stiles se entrecorta, Derek olvida todo sobre los productos de limpieza desde ese momento.

"Has tenido una semana dificil, huh," murmura Stiles contra su mejilla, apretando sus hombros. "Puedo sentir—toda esa tensión— deberías dejarlo salir, sólo…" Sus ojos se cierran y medio gime cuando Derek empieza a presionar apresurados besos en la base de su garganta. "Joder," dice con la respiración entrecortada, mientras sus caderas se mueven ligeramente contra las caderas de Derek. Sus labios están hinchados y brillantes, y Derek arrastra su pulgar contra ellos antes de entrelazar su mano en el cabello de Stiles, empujando su cabeza hacia un lado, exponiendo la zona del pulso en la garganta.

"Deberías dejarlo salir," Dice otra vez Stiles, en voz baja, colocando ambas manos en la cabeza de Derek, acercándolo más él. "Vamos, suéltalo, pierde el control. Deja salir un poco al lobo." Lo dice ahora con mucha más determinación.

Derek suelta una carcajada contra la piel de Stiles y siente como Stiles tiembla. "No es exactamente, así como funciona," dice Derek, pasando ligeramente los dedos sobre la piel de gallina que provocó en la piel expuesta de Stiles. "Nosotros no perdemos el control así de fácil."

Stiles sonríe con un deje de maldad. "Ahora sí," dice. "Bueno, en ese caso, reto aceptado." Y sin romper el contacto visual se desliza contra la pared, hasta quedar de rodillas.

Quedan en volver a verse el próximo viernes y el viernes siguiente a ese y el siguiente. Al poco tiempo, Stiles empieza a ir todos los viernes en la noche. Todas sus citas mas o menos siguen el mismo patrón: Stiles llega, se enrollan, Derek acaba con los pantalones por los tobillos y los dedos enterrados en el cabello de Stiles, Stiles se la chupa, haciéndole garganta profunda y observa a Derek venirse desde abajo con un brillo complaciente en los ojos.

O, la alternativa es: Stiles llega, se besan, Stiles guía a Derek hasta su habitación, moviéndose para cabalgarlo cuando siente que Derek está cansado o cuando siente que Derek se siente excitado o frustrado pone su cara contra la cama dejando su culo al aire, diciéndole que deje de contenerse, diciéndole que más fuerte, más rápido, con la boca abierta y obscenamente rosada contra el blanco de la almohada y los dedos enterrándose en el colchón.

La mayoría de las veces, Stiles parece saber que es lo que Derek quiere antes de que él mismo lo sepa. De igual forma, la mayoría de las veces, lo que Derek quiere es a Stiles en general. Stiles que es audaz y entusiasma y se mueve con una confianza abrumadora. Stiles, que le hace cosas guarras con su boca y su lengua y sus manos, cosas que dejan a Derek jadeando por más.

Stiles le había pedido a Derek que se hiciera la prueba después de una de sus primeras sesiones. Cuando los resultados llegaron, él mismo revisó el documento y le dio el visto bueno a Derek. Después hizo que Derek se acostara sobre su espalda y lo chupa hasta que llevarlo al borde del orgasmo, terminando el trabajo con la mano, inclinándose con los ojos cerrados sobre la polla de Derek dejando que los chorros de semen caigan sobre su cara con los labios entreabiertos. Agarra la mano de Derek para arrastrar sus dedos sobre el desastre que había ocasionado para luego lamer el semen de sus dedos, tomándolo entre sus labios, gimiendo alrededor de ellos, con las mejillas ahuecadas y los ojos brillando con picardía.

(Derek está demasiado aturdido para participar en algo más después de eso, así que, ante su insistencia somnolencia, Stiles se estira a su lado y se acaricia lentamente mientras Derek lo observa a través de las pestañas.)

Stiles habla. Habla un montón, y habla sucio. Le dice a Derek que puede sostener su cabeza contra la cama si eso es lo que quiere, que le folle un poco la boca o que le sujete las manos por encima de la cabeza mientras lo folla. Le dice a Derek lo rico que se siente, lo bien que hace sentir a Stiles, como no quiere que Derek pare, no pares, no pares, por favor. Le dice a Derek que podría follarlo sin condón la próxima vez, si eso es algo que a Derek le gustaría hacer. Y esa noche, se aparece en su apartamento más dilatado y preparado de lo normal, con su cabello aún húmedo de la ducha que se había dado.

Entrar en Stiles sin una capa de látex que los separe es casi una experiencia trascendental. Derek se siente completamente exprimido después de hacerlo. Mantiene un brazo enroscado alrededor de los hombros de Stiles, sin soltarlo. No quiere dejarlo ir, no quiere soltarlo. No puede resistir el impulso de deslizar su otra mano sobre la espalda húmeda de Stiles y sentir lo mojado que está con su propio semen.

Stiles deja de respirar cuando Derek mete un par de dedos entre las mejillas de sus nalgas donde está increíblemente resbaladizo por el lubricante y el semen de Derek, hundiéndolos en su interior. "Sensible" murmura Stiles contra su pecho, su cuerpo se estremece débilmente contra el de Derek.

"Lo siento" y retira los dedos.

"No," dice Stiles bruscamente. "Sigue tocando. Se siente bien."

Entonces Derek lo hace, sigue acariciando a Stiles con largas y minuciosas caricias hasta que la respiración de Stiles se vuelve pesada y sus caderas empiezan a moverse contra las de Derek.

"No estoy seguro de tener fuerzas para un segundo round." Le dice Derek y justo en ese momento, como si coincidiera, el estómago de Stiles gruñe.

"Oh, Dios santo," dice Stiles carcajeándose. "Lo siento, aún no he cenado."

"¿Tú qué? Son las…" Dice Derek, atónito. Revisa el reloj en su mesa de noche. "Son las diez y media." ¿Cuándo ocurrió eso?

"Lo sé, iba a comer después—¿qué estás haciendo? No te muevas. Eres increíblemente cómodo, sobre todo tiendo en cuenta que eres como doscientos kilos de puro musculo."

"Esto es inaceptable," dice Derek, empujando ligeramente el hombro de Stiles cuando este no cede. "Suéltame, voy a pedir comida. No dejo que mi—no dejo que la gente pase hambre."

No dejo que mi manada pase hambre. Lo tenía justo en la punta de su lengua. Siente como se le calienta la cara, pero Stiles, gracias al cielo ni lo había notado. Se da la vuelta con un gemido demostrativo y se pasa el antebrazo por los ojos.

"¿Sushi?" Pregunta Derek. Recuerda una vaga conversación que Stiles y él tuvieron la semana pasada o la anterior a esa, sobre una noche que salió a comer sushi con Scott y— Derek ya había olvidado el nombre de la otra persona.

Stiles se gira sobre la cama otra vez. "Eres un cliente muy raro" murmura contra la almohada de Derek, lo cual Derek lo toma como un sí, así que va a buscar un par de calzoncillos y su teléfono para hacer el pedido.

Cuando el sushi llega y Derek lleva las cajas al dormitorio, los ojos de Stiles se abren cómicamente. "Santa mierda, eres ridículo," dice enfáticamente, sentándose. "¿Qué es son, como doscientos dólares en sushi? Por Dios."

"Tengo un gran apetito," se defiende Derek mientras se sienta en el borde del colchón y le da un par de palillos chinos a Stiles. "Vamos, come un poco."

"Iba a decir que, si no te preocupaba que derramara un poco de salsa de soya en tus sabanas, pero si eso llegara a pasar probablemente simplemente comprarías una cama completamente nueva y ya." Dice Stiles mientras cruza las piernas sobre la cama y se cubre ociosamente con una esquina de las sabanas. Quita la tapa de una de las cajas y hace sonidos de felicidad al mirar lo que tenía dentro.

"Claro," dice Derek secamente. "Eso tiene tanto sentido, porque obviamente nunca he escuchado de las lavadoras."

"Hey, exactamente, ¿Cuánto dinero tienes?" Pregunta Stiles con la boca llena de rollos california. "Porque si realmente tienes mucho dinero, podrías sentirte libre de establecer un pago automático y hacer que venga todas las noches." Mueves las cejas y coge otra pieza de maki.

Derek dice, en voz baja, sin pensarlo demasiado. "Podría."

Stiles lo mira. "¿Qué?"

"Podría hacerlo," Dice Derek. "Si tu quisieras. Lo podría hacer si tú también lo quisieras."

Stiles sigue mirándolo. Por un segundo parece sorprendido. Luego parece, de alguna manera, pequeño, y después hay una expresión en su cara que Derek no puede identificar pero que le seca la boca de todos modos. Está a punto de decir algo, de retractarse, disculparse, cualquier cosa que haga desaparecer esa expresión del rostro de Stiles, cuando Stiles vuelve a suavizar su expresión y se mete el rollo de maki en su boca. "No podría," dice agitando los palillos en dirección de Derek. "Derek, yo no podría aceptar esa oferta." Y Derek sólo asiente con la cabeza y hasta ahí dejan el tema.

"Derek," Dice Erica, entrando en su oficina haciendo sonar sus tacones con una fotocopia en la mano. "¿Tienes un minuto?"

Derek se gira para mirarla. "Si," Dice. "claro. ¿Qué más?"

"¿Acabas de decir 'Qué más'? Has estado horriblemente feliz últimamente, pero esa es la cereza del jodido pastel" Dice Erica mientras se sienta sobre su escritorio. "¿Todo esto es por Stiles? Debería de enviarle una nota de agradecimiento."

El corazón de Derek se estremece con la mención del nombre de Stiles, pero sabe que debería de estar sorprendido. "¿Esta es la parte en la que actúo como si no supiera que lo sabes? Erica, eres mi segunda al mando. Tu declaras mis impuestos. Sabes todo sobre mi."

Erica se encoge de hombros. "Cora me pidió que te vigilara antes de irse a Suramérica," Dice mientras revisa sus uñas. "Quizás le interese saber que estas despilfarrando la mitad de tu cuantiosa herencia en acompañantes."

"Un acompañante," Dice Derek con fuerza. "Singular. La última vez que revisé Stiles sólo era una persona. Por favor, déjate de tonterías polisilábicas y ve al grano."

"Oh, que sensible." Dice Erica y sonríe. "Todo lo que estoy diciendo es que un simple agradecimiento hubiera sido suficiente. Yo lo elegí para ti, especialmente para ti, en caso de que lo hayas olvidado. Lo cual no fue fácil. No es como que envíe a cualquier chico a tu apartamento. ¿Tienes idea de cuanto tiempo me demore en encontrarlo en primer lugar? Dejando de lado que aún no estaba tan segura de que fuera un buen partido para ti. Fueron muchas noches, Derek. Noches de trabajo. Debo de añadir que fue noches que saque de mi propio tiempo libre."

Escéptico, Derek arquea una ceja en su dirección. "Así que en realidad no estás acá para regañarme por despilfarrar mi cuantiosa herencia—"

"Por supuesto que no. Me apetecía irritarte un poco, eso es todo. Sólo quería asegurarme de que el Derek oscuro y retorcido que solía conocer sigue ahú en alguna parte." Ella ignora su mirada ofendida y continua. "En fin, vayamos al grano. Isaac tiene una propuesta un poco arriesgada de la que necesito hablar contigo."

Ella le pasa la impresión que llevaba en la mano. Derek la mira, luego la toma con las dos manos y volviéndola a leer. "¿En serio?"

"En serio."

"¿En serio quiere que nosotros empecemos a impulsar la legalización de la antigua ley de manada?"

"Aspectos de ella, sí." Dice Erica, con los ojos brillantes. "¿Qué te parece?"

"¿Qué me pare…? Estamos en el 2014," dice Derek con incredulidad. "Isaac en realidad no puede pensar que tenemos una jodida oportunidad de que el sistema legal estadounidense restablezca algo como un juicio por combate, ¿verdad?"

"Dios, aunque imagina lo divertido que sería." Dice Erica poniendo cara de circunstancias cuando Derek le lanza una mirada. "Vamos, Derek. Piénsalo por un segundo. No es como que no tenga sentido. Sabes tan bien como yo que hay leyes a las que todos estamos vinculados mágicamente— No estoy diciendo que necesariamente, juicio por combate, si no la ley de territorio de una manada en general—"

"Lo cual incluye destierro estatal instantáneo" Dice Derek. "¿Realmente crees—"

" – así que podríamos intentar hacerlos oficial," termina Erica, imperturbable.

"Y sabes tan bien como yo que una petición así nunca saldrá adelante. ¿Si sabes que mis padres lo intentaron, cierto? Nosotros—"

"Pero eso fue hace diez años," dice Erica. "y en esa época estaba toda la controversia con Deucalion, ¿recuerdas? Lo cual no es como que ayudara precisamente a la causa— Es decir, puedo imaginar por qué los humanos dudaban en darnos un centímetro de espacio con un loco político corriendo por ahí básicamente tratando de instigar un golpe de estado—completamente ridículo—mira, por supuesto que no estoy esperando que esta propuesta vaya a algún lado y Isaac tampoco está esperando algo."

"Entonces, ¿por qué—"

"Sólo escúchame, ¿sí? Algo así haría que el tema volviera a ser de dominio público. Una mayor compresión y aceptación de nuestras reglas y rituales. Podría ser el próximo paso para la emancipación de los hombres lobos. Y quien sabe, tal vez en diez años…"

"Entonces, en realidad, esto sería como un señuelo publicitario." Dice Derek sacudiendo la cabeza. "Están locos."

Erica le da una sonrisa inocente. "¿Esa no es la razón por la que nos convertiste?"

"No exactamente, no." Dice Derek, pero Erica ya se está levantando, arrebatándole la fotocopia de las manos y lo golpea con ella en la cabeza. "Piénsalo bien." Dice, dejándolo en la esquina de su escritorio. "¿Vamos a comer y beber más tarde?"

"No puedo, es viernes." Dice Derek distraídamente y puede sentir las puntas de sus orejas arder mientras Erica se aleja riendo.

Los días después de la propuesta que le hizo a Stiles, Derek se preocupa por quizás haber sobrepasado un límite de alguna manera. No es capaz de quitarse el miedo de que Stiles actuara de una manera diferente en su próxima cita, más distante y en el peor de los casos: que ni siquiera llegara.

Pero Stiles si llega. Con la misma sonrisa fácil y segura de siempre, se acerca para darle un beso como siempre, moldeando su cuerpo contra el de Derek, presionando suavemente la yema de los dedos a ambos lados de la mandíbula de Derek, como de costumbre. Luego, da un paso hacia atrás y pregunta casualmente. "Hey, me estaba preguntando, si te gustaría probar algo diferente hoy. Algo nuevo."

"Por supuesto." Dice Derek. La última vez que Stiles le había hecho una propuesta así, habían empezado a coger sin condón. Aunque algo le dice que esto es diferente. A pesar del tono de voz casual, Stiles se ve… se ve esperanzado, pero tenso, y cuando Derek se concentró pudo escuchar su corazón acelerado, sonaba más rápido de lo normal.

"Okay," Dice Stiles, asintiendo para si mismo. "Okay, tu usas corbatas para ir a trabajar, ¿cierto?"

Derek termina sobre su espalda y con las muñecas atadas a la cabecera de la cama y Stiles a horcajadas sobre él, con la polla enrojecida y dura, empezando a curvarse contra su abdomen. Stiles descubre a Derek mirándolo y sonríe. "¿Disfrutas de la vista?" Pregunta, dándose unas cuantas caricias lentas, y Derek lo observa, asintiendo con la cabeza.

Después, Stiles lo empieza tocar a él.

Stiles lo toca como si nunca lo hubiera visto desnudo. Lo toca lenta y contemplativamente, por todas partes— marca un patrón con las yemas de sus dedos sobre los antebrazos y bíceps de Derek y pasa las palmas de las manos sobre el pecho de Derek, bajando. Observa como la cadera de Derek se alzan cuando uno de sus dedos recorre suavemente la sensible piel del abdomen bajo de Derek.

Cuando sus manos terminan de explorar el cuerpo de Derek, Stiles empieza otra vez desde cero, pero esta vez con su boca. Las duras líneas de su polla sobresalen contra el abdomen de Derek, enviando leves cosquilleos a su entrepierna, mientras Stiles se cerca, arrastrando sus labios sobre la parte interna de las muñecas de Derek. Frota la punta de su nariz contra el hueco en la base de la garganta de Derek antes de chupar meticulosamente un chupón en su piel. Observa como el chupado desaparece y lo vuelve a hacer mientras Derek escucha los muy ruidosos sonidos de su ahogada respiración y el acelerado pulso en sus oídos.

Después de lo que parece ser una eternidad, Stiles finalmente se separa de su cuello y se acerca a besar a Derek. El beso empieza lento y perezoso, pero crece rápidamente en uno descuidado y sucio, hasta que Derek tiene que alejarse para poder respirar.

Stiles no malgasta ni un segundo y empieza a bajar de nuevo. Se lleva uno los pezones de Derek a su boca, las comisuras de sus labios se alzan cuando siente a Derek estremecerse ante el contacto sin poder evitarlo. Stiles lame y chupa el otro pezón de Derek hasta que está duro y húmedo y entonces sopla suavemente contra su piel, deliberadamente y Derek no puede evitar temblar ante la sensación. Stiles pasa la nariz por el camino de pelo que baja desde su ombligo, enterrando los dientes en la curva del hueso de la cadera de Derek, dejando que su boca roce la parte interna de los muslos de Derek, y Derek no puede, no puede aguantar más.

"Dios santo," dice, su voz, irreconociblemente rasgada. "Joder, estás… estás realmente disfrutando de esto. ¿Verdad?"

Stiles lo mira desde abajo, sonriendo dulcemente, y empieza a besarle las bolas a Derek.

Finalmente, Stiles los masturba juntos, polla contra polla, cada musculo del cuerpo de Derek tiembla mientras intenta desesperadamente de evitar correrse demasiado rápido, que esto termine demasiado pronto. De que esto se acabe del todo. Se da cuenta con que no quiere que Stiles se detenga, quiere que siga para siempre, quiere ser siempre el objetivo de la intensa mirada de Stiles y de su meticuloso contacto. Aleja ese pensamiento a un lado de su cabeza, los dedos de los pies se encogen cuando el ritmo de las caricias de Stiles aceleran.

"Te has estado aguantando conmigo" Dice Derek con voz ronca una vez que Stiles los ha limpiado a los dos y lo ha desatado. Todo su cuerpo se siente cálido y pesado, liviano. La cabeza de Stiles está apoyada contra su pecho, Stiles está masajeando ociosa e innecesariamente, una de las muñecas de Derek.

"¿De verdad piensas eso?" Dice Stiles, con una leve nota de diversión en su voz. "No sugiero este tipo de cosas tan seguido. Los clientes generalmente prefieren ser los que disfrutan más de sexo que yo."

Lo dice de manera relajada, pero hace que Derek sienta como si le hubieran tirado una piedra en el estómago. "No digas eso."

Stiles levanta la cabeza y lo mira. "¿Qué?" Dice, colocando suavemente el antebrazo de Derek sobre su estómago y alcanzando el otro con ambas manos, presionando la yema de los pulgares a cada lado del punto de pulso. "Tiene sentido. Es decir, yo no soy el que les está pagando, ellos me pagando a mí. Tiene sentido que alguno de ellos quiera llevar a cabo ciertas fantasías, o que no quieran dedicar el tiempo a cosas como—"

Derek ni quiera quiere saber a que se refiere Stiles con ciertas fantasías, las simples palabras le erizan la piel. "¿Cosas cómo qué?" Pregunta en cambio.

Stiles se encoge de hombros. "Bueno, yo no— Es decir, sólo digo que la parte de la preparación no es exactamente la más sexy. ¿Cierto?"

En la mañana de su próxima cita, Derek le manda un mensaje a Stiles, ¿Te parece bien venir sin prepararte esta noche?

Stiles le responde. Claro, ¿Por qué?

Ya lo verás. Derek el devuelve el mensaje y Stiles le responde con una carita feliz.

Cuando Stiles llega, Derek ya tenía varías almohadas acomodadas estratégicamente en el centro de su cama. Una vez que Stiles se desnuda y se puso cómodo, Derek se arrodilla detrás de él y le mete los dedos hasta que se corre con gemidos profundos y descarados, con la polla intacta, las manos enterradas en las sabanas, los pies temblando contra el colchón.

"Joder," Dice Stiles con énfasis cuando por fin recupera el aliento. Su cabello está alborotado y oscuro por el sudor, su labio inferior está hinchado y rojo de tanto chuparlo en su boca o quizás por morderlo. Tiene una expresión de aturdimiento en su cara, una que Derek reconoce del espejo cuando él va al baño después de que él y Stiles hayan tenido sexo. Se siente un poco engreído por eso.

En realidad, se siento muy presumido por eso.

"¿Sí?" Dice, quitándose el guante de látex y tirándolo hacia la papelera junto con el ahora vacío tarro de lubricante- él no es nada más que cuidadoso. "Bien."

"Jesucristo." Gruñe Stiles, presionando sus manos contra sus mejillas sonrojadas. "Dame un segundo, ¿quieres? Maldito Jesucristo."

"Tómate todos los segundos que necesites," dice Derek. "También podrías bañarte, si quieres."

Stiles baja sus manos y lo mira con los ojos entrecerrados. "¿Estás insinuando que apesto?"

"No, para nada." Dice Derek en un tono neutro. "La única cosa que estoy insinuando es que la técnica de mi dedo es lo suficientemente extraordinaria como para justificar que necesites una ducha de agua fría para refrescarse después de que la use en ti."

La risa de Stiles es una belleza; es ruidosa y lo hace con todo el cuerpo, sus ojos se cierran y sus manos se agitan a su alrededor. Derek podría ver a Stiles reírse durante horas sin aburrirse.

"Bueno, está bien." Dice Stiles, mientras se empuja sobre sus codos. "No voy a dejar pasar la oportunidad de jugar con una cabeza de ducha de cincuenta funciones." Hace una mueca. "Whoa, no tenía la intención de que eso sonara tan sucio."

"Mi regadera sólo tiene cinco funciones de agua," dice Derek. "Sigo sin entender de donde sacas la idea de que soy una especie de multimillonario derrochador—"

"Tu baño tiene un orinal."

"¿Cómo es que eso es tan inusual?" Protesta Derek.

Stiles se arrastra hasta donde él y le da un torpe beso en la boca mientras se baja de la cama. "No se preocupe por su linda cabecita, señor Hale. Vaya a buscarme una toalla."

Derek lleva veinte minutos en un episodio de The Walking Dead cuando Stiles vuelve a salir del baño. Llevaba su propia camiseta, pero una sudadera de Derek, que le cuelga peligrosamente de sus caderas, como si se fuera a caer en cualquier momento. La vista de él hace que la cabeza de Derek le dé vueltas.

Stiles se acerca al sofá y se acurruca al lado de Derek sin dudarlo. "¿Qué estamos viendo?" Dice, acercándose a la pantalla del portátil de Derek para inclinarla cuantos grados hacia atrás, y todo se siente tan natural, tan correcto, que Derek se rinde, enroscando un brazo alrededor de Stiles y acercándolo más hacia él, enterrando su nariz en la base del cuello de Stiles e inhala profundamente.

"Hueles bien," murmura casi involuntariamente, y mientras lo dice se da cuenta de que es la primera vez que es capaz de oler a Stiles sin la interferencia de los productos para enmascarar el olor que utiliza. Tal vez eso es lo está causando esa sensación embriagadora y lánguida.

"Si, Scott también dice eso," dice Stiles. "Siempre se vuelve extra cariñoso después de que me baño. Sigue intentando convencerme de que no use desodorante, lo cual es asqueroso. En serio. No sé qué es lo que les pasa a ustedes los alfas."

Es una suposición que la gente suele hacer. Aunque a Derek no le gustaría que fuera cierto, ya no, sigue sintiendo un dolor sordo en algún lugar cercano a su estómago cuando dice. "No lo soy."

Stiles levanta la mirada hacia él. "¿No eres qué?"

"No soy un alfa," dice Derek, mostrando sus ojos para demostrarlo.

Stiles lo estudia detenidamente. Derek se queda quieto, tratando de que el peso de los cálidos ojos marrones de Stiles no le afecte. Es difícil. Está a punto de apartar la mirada cuando Stiles dice, lentamente. "Okay, sé que rojo es para los alfas y amarillo, beta. ¿Qué significa el azul?"

Significa que tuve que matar por piedad a mi novia del colegio, Derek no lo dice. No le sorprende que Stiles no sepa que el color de sus ojos dice de él. No es exactamente de conocimiento general, ni siquiera en la comunidad de licántropos. "Significa que soy especial," dice, tratando de que sus palabras se bañen en sarcasmo.

Stiles suelta una carcajada. "Lo eres." Dice y se acuesta de nuevo contra el costado de Derek. "Oh, The Walking Dead. Kira es adicta a esta serie. Nos obliga a Scott y a mí a verla todo el tiempo."

Scott es el mejor amigo. Kira es la novia del mejor amigo. Derek ha estado prestando atención, recogiendo todos los pedacitos de información personal que Stiles decide darle, acunándolos contra su pecho hasta que se filtran en sus venas hasta su cerebro. Ni siquiera tiene la intención de hacer; sólo sucede. "¿Qué te gustaría ver?"

Stiles se encoge de hombros. "Cualquier cosa, la verdad." Dice vagamente, y aclara que el otorgamiento de información personal a terminado por el momento cuando alcanza la barra del teclado.

"No dejes que me duerma," murmura Stiles después de un rato, y Derek dice. "Claro."

No han pasado ni diez minutos y siente que Stiles se está quedando dormido, que su ritmo cardiaco disminuye y que su respiración se hace más profunda. "Stiles," Dice Derek, sacudiéndolo un poco. "Hey"

"Callate." Gime Stiles, presionando su cara contra el pecho de Derek.

"Hey, tu fuiste el que me dijo que no te dejara dormir." Dice Derek. "Sólo estoy siguiendo tus órdenes."

Stiles se sienta y lo mira con el ceño fruncido, después se estira. "Si, debería de irme a mi casa." Dice con voz de dormido, restregándose una mano por el cabello y de repente, sus ojos se abren de par en par, con el inconfundible sabor de la norepinefrina entrando en su aroma mientras los latidos de su corazón se disparan. "Mierda, nosotros no—"

"Hicimos todo lo que quería que hiciéramos esta noche," Lo tranquiliza Derek, y Stiles parece escéptico, pero no lo discute.

Después de esa noche, empiezan a hacer cosas diferentes con más frecuencia. En lugar de limitarse a anticiparse a los deseos de Derek, Stiles también comienza a sugerir e iniciar cosas que él parece disfrutar- realmente disfrutar, incluso más que todo lo que ya hacían antes. Que le metieran los dedos era una de esas cosas, atar a Derek y llevarlo lentamente al orgasmo era otra. Pero también hay otras cosas.

A Stiles le gusta cuando Derek murmura palabras de aliento al oído mientras tienen sexo. Le gusta correrse sobre Derek; lo vuelve todo tranquilo y flexible, con las mejillas sonrojadas y la boca suave mientras mira a Derek con grandes ojos y esparce su semen sobre la piel de Derek. Una vez, cuando Derek estaba sobre él, Stiles inclinó la cabeza hacia atrás y con ayuda de las manos en el cabello de Derek tira de su cabeza hacia abajo. Derek entiende la indirecta y con cuidado, le hace una marca con su boca a un lado de la garganta de Stiles y éste se queda completamente inmóvil debajo de él, con una respirando rápida, entrecortada y ruidosa.

La primera vez que Stiles trae un juguete, lo saca con seguridad de su bolso, pero las puntas de sus orejas están rosadas y Derek puede escuchar su corazón latiendo más rápido de lo normal. Derek coge el juguete y folla a Stiles con él hasta que se corre sobre su abdomen y sobre las sabanas, hasta que colapsa sobre su estomago y empuja su cara contra las almohadas de Derek y sigue gimiendo sin poder evitarlo mientras Derek lo folla durante las réplicas de su orgasmo.

Poco a poco, Stiles se va volviendo menos celoso con la información personal que comparte. Derek se entera que creció en un pequeño pueblo "en algún lugar en el norte"; de que Stiles jugó lacrosse en el instituto ("era tan malo que enloquecía hasta al coach.") y de que él y Scott se conocen "desde, básicamente, siempre". Aprende que la pizza favorita de Stiles es la de jamón y piña ("No ponga esa cara, señor, la pizza hawaiana es la mejor, por esto sí te peleo,") y que Stiles escribe.

"No, es en serio" Dice Stiles, rodando los ojos. "Es decir, sólo es un blog. Publico, ya sabes, cosas graciosas, comentarios sociales, ese tipo de cosas. Debajo un seudónimo, por supuesto."

Otra cosa de la que se entera Derek, para su sorpresa es que Stiles Stilinksi es el nombre real de Stiles. Hay algo en la voz de Stiles cuando habla de eso que le dice a Derek que no debería de hacer más preguntas— como cuando Stiles le había estado hablando de la universidad y Derek le había preguntado en qué se estaba especializando y Stiles se había puesto muy rígido y distante casi de inmediato.

Sin embargo, Derek se pregunta más tarde sobre las circunstancias en las que alguien podría sentirse más cómodo usando su nombre real cuando se dedica al porno y a la prostitución que cuando comparte su opinión en un blog. Los tipos de escenarios que se le ocurre hacen que se le encoja el estómago.

Derek se enamoró de una chica por primera vez, y unos meses después ella se desangraba en sus brazos. Luego conoció a la mujer con la que pensó que casaría y unas semanas después ella quemó la casa de sus padres con ellos dentro. Heredó el poder de alfa que una vez había deseado – porque Laura se suicidó después del incendio. Se convirtió en el CEO de la compañía de sus padres, algo con lo que había fantaseado desde que era un niño, y tuvo que renunciar porque no pudo soportar la presión.

Por supuesto, recuerda todo esto cuando las cosas con Stiles terminan.

Algo está mal. Derek lo sabe desde el momento en que Stiles entra a su apartamento. No puede olerlo en él, pero de alguna forma lo puede sientir.

"¿Qué está mal?" Murmura contra la boca de Stiles.

"Bueno, para empezar, el hecho de que tu polla no está dentro de mi ahora mismo." Dice Stiles sin el ritmo, pero Derek ya ha detectado su acelerado ritmo cardiaco.

Se echa para atrás, y dice, "Si estás—"

"Estoy cansado, eso es todo," lo interrumpe Stiles. "Ha sido una semana muy larga." Acaricia uno de los bíceps de Derek. "Vamos, grandote, déjame darte una buena mamada. Eso me animará."

Derek permite que Stiles lo guíe hasta la cama. Sin embargo, una vez que están desnudos, hace que Stiles se acueste y baja sobre su cuerpo. Sabe que no es tan bueno en esto como Stiles, pero de todos modos lo disfruta— con los sonidos de Stiles haciendo eco en la habitación, sus murmullos en voz baja de ("Si"," Joder", "Derek"), su costumbre de acariciar el cabello de Derek al lado de su cuello de una forma que hace que su corazón se hinche.

Le encanta como huele Stiles ahí abajo, le encanta el hecho de que ninguno de los productos para enmascarar el aroma nunca podrá suprimir por completo el aroma de ese lugar y se le llena la boca de saliva ante el olor. Le encanta la forma en la que Stiles se siente a su alrededor, caliente y apretado, cuando le mete un par de dedos en su interior llenos de lubricante, buscando el lugar correcto.

"Oh, joder" jadea Stiles, con las caderas levantándose contra el colchón, y después, cuando Derek vuelve a tocar su próstata otra vez. "Joder, espera, espera, quiero que tu…" Golpea el hombro de Derek y agarra un condón con su otra mano.

Mientras Derek se entierra dentro de él, Stiles murmura palabras de aliento, sus piernas fuertemente apretadas contras las caderas de Derek, pero Derek puede sentir como su atención se va otra vez después de unas cuantas estocadas. Hace una pausa. Stiles le pasa un brazo por el cuello para empujarlo hacia abajo, agarra la barbilla de Derek con la otra mano para inclinarlo hacia arriba y besarlo pero—

Derek se levanta sobre sus manos. Stiles le frunce el ceño.

"¿Qué está mal?" Pregunta Derek.

"Nada," dice Stiles con la cara seria.

"No me mientas."

"Yo no— nada está mal" Dice Stiles poniendo los ojos en blanco. "Sólo estoy un poco distraído. ¿Bueno? Lo siento." Hace contacto visual otra vez y guiña un ojo. "Aunque, me sentiré mejor cuando me folles de verdad."

Derek estudia la cara de Stiles, tratando de descifrar la verdad bajo la máscara. Le gusta pensar que ya sabe identificar cuando Stiles está diciendo la verdad, pero algunas veces es imposible. Esta es una de esas veces. "¿Estás seguro?"

Stiles suspira. "Si, estoy seguro. Algo pasó hoy y— vi a alguien que me recordó cosas que no me gusta recordar," Dice. "Cosas que ya están en el pasado. Eso es todo, ¿si? ¿Me vas a follar ahora o qué?"

"No lo sé, tal vez." Baja la cabeza y presiona unos besos en la clavícula de Stiles.

"Así que ahora es así, huh." Dice Stiles, con una nota burlona en su voz. "Mi atención se desvía por un segundo y de repente soy yo el que tiene que hacer todo el trabajo." Empieza a apretar, hasta donde puede en esa posición, apretando deliberadamente alrededor de Derek. Derek muerde la parte interna de una de sus mejillas y trata de resistirse a los movimientos de Stiles.

"Oh, joder." Murmura Stiles, con ojos cristalinos y medios cerrados mientras continúa moviendo las caderas contra la polla de Derek. "Por favor, " dice ahora, en voz baja, con los dedos alrededor de la mandíbula de Derek, tirando de él hacia abajo otra vez. Sus bocas se encuentras brevemente, descuidadamente. "Por favor, follame" susurra contra los labios de Derek. "Vamos, Derek." Hay un brillo escuro y juguetón en sus ojos cuando dice impacientemente, "vamos, Derek, sabes que no te puedes resistir a mí."

Y Derek se rinde, presiona su cara contra la larga y tentadora línea del cuello de Stiles y piensa, mientras embiste contra Stiles, mientras Stiles jadea contra su oído y le clava las uñas en la piel de sus hombros, Lo sé, lo sé.

Se acuestan uno lado del otra después de eso, la respiración de Stiles relajándose unos segundos después de correrse. Derek pasa sus dedos sobre el sedoso y suave cabello en la nuca de Stiles. Acaricia una de las pequeñas bolsas de los ojos de Stiles con la yema del pulgar, observa como los parpados cerrados de Stiles se agitan y, pro primera vez, se atreve a admitirse que quizás, ya estaba enamorado de Stiles.

Tres días después le llega un mensaje de Stiles. Derek, tengo que cancelar nuestra próxima cita, lo siento. Te avisaré cuando sepa más.

Después de eso, Derek no vuelve a saber de él durante más de una semana. No le llega respuesta después de haberle preguntado (Está bien. ¿El próximo viernes?). A partir del lunes, hay un zumbido constante de agitación bajo la piel. Para el jueves está convencido de que algo está mal.

"Dijo algo de que alguien le había recordado cosas que él no quería recordar." Le dice Derek a Erica. "¿Qué significa eso? ¿Crees que significa que está en problemas?"

"Sólo envíale un mensaje otra vez, Derek," Le dice Erica, mirando hacia arriba. "Dios. No es un trabajador de la calle, entonces no es como que esté muerto en alguna zanja."

"Gracias, Erica, eso me ayuda un montón y no es para nada insensible." Dice Derek.

Le vuelve a enviar un mensaje a Stiles. ¿Todo está bien?

Su teléfono vibra con una respuesta casi de inmediato, y su corazón empieza a latir con fuerza. Gracias por pedir mis servicios. Sin embargo, actualmente estoy en un contracto de exclusividad y por lo tanto no estoy disponible.

Eso no responde mi pregunta. ¿Estás bien?

Unos segundos después su teléfono vuelve a vibrar. Gracias por pedir mis servicios. Sin embargo, actualmente estoy en un contracto exclusivo y por lo tanto estoy indisponible.

Derek guarda su teléfono.

Se dice a sí mismo que está bien.

Envía un par de mensajes a Stiles y dos correos electrónicos. Cada vez recibe la misma respuesta automática. Gracias por pedir mis servicios. Sin embargo, actualmente estoy en un contracto exclusivo y por lo tanto estoy indisponible.

Se vuelve a decir que está bien.

"Contrato de exclusividad," repite Erica cuando le muestra el mensaje. "¿Y qué? ¿Ahora es un mantenido?"

"Eso parece." Dice Isaac. "Amigo, apesta ser tu. Eso realmente es una mierda. Lo siento."

"Al menos vuelves a estar libre para los viernes de tragos," Dice Boyd. "Ha sido muy duro sin ti, tío. Las habilidades de Isaac en el billar hacen llorar a cualquier hombre."

"Vete a la mierda." Dice Isaac, lanzándole un pedazo de papel a Boyd desde el otro lado de la mesa de conferencias.

Hay un dolor de cabeza creciendo detrás de los ojos de Derek. "¿Podemos empezar esta reunión, por favor?"

Erica lo sigue a su oficina después de la reunión. "Derek." Dice cuando cierra la puerta. "Debo disculparme."

"No es tu culpa." Dice Derek, apoyándose contra el escritorio. Su pecho se siente vacío.

"En realidad, tengo parte de culpa."

"Lo enviaste una vez," Dice mientras agita la cabeza. "Yo soy el que le siguió pidiendo que regresara."

"Pensé que era algo bueno, para ti. Tu estabas—estabas relajado, contento. Creí que…" Hace un gesto vago. "Creí que era algo bueno." Repite.

"Si, yo también."

Lo cual debe ser por eso, más que nada, por lo que se siente resignado. A estas alturas ya sabe lo que tiene que hacer: cuando pasan cosas buenas, cosas malas le siguen. Esa es su vida, las cosas buenas son pocas y muy alejadas entre ellas. Ya había gastado su cuota de cosas buenas durante el último año. Stiles había sido una ganancia inesperada, un bono. Un regalo.

Derek sabe que no debe de sorprenderse que ahora Stiles también se hubiera ido.

Erica le sonríe suavemente, con simpatía, antes de irse. Derek gira el lapicero entre sus manos. Se imagina a Cora sacudiendo la cabeza en su dirección con cansancio. "Nunca cambias, Derek. ¿Enamorarse de un prostituto? ¿En serio?"

Ese viernes por la noche llama a Malia.

Es un alivio meterse en su piel de lobo; apenas puede resistir el impulso de echar la cabeza hacia atrás y aullarle a la luna, dejando salir todo. En cambio, corre tras Malia. Ella es más pequeña que él, más ligera, pero se las maneja para llegar a alcanzarla y tirarla al suelo. Ella le muerde juguetonamente la garganta y él le con un chasquido. Cuando sus dientes se cierran contra su pata delantera con demasiada fuerza, ella grita y cojea hacia atrás sobre tres patas, gruñéndole con los ojos brillando. Derek se agacha y le lame la pata a modo de disculpa cuando ella se vuelve a acercar.

"Okay, escucha," Le dice Malia después cuando están estirados en su sofá, ella está usando una cuchara para sacar helado de un pote y él con el teléfono en sus manos y sus pies en su regazo. "Entiendo completamente que tengas el corazón roto o lo que sea, pero no te atrevas desquitarte conmigo. La próxima vez te arrancaré los ojos, ¿estamos claros?"

"No tengo el corazón roto o lo que sea." Dice Derek revisando otra vez sus mensajes.

"Necesitas un poco de helado," Le dice Malia pasándole su pote de helado. "Toma."

"Estoy bien," Dice Derek. "No necesito helado."

Malia se encoge de hombros. "Como quieras. Más para mí." Ella llena otra cucharada de helado y después le dice. "De todas formas, ¿Por qué salías con un prostituto? Eso no es algo que la gente haga normalmente. ¿Verdad?"

"No lo sé, me imagino que no." Y vuelve a revisar su teléfono.

Sigue diciéndose que todo está bien.

El caso es que no se había dado cuenta de la gran parte de su vida en la que se había convertido Stiles; de lo mucho que había significado para él tener la esperanza de pasar unas horas con Stiles al final de la semana. Aunque sólo se habían reunido los viernes, el brillo de la presencia de Stiles había iluminado de algún modo cada día, había impregnado cada aspecto de la vida de Derek. La había cambiado, había hecho todo mejor, más ligero. Ni siquiera era sólo por el sexo— Derek también extrañaba escuchar las historias de Stiles, extrañaba verlo hablar. Extrañaba escucharlo reír.

Patético. Decía la voz de Cora en el fondo de su mente.

Y lo es. Es patético. Es patético que Derek, en la tercera noche de viernes sin él, se había metido en la página web de Stiles para ver alguno de sus videos porno sólo para verle la cara otra vez. Es patético que tenga que cerrar la página a los pocos minutos de abrirla porque ver la cara de Stiles sin poder tocarla, besarla, hace que le duela el centro del pecho y el fondo de la garganta. Es patético que su forma humana se sienta tan apretada, tan cargada de sentimientos afilados, que decida transformarse.

Es patético que al final, después de trotar sin rumbo por su apartamento y no conseguir ponerse cómodo en el sofá, se acurruque a los pies de su cama, cubriendo su nariz con su cola, cerrando los ojos, tratando de no pensar que ese es el lado de la cama de Stiles.

Pasan tres semanas más antes de que Derek vuelva a ver a Stiles.

Sucede cuando menos se lo espera. Está tomando un café. Había entrado a un Starbucks que hay a la vuelta de la esquina de su oficina y está esperando en la fila, dando golpecitos con el pie contra el piso, observando como el barista toma los pedidos, dejando que su mirada vague alrededor del local y de repente, allí está, en el extremo de la barra de la cafetería, está…

Stiles. Es Stiles.

Con cada día que pasaba, Stiles parecía no sólo más lejano sino también, extrañamente, como si nunca hubiera existido. Como si Derek lo hubiera inventado, que él se lo hubiera inventado, como si hubiera soñado esos grandes ojos y esa delicada mandíbula. Lo sobresalta ver a Stiles así, materializado una vez más, no producto de la imaginación masoquista de Derek; real al fin y al cabo, haciendo algo tan mundano como esperar por un café mientras lleva una sudadera con capucha desteñida, de un color indeterminado, de una talla muy grande para Stiles, con las mangas cayéndole por encima de las manos.

A Derek le empieza a doler el pecho.

También parece estarse moviendo. Derek se sale de la fila, abriéndose paso entre a través del gentío de Starkbucks, murmurando disculpas aquí y allá. Stiles recibe su bebida; cogiéndola con ambas manos, acunándola con las palmas, alejándose de la barra, con la cabeza agachada. Derek se detiene con el corazón en la mano.

Stiles no deja de moverse. Camina directamente hacía Derek, el vaso de café se abre de golpe y una ola de café y crema y dios sabe qué más, se derrama por la parte delantera del traje de Derek. Hay unos pequeños jadeos y despues breve momento de silencio, un poco en shock y un poco divertido antes de que el ruido de la hora pico del café vuelva a inundar el lugar. La gente se queda boquiabierta y Stiles…

Stiles ni siquiera levanta la mirada, sólo dice "Joder, joder, lo siento." Y trata de empujar a Derek.

"Stiles," dice Derek, incrédulo, Stiles levanta la cabeza. Tiene los ojos desorbitados y las mejillas manchadas.

"Derek," Dice, luego, con la voz apretada, con pánico. "No puedo—No puedo lidiar con esta mierda justo ahora, yo," Y empuja a Derek para pasar.

A Derek le pitan los oídos. "Stiles" dice, agarrando la muñeca de Stiles pero él aleja la mano de un manotazo. "No me toques." Y sus ojos se humedecen y Derek no sabe qué hacer, así que se limita a seguir a Stiles entre la multitud de gente, gente que susurra, gente que los mira.

Afuera, por fin Stiles deja de moverse. Se recuesta contra la pared de ladrillos y se cubre la cara con las manos. Su respiración es agitada, su pecho sube y baja entrecortadamente. Su corazón late más rápido de lo que Derek hubiera escuchado antes y no sabe qué hacer. "¿Hay algo que pueda hacer?" Pregunta.

"No me toques," Dice Stiles a través de sus manos. "No me hables. Pero, no te vayas," Añade. "Sólo… Sólo dame un segundo, ¿vale?"

Derek espera. Se limpia la mancha de café del pecho con la manga. El traje está arruinado, pero la piel quemada ya estaba como nueva. Sólo le queda un pequeño dolor de recuerdo. Derek se frota el pecho y mira a Stiles, quien sigue parado con su espalda presionada contra la pared y sus manos ocultando su cara, tratando de recuperar el aliento. Derek intenta no concentrarse en el inconfundible olor de otro hombre lobo sobre todo el cuerpo de Stiles, cubriendo su propio olor.

"Okay," Dice Stiles después de un rato, restregándose las manos contra la cara para después bajarlas. Estaban temblando. "Ya estoy aquí. Hola"

"Hola," Dice Derek. Incluso con su sudadera con capucha desteñida y con sus mejillas manchadas y cara con una pequeña mueca de infelicidad, Stiles se ve—"Es bueno verte."

"Es bueno verte a ti también." Dice Stiles. Y su mirada va hacía la mancha de café en el pecho de Derek. "Lamento eso. Yo— Todas esas personas estaban mirando y sólo—" Su voz tembló y miro hacia otro lado.

"Está bien, yo sólo—" No sabe qué más decir. "Me alegra verte."

"También me alegra verte." Dice Stiles, dándole una pequeña sonrisa a Derek, pero luego su cara decae. "Probablemente debería irme"

"Yo también. Aunque primero déjame comparte un nuevo café."

"No creo que eso sea una buena idea."

"Pero tengo puesto el tuyo." Protesta Derek.

Stiles agita su cabeza a ambos lados. "Estoy en un contrato de exclusividad," dice. "Ni siquiera debería de estar hablando contigo." Mira otra vez hacia otro lado. Sus manos ya habían parado de temblar.

A Derek se le hunde el estómago. "Sólo es un café. ¿Estar en contrato de exclusividad significa que no puedes aceptar café de…" Se corta, ni siquiera sabe que iba a decir. ¿un amigo? ¿otro cliente? Se da cuenta de que se niega a pensar en un antiguo cliente.

Stiles se ríe desoladamente. "En este caso sí," dice y se aleja de la pared. "Lamento haber arruinado tu traje." Y empieza a alejarse de Derek.

"Stiles," dice Derek, y cuando Stiles no se detiene, le dice. "Por favor, Stiles."

Stiles deja de moverse, mirando sobre su hombro.

"¿Estás en problemas? Porque si lo estás, yo podría… hay opciones…"

"No estoy en problemas," le dice Stiles sin ninguna emoción en su voz. "Dejalo ir, Derek."

Y se queda ahí, viendo a Stiles alejándose con cada paso que da. Derek piensa que sonaba mucho a un déjame ir.

La única razón por la que Derek acepta el plan de Erica es por el aspecto de Stiles. Incluso antes de entrar en pánico, Stiles se veía pálido, cansado y su voz había sonado… Había sonado apático, resignado. No había sonado como él mismo en absoluto. Su corazón no había saltado cuando dijo que no estaba en problemas, pero Derek sabe que Stiles es un experto en omitir toda la verdad de las cosas cuando quería. La única razón por la que Derek acepta es porque sólo piensa en el bienestar de Stiles.

"Más vale prevenir que curar," Dice Erica viendo a Derek, como si le leyera la mente. "Y ya conoces a Danny, él es muy discreto. Cualquier cosa que encuentre se va a quedar entre nosotros tres."

"De todas formas se siente mal." Dice Derek. "Meterse en la vida de alguien más sin su permiso o conocimiento."

"Te sentirás mucho mejor una vez lo salvemos de las garras de una pandilla de traficantes humanos. O traficantes de drogas. O de asesinos en serie." Dice Erica, haciendo una mueca cuando Derek la mira. "¿Qué? Sabes perfectamente que son cosas que pasan."

"Lo sé. Gracias por recordármelo."

"Bueno, yo—" Empieza a decir Erica, pero se detiene una vez Danny entra en la sala de conferencias y lo mira. "¿Y?"

"Y, encontré mucha información," dice Danny, dejando una pila de papeles y sobres de manila sobre la mesa. "Tienes un amigo interesante."

Derek quiere decir No es mi amigo, pero alcanza a ver una foto en blanco y negro de un Stiles mucho más joven, abrazando orgullosamente a un hombre que parece ser su padre. Derek se inclina sobre los documentos.

"Si, es una historia bastante trágica," Dice Danny, golpeando la foto. Derek nota que es de un artículo de prensa, el titular lo menciona como el Sheriff Stilinski. "La madre murió de una enfermedad cerebral cuando él tenía ocho años, al padre le dispararon en el trabajo y estuvo en coma un par de años antes de que lo apagaran. No imprimí las facturas del hospital, porque incluso el mero hecho de mirarlas me marcó de por vida. Puedo enviártelas por correo si las quieras."

Derek no responde. Le pitan los oídos, pero no es el hombre de la imagen lo que está viendo en su mente.

"¿Quieres parar?" Pregunta Erica tocando su muñeca. "Podemos—"

"No. Danny, ¿Cuándo pasó todo esto? ¿Tienes una línea de tiempo?"

"El papa murió cuando él tenía unos cuantos años en la universidad," Dice Danny, hojeando los papeles." Espera, déjame revisar."

Erica parpadea ante el trozo de papel que tiene en sus manos. "Se especializó en Justicia Criminal e hizo otra especialización en Estudios de Licantropía," dice. "Eso es interesante." Agarra otro documento. "Hey, he escuchado de este blog. ¿Lo maneja él?"

"Si, es un escritor bastante bueno," dice Danny. "también tiene mucho tráfico mensual. Es bastante impresionante. Pero esa no es la parte más interesante—lo encontré." Coge uno de los sobres de manila. "Okay, me encontré con un archivo encriptado del FBI. Sólo tengo que decir que ya no está encriptado."

"Jesús," Dice Erica. "¿Qué? Derek, ¿te has estado follando a una persona infiltrada…?"

"No es algo como eso," Dice Danny. "la verdad es algo muy triste. Consiguió una oferta de un trabajo condicionada para cuando terminara la Universidad, pero la retiraron por su implicación en actividades ilegales. Parece que todo fue muy secreto, sólo hay un agente que firmó el caso."

Erica asiente lentamente. "Bueno, Okay. Padre policía, se especializó en Justicia Criminal. ¿Qué estamos pensando? Al papa le disparan, las facturas del hospital se acumulan, empieza a hacer algunas vueltas para conseguir dinero y lo descubre su futuro jefe, quien por alguna razón no lo mete a la cárcel. El papá muere y de repente es un orfanato con unas facturas de hospital por las nubes y los préstamos estudiantiles y un título inútil pero un trabajo lucrativo como gigoló?"

"Eso es lo que reuní, sí." Dice Danny.

Derek se siente enfermo. "¿Encontraste algo que sea más reciente? ¿Algo en lo que esté metido ahora mismo?"

"No exactamente," Dice Danny. "Pero encontré esto." Desliza un articulo en dirección a Derek. "Estuvo involucrado en el negocio de porno de Deucalion hace unos cuantos años."

"Estás bromeando." Dice Derek.

La madre de Derek siempre había llamado a Deucalión; despiadado, poderoso, pero poco querido, excepto por aquellos tan insensibles como él. Hace aproximadamente una década, hizo retroceder el movimiento de los derechos de los hombres lobo durante años al intentar incitar a los hombres lobo a tomar el poder— algo inevitable, a los ojos de Deucalión, un acontecimiento que debía de ocurrir y cuanto antes mejor. En estos días, operaba principalmente al margen de la sociedad, aferrándose a las viejas costumbres. Habían sido años desde la ultima vez que Derek había escuchado su nombre.

"Pues, Joder," Dice Erica. "Eso es— Jodido."

Derek mira fijamente al trozo de papel. Vagamente recuerda una conversación con Stiles; recuerda vagamente el calor de la mejilla de Stiles contra su pecho, recuerda a Stiles diciendo que se alegraba de estar haciendo lo que hacía ahora, dirigiendo su propio negocio, haciendo sus propias decisiones. No tenía sentido que Stiles volviera al porno.

Al menos no voluntariamente.

"Okay," dice Erica. "¿Entonces? ¿Cómo procedemos desde aquí?"

Derek sacude la cabeza. Su voz suena vacía cuando dice, "No tengo ni idea."

La respuesta llegó caminando al edificio de su empresa tres días después.

"Derek," Dijo Erica desde la puerta de su despacho, "Tienes una visita."

Es Stiles. Es Stiles con las manos en los bolsillos delanteros de la misma sudadera con capucha que llevaba cuando Derek se lo encontró en el Starbucks. Erica le da una breve sonrisa de ánimo antes de cerrar la puerta.

"Hey," dice Stiles, mirando hacía la puerta cerrada y luego a Derek. " Siento haber venido hasta acá, yo sólo— supongo que estas paredes son insonorizadas y toda esa mierda, ¿verdad?"

"Si. Tenemos todas las precauciones necesarias."

Derek tiene que obligarse a mantenerse sentado, a no ceder al impulso primario de ponerse de pie y tocar a Stiles y marcarlo con su olor y llevarlo a casa y prepararle un baño y darle comida y envolverlo en suaves prendas de abrigo. Eres un puto romántico, diría Cora.

Puede que sea solo la imaginación de Derek, pero Stiles se veía más pálido que la ultima vez. Tenía ojeras. Pero también tiene una mirada sombría llena de determinación que Derek nunca había visto en Stiles.

"No te mentí," Dice Stiles. "no estoy en problemas." Su mirada revolotea por la habitación, deteniéndose en el sofá contra la pared del fondo, pero no se sienta, sigue parado cerca a la puerta. "Pero, quizás tú podrías estarlo."

Derek frunce el ceño y espera a que continúe.

Stiles respira profundamente. "Probablemente has escuchado hablar de la manada de Deucalion."

A Derek se le enfría el estómago, incluso aunque la investigación de Danny ya los había llevado por esa misma conclusión. Asiente con la cabeza.

"¿Has hecho negocios con el tipo?"

Derek niega con la cabeza.

"Okay, entonces este es mi concejo: No lo hagas." Dice Stiles, sonriendo irónicamente. "Él es una puta serpiente y no puedes confiar en él. Prométeme que si alguna vez se acerca a ti por algo, no creerás ninguna palabra de lo que te diga."

"Deucalion es tu contrato exclusivo." Dice Derek.

Stiles asiente con la cabeza.

"¿Él te lastima?" Preguntó Derek, concentrándose para que no le tiemble la voz. Se agarra al borde del escritorio para apoyarse. "¿te obliga a—"

Stiles suelta una risa sin alegría, sacudiendo la cabeza. "No, no es algo así. En realidad, es todo lo contrario. No me obliga a hacer nada. Sólo me compra regalos y ropa cara y me lleva a cenar y a fiestas para hacerme desfilar." Deja salir la misma carcajada de antes. "Es más que todo sobre poder y estatus que cualquier otra cosa. Cuando Deucalión ve algo que quiere, lo consigue. Así son las cosas."

"Y ahora te quiere a ti."

"Y ahora me quiere de vuelta," lo corrige Stiles. "ya había trabajado para él antes. Hace algunos años, cuando—" se corta mirando hacia el suelo. "De todas formas, eso no importa. Para empezar nunca le gustó que me fuera. Ha querido que volviera durante años y ahora me tiene. Yo sólo quería advertirte. No confíes en el ¿vale?" Se vuelve hacia la puerta.

"Así que te quedas," Dice Derek. "Te vas a quedar con él."

"Si, tengo que hacerlo."

"No, no es cierto."

"En serio, tengo que hacerlo."

"Stiles," Dice Derek. "No deberías— si todo esto es sólo por el dinero—"

Stiles se gira de nuevo. "Por supuesto que no es por el dinero. Nada de esto es por el dinero, Derek, por dios, ¿siquiera— Podría vivir sólo de tu dinero. Dejé de aceptar nuevos clientes después de que conocerte, ¿okay? Conocerte fue una de las mejores mierdas que me han pasado en mucho tiempo. Me hiciste sentir como si tuviera una oportunidad de salir de todo esto. Me hiciste querer dejar todo esto."

El pulso de Derek late en sus oídos. "Pero pensé…"

"¿Qué? ¿Pensabas que todos mis clientes me trataban como tú? Mierda, tal vez incluso hasta pensaste que yo trato a todos mis clientes de la forma en la que te trataba a ti. ¿Crees que me quedo cuatro horas y les cobro sólo la mitad porque pasamos las otras dos horas comiendo sushi y hablando y yo ni siquiera quiero cobrar porque me parecía mal? Por Dios, Derek. ¿Realmente piensas que todos somos igual de buenos que tú?"

"Pero—"

"¿Pero qué? ¿Sólo porque tengo una página web bonita y cobro un montón de dinero y me llamo a mí mismo gigoló más que un puto crees que tengo mejor clientela? Me follo a la gente por dinero, Derek," Le grita Stiles. "El tipo de personas que pagan por dinero no son exactamente como tú."

"Entonces no sigas haciéndolo, renuncia, no lo hagas, abandona a Deucalion, ¿por qué—"

"Porque le dije que no tenía nada contra mí," Dice Stiles en una voz mucho más suave. "Le recordé que no tenía nada para perder. Lo cual fue cierto por mucho tiempo. Pero entonces él me recordó que ahora sí tengo algo qué perder."

Es demasiada información para procesar de una vez; la mente de Derek se siente lenta. Se demora un poco para entender las implicaciones de Stiles. Cuando por fin lo hace, Derek siente como su corazón se hincha y al mismo tiempo se quiebra. Es un sentimiento bizarro.

"Me está usando para conseguirte." Dice Derek.

Stiles asiente. "Me prometió que no intentaría nada divertido y le creo, por ahora, pero quería que lo supieras. Quería que fueras cuidadoso. Me recordó que, a diferencia de mí, tú tienes mucho que perder, junto a toda tu especie. Intenté recordarle que ustedes eran de la misma especie, pero debí de saber que a él le importa un carajo. Duke nunca se ha preocupado por nadie que no sea él mismo."

"Stiles," Dice Derek. "Quiero ayudar. Déjame ayudar."

"Vine aquí para advertirte. No vine buscando tu ayuda."

"Por favor," Dice Derek. "déjame—"

"Basta," Le escupe Stiles. "No necesito que me salves, no necesito tu ayuda, no soy ningún tipo de damisela en apuros que encontraste en la vuelta de la esquina—"

"No te veo de esa forma, para nada. ¿Por qué—"

Stiles se deja caer contra el sofá, con las manos en la cara. Derek podía escuchar su corazón acelerándose. Recuerda las instrucciones que le dio Stiles cuando estaban parados fuera del Starkbucks— No me toques. No me hables. Pero no te vayas. Derek no se mueve y no dice nada.

"Me voy ahora," Dice Stiles cuando su ritmo cardiaco se calma un poco. "No intentes detenerme."

"Okay," dice Derek suavemente viendo a Stiles irse.

Entonces, pulsa el botón de su teléfono de mesa. "Erica."

"¿Si?"

"¿Escuchaste todo eso? Porque estoy asumiendo que lo hiciste."

"Vamos a hacer algo al respecto, ¿cierto?" Dice Erica a modo de respuesta. "Básicamente acabó de declarar su amor por ti, no podemos dejar que ese asqueroso lo tenga, tienes que—"

"Por supuesto que vamos a hacer algo al respecto," Dice Derek. "Pero te necesito conmigo."

"Por supuesto que estoy—"

"Quiero decir, necesito que estés ahí como uno de los miembros de mi manada cuando me enfrente a Deucalion," Dice Derek y espera a que Erica entienda por completo todo lo que le está diciendo.

"Oh dios, vas a desafiarlo," Dice Erica lentamente, con reverencia. "¿En serio? ¿Vas a involucrar la ley de manada en esto? ¿Vas a intentar desterrarlo? Derek—"

"Sé lo que estoy haciendo," Dice Derek. "Esta es la mejor forma de enfrentarlo. Confía en mí."

Los años no han sido benévolos con Deucalion. Se ve peor de lo que Derek recuerda, su piel es más áspera, su rostro más afilado y anguloso.

Sin embargo, sigue hablando con citas dramáticas de películas.

"Considérame encantado, Derek," Dice Deucalion con altivez. "Ha pasado bastante tiempo desde la última vez que me llamaron a un claro del bosque por el líder de otra manada. Muy pintoresco. Se parece mucho a los viejos tiempos que tus padres ayudaron a erradicar aliando fuerzas con los humanos, en lugar de permitir que nuestra especie siguiera fortaleciéndose en las sombras hasta que llegara el momento de atacar."

Detrás de él, un beta de Deucalion de cabello oscuro gruñe. Erica reacciona con un gruñido bajo.

"Me alegra que también hayas traído un miembro de tu manada," Dice Derek, ignorando el discurso de Deucalion. "Eso acelerará el proceso considerablemente."

"Ahora sí," Dice Deucalion divertido. "¿Debo de tomar esto como que no estás aquí sólo para amenazarme, para convencerme de que deje al humano fuera de su contrato? Tengo que admitir, Derek, que su lealtad hacia ti me impresionó. También hizo que recuperar lo que es mío fuera mucho más fácil. Supongo que debo de agradecerte por eso."

"No estoy aquí para razonar contigo," Dice Derek, sintiendo sus garras clavándose en las palmas de sus manos. Abre la mano para mostrarlas abiertamente. "Estoy aquí para desafiarte."

Puede oír el efecto que tienen sus palabras en Deucalion, oír el aumento de su presión sanguínea, el incremento de sus latidos. Deucalion muestra sus dientes en una fría sonrisa. Detrás de él, su beta hace lo mismo.

"En serio," Dice Deucalion en un tono de voz bajo y burlón. "Serías tan tonto como para desafiarme a mí, uno de los alfas más poderoso en este estado, a una disputa territorial por la propiedad de un humano. Una perra humana."

Derek deja que sus ojos brillen. "Sería una tontería aceptar un reto del heredero de Talia Hale, en lugar de huir con la cola entre las patas ahora que aún puedes."

"Talia Hale," dice Deucalion en voz baja "Pero, por supuesto, ese nombre no significa mucho en estos días. No después del… desafortunado fallecimiento de tus padres. La caída de la que alguna vez fue una gran familia."

Derek gruñe. Deucalion sonríe otra vez.

"Acepto tu desafío, Derek Hale." Dice mostrando sus propias garras y sus ojos brillando de un rojo sanguíneo. "Si tu deseo es morir por un humano, entonces que así sea."

"En realidad estaba pensando en el destierro. No necesariamente una lucha a muerte," Dice Derek. "Pero si prefieres morir a reubicar tu manada…"

La cara de Deucalion se retuerce. "Todavía puedes echarte hacia atrás, sabes." Dice mientras se hace más alto, su voz áspera, su piel volviéndose de un tono gris enfermizo. "No hay que avergonzarse por cambiar de opinión."

"Cállate" Dice Derek y lo ataca, transformándose a mitad de un salto.

"Nunca me dijiste que podías convertirte en un lobo de verdad" Dice Stiles con los ojos muy abiertos, cuando Derek se despierta. "Esto es la mierda más enferma que de la historia."

Está acariciándole la cabeza a Derek. Se siente bien, reconfortante. Derek vuelve a cerrar los ojos. Cree que está en su hogar; huele como a hogar. Como a casa y a manada y a Stiles.

"Él puede escucharme, ¿cierto?" Le dice Stiles a alguien más. "Cuando está así, o—"

"Por supuesto que te puede escuchar," esa es la voz de Erica. "Sigue siendo él. Sólo que en su forma completa de lobo."

"Ni siquiera sabía que algo así era, científicamente posible," Dice Stiles. "¿Cómo—"

"Él es especial," Dice Erica, con orgullo apenas disimulado en su voz. "Es increíblemente raro. La habilidad corre en su familia, pero no se transmite automáticamente a la siguiente generación. Al contrario, tienes que ganártelo. Su tío perdió la cabeza y se dedicó a asesinar de forma autodestructiva después de intentar forzar la transformación completa."

Stiles sigue acariciando la cabeza de Derek con ambas manos, moviéndolas hasta su hocico. Derek se estira, deleitándose con la sensación. Stiles tira suavemente una de sus orejas. "¿Cuándo se va a volver a convertir? O está atrapado de esta forma—"

"Dios mío. No eres exactamente la herramienta más afilada del cobertizo, ¿Verdad? Uno creería que Derek arriesgaría su vida y el destino de nuestra manada, de nuestra compañía y por asociación, de todo el movimiento de los derechos de los hombres lobos," dice Erica con tono de broma y Derek hace una mueca de dolor. "Por alguien un poco más perspicaz. Por supuesto que no está estancado en esa forma. Sabe perfectamente lo que hace. Es más fácil para él dejar que esta forma se cure por completo antes de volver a cambiar, de lo contrario el proceso de curación sería más largo. Recibió un golpe bastante serio allí."

"Erica me dijo que casi le arrancas la garganta a Duke," le dice Stiles a Derek. Hay un tono de asombro en su voz. Derek se infla un poco de orgullo. "En parte deseo que lo hubieras hecho."

"Excepto que en parte no lo deseas," Dice Erica. "porque ese es el punto en el que la ley de los hombres lobo se une con la ley oficial y tu amante aquí se había comprado un tiquete de ida a la cárcel de hombres lobos. Pero Deucalion y sus amigos están extraoficialmente, mágicamente desterrados de este estado. Nuestro emisario está actualizando las fronteras de la manada mientras hablamos. Ninguno de los que llevan el aroma de Deucalion será capaz de pasar la frontera, y tu estarás a salvo de él donde quiera que vayas siempre y cuando lleves nuestro aroma o nuestro símbolo."

"No entendí ni la mitad de las palabras que acabas de decir, pero destierro y a salvo suena lo suficientemente bueno para mí." Dice Stiles. Pasa sus dedos entre el pelaje de la nuca de Derek, apoyando su cabeza contra la de Derek. "Gracias, grandote." Murmura contra la piel de Derek y Derek hace un sonido, agitando su cola contra la pierna de Stiles.

Derek espera a que Stiles salga de la habitación (alza las orejas, escuchando a Stiles pasearse por la sala y acostarse en el sofá con el iPad de Derek) antes de que transformarse de vuelta. Su forma humana se siente tan tensa y magullada como su forma de lobo. Le duelen todos los músculos. Se arrastra hasta el baño y se da una larga ducha, sacándose su sangre y la sangre de Deucalion de su piel y de su cabello.

Cuando regresa a su habitación, Stiles está sentado en su cama.

"Hola" Dice Derek.

"Hola," Dice Stiles. "Erica fue a hablar con algunas personas cuyos nombres ya olvidé. Probablemente otros miembros de tu manda. Me hizo prometer que te vigilaría." Le sonríe a Derek. "También me dijo que amaba mi blog y que ella sólo estaba diciendo todas esas cosas de las herramientas y todo eso para hacerte sentir mal. Creo que le agrado."

"Bien" Dice Derek. Absorbe la imagen de Stiles— su boca, su cara, su cabello alborotado. Se embriaga en el hecho de que Stiles está sentado en su cama. No se había atrevido a soñar con que eso volviera a pasar.

Stiles debe de haber malinterpretado la taciturnidad de Derek porque dice: "Podría— espero que esté bien que esté aquí."

"Por supuesto," dice Derek. "Por supuesto que está bien." Se detiene dándose cuenta de que tal vez— "Erica te explicó todo, ¿cierto? ¿Ella si te dijo que no tienes que quedarte con nosotros?" Le pregunta. "No tienes— Nuestra protección se mantiene incluso cuando no…" Cuando no estés conmigo. No lo quiere decir, pero quiere que Stiles sepa que es libre de irse, libre de elegir.

"Lo sé," dice Stiles. "Ella me lo dijo." Se pone de pie y empieza a caminar en hacía Derek. "Quería quedarme," dice en voz baja. "Nadie había llegado a luchar por mí, ¿lo sabías? En realidad, eres algo, señor Hale."

Ahora está de pie enfrente de Derek. "¿Puedo?" pregunta, tocando la toalla que rodea la cadera de Derek y éste asiente a modo de afirmación, embriagándose con el aroma de Stiles, la inclinación de su barbilla, la longitud de sus pestañas, el hecho de que está ahí, con él.

"Bien," respira Stiles, y entonces la toalla desaparece y sus cálidas manos están sobre la piel de Derek y se están besando, y es frenético— más frenético que nunca, o eso le parece a Derek. Tal vez sólo lo parezca porque ha pasado mucho tiempo desde la última vez que hicieron esto. Stiles hace un pequeño ruido cuando Derek rodea su cintura con sus brazos y lo acerca, alineando el cuerpo de Stiles totalmente vestido con el suyo completamente desnudo.

"Te extrañé." Murmura Stiles contra la boca de Derek y esas dos palabras son mejor que todas las cosas que hubiera dicho en la oficina de Derek— mejor que conocerte fue una de las mejores putas cosas que me han pasado en mucho tiempo y que me hiciste desear dejar esta vida atrás y ahora sí tengo algo que perder. Es simple, concreto, honesto y hace temblar a Derek con lo mucho que él también había extrañado a Stiles, lo mucho que también había extrañado esto.

Sabe que no sería capaz de expresarlo en palabras, así que, en lugar de eso, aprieta a Stiles hacia atrás y hacia abajo en la cama, subiéndose encima de él, besando su nariz, su mandíbula, su cuello. Los ojos de Stiles están oscuros, tiene una mano alrededor de la nuca de Derek y la otra deslizándose por la espalda de Derek, llegando hasta los hoyuelos arriba de sus nalgas.

"¿Estás lo suficientemente sano para hacer esto?" Pregunta Stiles en voz baja, y Derek le responde la pregunta desabotonándole el pantalón a Stiles con un dedo. Stiles se ríe, levantando sus caderas, permitiendo que Derek se deshagan de ellos. Se quitó su camisa y el resto de ropa, quedándose desnudos, desnudos y hambrientos, tocándose por todas partes. La mano de Stiles encuentra la polla de Derek y la mano de Derek encuentra la polla de Stiles, y hasta ahí llegan— se masturban entre ellos, riéndose sin parar contra la boca del otro y ahogando jadeos en las curvas del cuello del otro.

Tan pronto como la ola del orgasmo se empieza a alejar, el peso de sus adoloridos músculos y la fatiga vuelve a inundar al cuerpo de Derek otra vez. Están acostados uno al lado del otro; los dedos de Stiles acariciando el cabello de la nuca de Derek y Derek se concentra en esa sensación, tratando de resistirse a los brazos de Morfeo. La combinación de sus adoloridos músculos con el calor del cuerpo de Stiles al lado de él se lo pone un poco difícil, quiere mantenerse despierto, quiere seguir mirando la cara de Stiles, quiere seguir sintiendo su tacto, quiere seguir recordando que esto es real.

Cuando Derek vuelve a abrir los ojos, Stiles está de pie junto a la cama, completamente vestido y dándole vueltas a su celular entre sus manos.

Derek parpadea un par de veces antes de apoyarse en uno de sus codos. Y trata de taparse con las sabanas colocándolas alrededor de su cintura. Dice con voz áspera: "Te vas."

Stiles se tensa y lo mira. "No lo sé, no quiero. Pero lo estaba considerando, sí."

El estómago de Derek se hace un ovillo. "Por supuesto que te puedes ir. No vamos a retirar nuestra protección, incluso si nunca vuelves a hablar con ninguno de nosotros, podemos—"

Cuando Derek levanta la mirada y se topa con los ojos brillantes de Stiles.

"No quiero dejar de hablarte otra vez," Dice Stiles miserablemente. "Pero es…" Mira al suelo, pasando saliva.

Derek espera.

"Yo no sé cómo hacer nada de esto," Dice Stiles, sentándose en el borde del colchón. El corazón de Derek se estremece con esperanza. "me metí en el negocio cuando tenía diecinueve años, nunca he hecho…esto." Dice gesticulando en el espacio entre ellos dos. "No sé cómo hacer esto. Sólo sé follar, sé cómo… pero no sé cómo…" Sacude la cabeza. "Te enfrentaste con alguien por mí, Derek. Yo no…"

"Mi novia del colegio murió." Dijo Derek, y Stiles lo mira sin parpadear. "Yo…Ella había sido atacada por un hombre lobo salvaje y me pidió qué…"

Stiles sigue mirándolo con ojos grandes.

"Eso es lo que significa el color de mis ojos. Eso es lo que significa el azul. El azul marca a un hombre lobo que ha tomado la vida de una persona inocente."

Las palabras pesan en su lengua. Stiles se mueve como si lo fuera a tocar, pero se detiene a mitad del camino. En cambio, pone sus manos en su regazo entrelazando sus dedos.

"Y probablemente sabes que la mayoría de mi familia murió en un incendio," Dice Derek. Se le cierra la garganta como cada vez que intenta hablar de esto, pero continua a pesar de todo, quiere que Stiles sepa— Necesita que Stiles lo sepa. "Pero la parte que probablemente no sabes es que ellos fueron asesinados por una mujer a la que creí amar en ese momento. Que me utilizó para acercarse a ellos, lo suficiente como para matarlos y después, proclamar que ella le había hecho un favor a la humanidad." Se aclara la garganta. "Esa fue mi segunda novia. Después salí con alguien más y tampoco funcionó, y después dejé de salir por mucho tiempo y después me enamoré de—"

"—de un prostituto." Interrumpe Stiles.

"Si." Dice Derek. "Entonces me enamoré de ti."

Stiles mira al suelo, sin decir nada.

"Entonces yo… sólo digo que tampoco es como que tenga mucha experiencia en esto."

Stiles asiente, lentamente. "Okay, si, okay."

"Lo que estoy tratando de decir es," Dice Derek. "Si queremos hacer esto…"

"Podríamos iniciar con calma." Dice Stiles.

"Si, exactamente."

"Quizás podamos iniciar poco a poco, por ejemplo, empezar por una cita."

"Si," Dice Derek. "eso es lo que estaba pensando. Si tú quieres."

"Si," Dice Stiles con una pequeña sonrisa. "Si, creo que me gustaría."

"Okay, entonces."

"Entonces." Repite Stiles, con una sonrisa.

"¿Te gustaría tener una cita conmigo alguna vez?"

Stiles le sonríe. "Claro, de hecho, creo que podría estar libre el viernes en la noche."

"Bien. Entonces es una cita."

"Si," Dice Stiles. "Es una cita."