Disclaimer: Jareth, Sarah, el Laberinto y cualquier personaje y lugares correspondientes, pertenecen a Jim Henson Productions. Cualquier personaje que no sea inherente al Laberinto me pertenece, a menos que sea establecido de otra manera. Esta historia contiene datos históricos, y asimismo varios ficticios. No usaré nombres históricos reales y cualquier similitud entre mis personajes y personas reales vivas o muertas es sólo coincidencia.

Nota del Autor (en la versión original): Gracias especiales a mi beta Scattered Logic, por sus habilidades de redacción, por sus pensamientos y sugerencias, y por las horas que consumió hablando conmigo.

"CONSECUENCIAS INESPERADAS"

Escrito por Corrie "Cormak" McDermott Oct., 2002.

Traducción realizada por: BlazeVein. Con consentimiento del autor.

El original, escrito en inglés se titula "Unexpected Consequences" , y se encuentra en ffnet bajo el penname de Cormak3032, y en el homepage de la autora que aparece en su bio.

(Nota del Traductor: Dejaré "Goblin" tal cual, porque lo más cercano es Gnomo y no me gusta).

Resumen: En un tiempo y lugar que no es el suyo, dos enemigos se esfuerzan por sobrevivir y descubren a lo largo del camino mucho más de lo que habían estimado...

Capítulo 1: "Un voto de venganza".

El búho de granero regresó al Laberinto desde el Mundo Superior y se sumergió a través del cielo ennegrecido en dirección a lo que quedaba del castillo más allá de Ciudad de los Goblins. Él intentó aterrizar graciosamente sobre la piedra rota que conformó una vez una gran sala con escaleras que conducían en todas direcciones, pero su aterrizaje resultó muy distante de ser elegante.

El búho se estrelló en el duro piso de piedra, regresando a su forma humanoide en el momento en que impactó su cuerpo. El hombre que apareció en ese lugar se quedó muy quieto por un momento. Él se levantó tembloroso, con su cuerpo dolorido por el contacto brutal con la piedra. Una magulladura oscura se formaba en un lado de su rostro.

Él hizo una mueca, sin comprender por qué podía sentir dolor físico. Retorció sus manos, intentando formar una esfera de cristal, pero nada apareció en la punta de sus dedos. Lo intentó varias veces antes de maldecir ruidosamente en Goblin. Pasó una mano enguantada de negro por su cabello rubio y salvaje, y vaciló en el borde de la sala rota.

Sus ojos irregulares se ensancharon al notar la vista frente a ellos. El castillo no era la única cosa que había sido dañada. Las murallas exteriores del Laberinto estaban en parte derrumbadas; los árboles en el Bosque de Firey y los setos justo antes que ellos, estaban marchitándose y muriendo. El Laberinto completo había cambiado. Podía ver cosas en lugares que no pertenecían. Era como si la magia que protegía y que mantenía unido al Laberinto hubiese desaparecido.

Comprendiendo repentinamente, él tragó saliva y miró hacia abajo a sus manos enguantadas. Él había sido incapaz de producir una esfera. Eso nunca había sucedido antes. La preocupación rezumó en él ante la comprensión sobrecogedora de que él ya no poseía más ninguna magia, lo cual significaba que no tenía poder para controlar el Laberinto. Y, asimismo, era impotente para prevenir su decadencia.

Sus cejas descendieron y sus ojos se llenaron de ira. En unos momentos, la preocupación lo abandonó y estaba hirviendo totalmente de rabia.

'No tienes poder sobre mi...'

Oyendo el eco de una voz, él giró alrededor. Al no ver a nadie allí, se dio cuenta de que la voz había hablado en su mente. Ella había causado esto. Ella lo había derrotado, y arruinado su reino. Él tomó profundas inspiraciones desiguales de aire y sus ojos se estrecharon. Apretó los puños, y por un momento él se olvidó del dolor en que se encontraba.

"Tu pagarás por lo que has hecho, Sarah¡y lo pagarás muy pronto!" -

continuará….