4Auror: ¡ Alto ahí en nombre de la Warner BROS !
GabyKinomoto: ¡ Soy inocente, todo el mundo sabe que la saga de Harry Potter pertenece a Rowling y demas! A mi solo me pertenece el trama de la historia y algunos personajes salidos de mi imaginación T.T aah, y esto es Slash
Auror: ¿ y eso, que es?
gabyKinomoto: atracción entre personas del mismo sexo, en este caso DracoHarry
Prologo
La nieve caía pacíficamente sobre los edificios, los cuales estaban adornados con lucecitas que alumbraban y les daban un toque de elegancia, la gente iba y venia, ya fuera cargando unos cuantos bolsos, o con un carro repleto de bolsas, las cuales seguramente contendrían presentes para seres queridos; una bella joven pelirroja, abrigaba como mejor podía a un pequeño bulto que tenia en sus brazos.
"Apúrate James, nos queda una hora y media", la voz de la joven sonó ahogada, al mismo tiempo que de su boca salía un espeso vapor.
"Espérame Lily"
Un apuesto joven vestido de manera extravagante, caminaba tambaleándose de un lado a otro, mientras hacía malabares para que no se le cayera ningún paquete de todos los que tenía encima. Los ojos increíblemente verdes de Lily los miraron fijamente, y por lo que el joven pudo descifrar en ellos, supo que Lily estaba enfadada.
"Necesito darle leche a Harry, James" siseo enfadada la pelirroja "No puedo hacerlo acá porque me congelaría sacarme alguna prenda, claro, puedo darle de beber del biberón, eso seria lo mejor, pero cierta persona, muy irresponsable, lo olvidó en la tienda de ropas" a estas alturas el rostro de Lily estaba a un par de centímetros del rostro de James.
"Lily, mi amor, tu sabes que no fue intencional…si yo pudiera hacer algo…"- murmuro ligeramente asustado James, raras eran las veces que Lily se enojaba con él"… si quieres yo puedo…"
"Basta James" lo calló Lily. Respiró un par de veces tratando de calmarse, para luego mirar a James con amor y decirle dulcemente: "Jimmy, todavía falta comprar el regalo para Albus y para Minerva, y recuerda que tiene que ser algo muy especial y único, no quiero que sea como el año pasado, cuando tu elegiste regalarle a Albus aquel reciclario en forma de pentágono, y él nos mostró 6 reciclarios de los mismos, me dio tanta vergüenza nuestra falta de originalidad" se quedó un momento callada, como pensando en algo seriamente, frunciendo ligeramente el ceño "Este año será diferente, YO elegiré los regalos para ellos y tu volverás con harry al hotel, le darás de comer, verificaras que no nos estemos olvidando nada y le mandaras una carta a mi madre, agradeciéndole nuevamente por los pasajes del avión, y le avisaras que a las Cinco en punto nuestro avión despega, ¿entendido?"
"Sí cariño, pero… no podré cargar a Harry con todo esto" James señalo con la cabeza la pila de regalos que tenía en sus brazos, tres bolas repletas en su brazo derecho, cuatro bolsas ligeramente más vacías que las otras en el brazo izquierdo, dos grandes bolsas en sus manos, y sobre estas bolsas tenia tres cajas de tamaño mediano.
Lily apretó los labios, y miró para todos lados.
"Ahí", Lily señalo el baño publico de varones "Entraras en un cubículo, y reducirás todo eso que traes encima"
-ooOOOooo-
El hermoso bebé fue depositado cuidadosamente un una silla alta especial para infantes, James salió de la cocina y se dirigió a la habitación, donde sacó unos cubitos de su bolsillo derecho y los depositó en la cama. Luego se alejó un poco, sacó una varita de su bolsillo trasero y apuntó a los cubitos.
"Engorgio"- su voz sonó firme y segura.
Inmediatamente la cama estuvo repleta de regalos y James se dirigió rápidamente a la cocina, listo para alimentar a su hijo…, y a su estómago también.
-ooOOOooo-
La puerta se abrió, produciendo unos suaves sonidos, al tocar a los vidrios que colgaban del techo.
"¿James?" la melodiosa voz de la joven llego a oídos de James.
"Acá estoy, amor", la voz de James provenía de la cocina.
Lily dejo la bolsa que traía en el living, y luego se asomó a la cocina.
"¿Dónde esta Harry, James?" preguntó mirando con algo de desconfianza a James, el cual devoraba todo lo que quedaba en la heladera.
"Efta tomajdo ua pequeaa siefta", respondió James con la boca llena de lo que parecía ser ranas de chocolate y Lily rogó a los cielos para que Harry no heredara la glotonería de su padre.
"No te aconsejaría comer mucho antes de subir a un avión, James" al ver que James no le hacia caso se dirigió a la habitación a preparar a Harry para el viaje.
El bebé ya se había despertado y se entretenía haciendo burbujas con su saliva.
"Hola cosita", la voz de Lily tomó un tono infantil y gracioso "A ver, ¿listo para volver a tu casita?", levantó al bebé y lo colocó sobre una mesita acolchonada "Tus abuelos te extrañan muuucho, Harry", lo desvistió rápido y le cambio los pañales, buscó en el bolsón donde llevaba todo lo perteneciente a Harry, y sacó una fina cadena de oro "Mira, Harry", le dijo infantilmente Lily a su hijo, mientras le mostraba la cadenita. Harry levantaba sus bracitos tratando de atraparla "Este es un regalo de tus abuelos, te lo regalaron cuando naciste, aunque estoy segura que no es sólo una simple cadena de oro, debe tener algún hechizo protector o algo así, seguramente mi madre pensaba que te íbamos a perder… Me pregunto donde la habrá comprado, tal vez le pidió a Remus que la comprase por ella. Sí, seguro que es eso", colocó la fina joya en el cuello de Harry. Como le quedaba un poco grande, la hechizó para que se adaptase a su cuello "Listo Harry, sólo falta esto" sacó un gorrito de del bolsón y se lo colocó a Harry, al tiempo que este soltaba una risita y abría la boquita alegre, mientras mostraba que no tenia ningún diente todavía "¡Mi niño lindo, es hora de partir al aeropuerto!"
"Creo que tengo una indigestión" gimió James, al tiempo que se agarraba el estomago y trataba de no entrar en el avión.
"¡James! ¡Métete en el avión!¡ ¡Ahora!"
"Lily, cariño, no quiero por favor, yo me puedo aparecer no hay necesidad de que me suba al avión" murmuró bajito James a su esposa.
"Por favor, James, ¿Qué piensas que dirá mi madre si no te ve llegar con nosotros? Hazlo por nuestro hijo, por Harry" suplicó Lily a su esposo.
Y James corrió rápidamente hacia unos asientos que tenían una buena vista a la televisión.
"Rápido Lily, entra rápido, o se llenarán los mejores lugares para ver la cosa esa de ahí" señalo a la televisión.
Lily soltó una risita. James era algo ignorante del mundo muggle, pero haría todo por su hijo.
"Pero James, ya tenemos asignados nuestro asientos" rió Lily al tiempo que se sentaba en uno de los asientos que se encontraban del lado derecho. "Nos tocó el número 23, 24, 25, por suerte nos tocó a todos juntos"
James fue de mala gana a sentarse a su lado, se dejó caer en el asiento próximo a su hijo, luego levantó la cabeza y estiró el cuello, comprobando si tenía alguna posibilidad de ver la televisión. Lamentablemente no tuvo suerte, por lo que se dejó caer en las cómodas sillas haciendo un puchero infantil. El viaje iba durar una hora y media, así que Lily trató de hacer dormir a Harry. Pero este miraba fijamente los juguetes que tenía cerca.
El avión despego y pronto dejó tierra firme. Una azafata explicó por el alto parlante la manera de actuar en caso de peligro y James la remedaba graciosamente, haciendo reír a un niño del asiento de atrás.
Llevaban cerca de media hora volando y Lily miraba distraídamente por la ventana, contemplando el mar, cuando James habló otra vez.
"Lily…" murmuró bajito, llamando inmediatamente la atención de Lily "Tengo ganas de vomitar"
"Oh, James, ¡aquí no!" suplicó bajito su mujer, viendo que Harry comenzaba a cabecear de sueño.
La cara de James se tornó verde, luego azul, luego otra vez verde, al mismo tiempo de que su mejillas se inflaban y desinflaban compulsivamente. Y entonces…
"¡Iuggh!" gimió un niño de unos ocho años que estaba sentado atrás de ellos, viendo la secreción desparramada en el suelo, de un color que lo hacía parecer un chocolate mezclado con algún liquido naranja o amarillo. El sonido asqueroso que había producido James, había despertado bruscamente a Harry, quien comenzó a llorar.
El avión dio una sacudida. La gente contuvo la respiración, el incidente de James había sido rápidamente olvidado ante el pánico que ahora se creaba. Otra sacudida, una voz femenina salió de ninguna parte (según James) y comunicó:
"Por favor, conserven la calma, todo está bajo control, sólo son pequeños problemas técnicos, conserven la calma"
Del techo del avión se deslizaron unos artefactos que daban respiración artificial. Las luces se apagaron y se volvieron a encender, sólo se escucha llantos de algunos niños y bebés a bordo.
"¿Qué pasa, Lily?" preguntó asustado James.
"Problemas técnicos, a veces pasa" dijo Lily, quien parecía estar totalmente calmada, aunque su voz sonaba temerosa. Puso la respiración artificial a Harry, se puso la suya, y rodó los ojos al ver que James estaba hecho un enredo con la cuerda que sostenía los aparatos. Ayudó a James a colocárselo adecuadamente y acunó a Harry, cantándole una canción de cuna, tratando de que parase de llorar.
Todo parecía volver a la normalidad, hasta que se escucharon gritos provenientes de atrás, de la cortina roja que separaba a los pasajeros de la cabina de piloteo. James y Lily sacaron inmediatamente sus varitas. Podían sentir magia oscura proveniente de atrás de la cortina…
Y los gritos cesaron abruptamente.
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