Después de un buen rato de ausencia, aquí les dejo la continuación de esta historia.

Espero que la disfruten, y recuerde, ni Bleach ni sus personajes son míos, solo los uso con fines de entretenimiento.

Nota: La boda será como aquí en mi país natal México ^^, además ya había pensado algo bueno jeje, así que nos salimos un poco de la cultura.

Capitulo 10.- "La Boda"

En el mundo material todos se encontraban nerviosos por la tan esperada boda que seria la noticia en todo el mundo espiritual y material.

Los chicos se encontraban en un cuarto al otro lado de la mansión de los Kuchiki la cual Byakuya había comprado para esas fechas, la mansión era la más lujosa de todo Tokyo, pero para el capitán de la sexta división eso era poco de lo que se merecía Rukia.

Y las chicas en el otro extremo, todas prestándole atención a Rukia ya que se acercaba la hora tan esperada.

-¡Rukia-chan falta tu ramo! –dijo Orihime lanzando cosas al aire intentando encontrar el tan preciado ramo.

-Y falta tu velo –ahora Tatsuki se unía a su amiga en busca de los objetos.

-Ya los tengo aquí –dijo la peli-negra con una sonrisa mostrándoselos a las chicas.

-¡Te ves genial Rukia-chan! –le decía emocionada la castaña a su amiga, mientras todas las chicas la contemplaban.

Rukia ya tenía el cuerpo de una chica de 23 años al igual que la edad de Ichigo. Su cabello llegaba hasta sus hombros, llevaba el cabello suelto con una violeta cerca de su oído derecho, el vestido tenía adornos de color violeta en todos sus bordes, no tenia mangas, y llegaba a la altura de su rodilla. Llevaba poco maquillaje ya que para las demás chicas, ella no lo necesitaba.

Pasaron algunos minutos en lo que se terminaban los preparativos, el patio de la casa ya se encontraba adornado con todo lo necesario para que la boda fuera realizada.

Llego el momento que todos esperaban, Ichigo ya se encontraba en donde debía, y entonces vio llegar a todas las chicas que al parecer querían dejarle la sorpresa para el final.

Conforme se fueron dispersando las chicas la silueta de la peli-negra se acercaba cada vez más, hasta que por fin la chica apareció ante los ojos del peli-naranja.

Rukia lo miro, llevaba u traje blanco, con camisa del mismo color, y un pañuelo violeta en su saco. El peli-naranja tenía el cabello un poco mas largo y le había comenzado a salir barba, lo cual le parecía divertido a la peli-negra.

Ichigo se quedo sorprendido al ver a la peli-negra, no sabia si era por la ropa, o por el simple hecho de que era el día de su boda, pero ese día en especial le parecía perfecta, aunque siempre había sido así para el.

La chica entro y tomo la mano de su prometido, los dos sonrieron y la escena fue muy conmovedora para todos los asistentes, tanto del mundo material como espiritual.

-¡Espere capitán! –se escucho la voz de Yumichika afuera de la mansión.

-¡Ya déjame en paz, ni que fuera tan importante! –se escucho la voz de Zaraki y entonces entro, lo que veían todos era algo imposible, el capitán de la onceava división era el que iba a oficiar la misa.

-¿Za-zaraki? –pregunto algo consternado el peli-naranja al verlo así.

-Te informo que tengo mi zampakuto a la mano, así que no digas alguna estupidez si quieres que la misa termine contigo vivo. –le dijo con un aura demoniaca rodeándolo.

-Bien, invito a todos a tomar asiento, la boda comenzara –dijo Byakuya desde el frente del lugar y todos tomaron su lugar correspondiente.

Zaraki fue al frente del lugar y se coloco frente a la mesa, abrió su libro, lo leyó por algunos segundos y lo lanzo por los aires –Boberías, pasemos a lo importante para que pueda irme pronto

Se formo una gotita en la sien de todos los presentes al ver la escena, pero así la fiesta será más pronto, así que no había problema.

-Bien, Kurosaki Ichigo, ¿aceptas a Kuchiki Rukia como tu esposa, prometes serle fiel en lo prospero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, y amarla y respetarla hasta que la muerte los separe?

Isshin ya s encontraba lloriqueándoles a sus hijas, y todos se encontraban esperando la respuesta.

-No…

Todos quedaron consternados, no esperaban esa respuesta, y menos de el que se le veía tan enamorado de la peli-negra, pero ella no se veía preocupada o triste, Byakuya estaba a punto de desenfundar su katana.

-…por que incluso después de morir lo seguiré haciendo –dijo sonriendo y provocando el llanto en muchas de las chicas, Zaraki solo volteo la mirada y siguió.

-Kuchiki Rukia, ¿aceptas a Kurosaki Ichigo como tu esposo, prometes serle fiel en lo prospero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, y amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?

-Acepto

-Bien, puedes besar a la novia. –Dijo Zaraki y así lo hicieron Ichigo y Rukia, todos aplaudieron y comenzaron a felicitarlos.

Ichigo y Rukia se tomaban de la mano mientras eran felicitados, al comenzar a pasar todos adentro de la mansión los recién casados se quedaron juntos.

El peli-naranja volteo a ver a la chica y le dedico una cálida sonrisa, la chica lo volteo ver y le respondió de la misma manera, por fin estaban juntos como siempre lo habían querido, aunque al principio les había costado trabajo aceptarlo.

Y juntos pasaron a la mansión, al entrar los reflectores se posaron sobre ellos. La canción "Another Planet" de Mami Kawada comenzó a sonar.

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Los dos comenzaron a bailar abrazados mientas todos contemplaban la escena, cuando estaba a punto de finalizar se hizo una interrupción debido a la entrada furtiva de alguien a la mansión.

-¡Nee-san, por que! –entro kon corriendo con los brazos abiertos hacia la peli-negra, la cual, junto con el peli-naranja le propinaron un golpe que lo mando volando de regreso a la entrada de la mansión, en donde uno de sus guardaespaldas lo tomo de los brazos y se lo llevo arrastrando.

-Disculpen por la interrupción –dijo el guardaespaldas antes de desaparecer tras el muro.

-Ese Kon nunca va a cambiar –decía cabreado el peli-naranja, mientras que la peli-negra sonreía -¿De que te ríes? –le pregunto Ichigo a su esposa mientras sus mejillas se tornaban de un color rojo.

-Eres mas celoso de lo que pensaba –dijo con una mano cerca de su barbilla mientras seguía riendo

-No podía dejar que se acercara a mi esposa –le dijo volteando la mirada hacia el otro lado y tomándola de nuevo mientras seguían pasando las canciones.

Pronto llego la noche y todos los invitados comenzaron a retirarse incluyendo a los shinigamis.

-Bien, procura cuidarla lo más que puedas –le dijo Byakuya a Ichigo más en tono de amenaza que de petición.

-Siempre lo he hecho, y así seguirá siendo –le dijo confiado el peli-naranja antes de ver como desaparecía tras la puerta espiritual, dejando así la casa solamente habitada por la reciente pareja.

-¿Podríamos quedarnos aquí a contemplar la luna? –le pregunto la oji-violeta a Ichigo mientras caminaban por el patio de la mansión.

-Claro –le dijo sonriente y ambos se sentaron en un banco que se encontraba ahí.

Rukia apoyo su cabeza sobre el hombro del chico mientras ambos contemplaban la luna juntos, en silencio. Pasaron así algunos minutos de tranquilidad hasta que el peli-naranja comenzó a hablar.

-¿Sabes? Desde el día en que te creí muerta siempre contemplaba la luna antes de dormir, de alguna manera podía sentir tu calidez –dijo el peli-naranja aun contemplando la luna.

-Mientras me encontraba en el hueco mundo recordaba lo cómodo que era tu armario, y como al salir siempre te encontrabas dormido, sin ese seño fruncido que siempre tenias, y eso me alentaba a seguir luchando por salir de ahí, y reencontrarme contigo –dijo la peli-negra mientras tomaba de la barbilla a su esposo y le deba un sutil beso cerca de la comisura derecha de la boca.

-Aunque nunca creí que estaría así, junto a una enana enojona y un poco plana –sonrió Ichigo hacia ella

-Y yo no creí que estaría junto a un idiota con cara de delincuente –replico la peli-negra y ambos se quedaron viendo a los ojos seriamente, poco después comenzaron a reír.

-Al parecer nuestra relación nunca será como la de los demás –le dijo sonriente el chico mientras abrazaba a su esposa.

-Así es mas interesante, además, no podemos cambiar nuestra forma de ser.

-En eso tienes razón, y eso es lo que me agrado de ti

-Y a mí de ti, aunque en ocasiones eres un poco ridículo jaja –dijo Rukia mientras provocaba un sonrojo en el peli-naranja.

-¿Entramos? –pregunto el peli-naranja al notar que la brisa fría de la noche comenzaba a intensificarse.

Rukia asintió con la cabeza y ambos entraron a su cuarto, se recostaron juntos, e Ichigo abrazo a la peli-negra de manera protectora.

-Gracias por todo –dijo levemente antes de dormir la peli-negra.

-Gracias por existir –contesto el peli naranja, y así ambos quedaron dormidos, desde ese día ambos se habían unido por un lazo que nadie podría romper…

Y eso es todo por hoy, jeje, esperen la continuación, que será sorpresa!

Y me disculpo por lo corto del capitulo, pero el próximo será mas extenso ^^, además esperen la continuación de mis otras historias, pronto las actualizare n.n

Recuerden que el VIR se alimenta de sus reviews, así que comenten lo mas que puedan ^^

Hasta la próxima, sayo…