22Yo Quería
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Un mes después…
- Sakura…
Cómo cada mañana, Sasuke se levantaba para la rutina del día, y cuando terminaba todo, se quedaba observando ésa foto… ésa foto, donde… estaba ella. No se había acercado a su Pelirosa durante bastante tiempo, y eso lo mataba, pero se sentía bien. Si no lo amaba de verdad, ¿Entonces por qué engañarse? Era mejor dejarse de hacerse ilusiones…
Sé que fui yo el que te busqué
No sé si fue que me ilusioné
Tú me ayudaste también
Tú sólo conmigo querías jugar
No sé a quién querías demostrar cómo alguien te puede amar
Ahora estas sola
- Sasuke-Kun…
Exactamente hace un mes lo había dejado de ver, pero no podía, el remordimiento la mataba… Quería explicarle todo, absolutamente todo… Pero, no podía.
- Maldita sea la hora en que se me pasó ésa tonta idea por mí cabeza…
Ése día tenía entrenamiento, pero no se animaba a ir, y menos en el estado que estaba.
- Ahora que haré con esto… - Colocó sus manos en su vientre, pero aún no resaltaba nada.
La Flor de Cerezo del Uchiha, estaba embarazada.
Yo, yo quería amarte siempre
No quería sufrir más
Yo te quise hasta la muerte
Y me cansé de morir
Yo, no quería abrir los ojos
Te querías divertir
No está mal si es lo que quieres
Pero no me uses a mí...
-¡Teme! ¿¡Qué diablos te pasa! – Un rubio hiperactivo corrió de un extremo del campo de entrenamiento al otro para acercarse al Pelinegro con preocupación – ¡Hace un mes que te estás comportando de un modo extraño! Cada vez que entrenamos pierdes fácilmente. ¿Qué carajos te sucede?
-¡Déjame Dobe! Tengo una fuerte resaca… - Se tocó la cabeza e inmediatamente cayó desmayado
- ¡Sasuke! – Naruto sólo pensó en levantarlo y llevarlo a su casa.
Por todos los medios averiguaría que herida tenía. Porque definitivamente física no era.
Yo ya no siento más dolor
Porque sé que fue mejor
Si no sentías amor
Prefiero estar solo
- ¡Sakura-Chan! ¡Te buscaba urgentemente! – Naruto respiraba agitadamente. Hacía media hora que buscaba a la ojijade para que atendiera a Sasuke
- ¿Qué... Que sucede Naruto?
El rubio levantó la cabeza y quedaron frente a frente.
- Es el Teme. Y está muy mal – Resolvió decir con preocupación.
- ¿Qué…? – Sus ojos jade no pudieron reflejar nada más que tristeza.
- Maldita sea… - Susurró bajito la pelirosa – Esto no debería estar pasando…
Naruto y Sakura se encontraban sentados cada uno al lado del pelinegro. Únicamente se limitaban a mirarlo para ver si había cambios.
Pero no despertaba.
Ella era la culpable de que el estuviese así. Cuando Naruto le contó sobre Sasuke no dudó un segundo en ir a ver como estaba. Lo amaba, pero su relación cambió drásticamente luego de ese encuentro con Hyuuga. Luego de ver a Sasuke terminó con Neji ese mismo día y al anochecer lloró un litro de lágrimas.
- Un mes… - Pensó en voz alta mientras admiraba las facciones del padre de su hijo
- ¿Ah? ¿Un mes que Sakura-Chan? – Preguntó con curiosidad el rubio hiperactivo
- Yo… - No sabía que decir, la próxima vez tendría más cuidado con lo que pensaba, o decía - Yo… ¡Sasuke-Kun!
El pelinegro se movió en las sabanas ligeramente, y luego con mucho pesar abrió los ojos
- ¡Teme! ¡Qué bueno que despiertas! Estábamos muy preocupados por ti…
Sasuke quedó tieso y sin ninguna palabra que decir cuando vio a Sakura, su Sakura…
Naruto sintió el ambiente tenso y decidió hacer algo que se la pasó por la cabeza.
- Yo… ¿Saben…? Recordé que tengo que ver a Hinata-Chan, Hehehe – Rió como para darle un toque graciosos a la escena, lo cual no resultó.
- Déjanos solos, Naruto – Dijo Sasuke con su antiguo tono de frialdad. Naruto inmediatamente se tensó y sonrió un poco, al menos por unos instantes el Sasuke de siempre había vuelto – Está bien teme, los dejo.
Cerró la puerta de la habitación de Sasuke, pero algo le decía que debía quedarse escuchando la conversación. No era una idea para nada estupenda, pero quería saber de qué hablarían esos dos. Si durante meses no se dirigieron la palabra, ¿Ahora de que hablarían? El rubio se limitó a pegar la oreja a la puerta, escondió su chakra y se dispuso a escuchar atentamente.
Cuando Naruto dejó la habitación un silencio inundó la estancia. Sólo Sasuke se atrevió a romperlo.
- ¿Qué haces aquí? – Preguntó de manera indiferente mientras observaba sus nudillos lastimados, resultado de todas las noches de frustración al saber que ella no estaba con él.
- Yo… Yo sólo quería saber cómo estabas – Respondió con sinceridad
- Tsk… ¿Luego de un mes sin verme y hablarme? Interesante – Aún mantenía el tono duro y frío
- ¿Un mes? – Naruto se sorprendió al escuchar lo que el pelinegro dijo - ¿Pero qué clase de relación mantenían Sakura-Chan y Sasuke? – Pensó con horror
- Sasuke yo no quería que esto pasara – La pelirosa se levantó del extremo de la cama – Yo no quería que las cosas tomasen este rumbo…
- ¿Qué no querías? – Levantó su mirada y la observó con decisión, por Kami… Tenía algo que no sabía describir, pero estaba más hermosa que nunca. Al darse cuenta de sus pensamientos se enojó consigo mismo y habló con odio - ¿Tienes idea de lo que me has hecho sufrir?
Yo, yo quería amarte siempre
No quería sufrir más
Te quería hasta la muerte
Y me cansé de morir
- ¿Sufrir? ¿Pero qué carajos pasaba con esos dos? – Ahora nada separaría a Naruto de aquella puerta. Algo le decía que iba a descubrir en cualquier momento la verdad de lo que le sucedía a su amigo.
- Sasuke-Kun, perdóname – Sakura decidió hacer lo que su corazón mandaba. Decirle toda la verdad – Al principio te odié por volver y decidí vengarme de ti, pero luego de todo lo que pasamos… Cada noche que compartía contigo mi mente me decía que dejara de jugar contigo… Pero yo quería venganza, luego de que me viste con Neji decidí terminar todo con él y no tienes idea el dolor que he sentido desde aquel día…
- Estás equivocada – Expresó con rabia - Tú no sabes lo que es sentir dolor de verdad… ¿Sabes lo que se siente al perder a todo un Clan en una noche? ¿Sabes lo que se siente al ver a la que creías tu mujer con otro? ¿¡Lo sabes!
- ¿Qué carajo? ¿Venganza? ¿Acaso Sasuke y Sakura…? – Naruto no podía pensar claramente después de lo que había escuchado. Estaba en shock.
- Sasuke-Kun me he dado cuenta que terminé enamorada de ti otra vez… Perdóname por favor… - La ojijade se acostó al lado de él y lo miró suplicante.
- Que patética te vez suplicando – Sakura abrió los ojos sorprendida – Pierdes tu tiempo, no quiero nada contigo
- Eso no lo decías cuando estabas encima de mi – Dijo con rabia - ¿Acaso una persona no puede equivocarse en este mundo?
- A los errores le llamamos experiencia. A veces erramos al querer... Ahora ya sabes cuanta experiencia tienes en lastimarme – Sin ningún sentimiento ni remordimiento soltó aquellas palabras.
- Sasuke-Kun… - Los ojos de la Haruno comenzaban a cristalizarse
- No sé como lo lograste, pero me manejaste a tu antojo.
- Sasuke-Kun, por favor ya no más… - Inevitablemente sus mejillas estaban húmedas
- No me uses más – El pelinegro se acostó de un lado, mostrándole la espalda a Sakura y así dándole a entender que la conversación había terminado.
Yo, no quería abrir los ojos
Te querías divertir
No está mal si es lo que quieres
Pero no me uses a mí...
- ¿Nunca más me verás? – Preguntó con temor, no quería que su hijo se quedara sin un padre – Responde
- Es triste saber que nada es para siempre… Lamentablemente siempre hay uno que ama más que el otro. Yo quería amarte siempre, Sakura. En este caso tu vida es de color rosa, y para mí roja, o negra, como quieras…
- Está bien. Me voy – Resignada a ser madre soltera caminó con decisión hacia la salida – Uchiha… - Pronunció Sakura – Del rosado al rojo a un solo paso, creo estar completamente segura de que color es mi vida en este momento – Acarició su vientre aún plano – No nos verás nunca más… - Sin nada más que decir salió de la habitación de Uchiha. Estaba tan dolida que no notó a Naruto.
Tú solo jugabas
Y yo te amaba
El rubio no podía creer lo que había escuchado. ¿Cómo era posible que Sakura-Chan hubiera hecho tal atrocidad? Nunca se lo imaginó de ella. Duró varios minutos con los ojos abiertos, hasta que escuchó como en la habitación de Sasuke se rompía algo. Corrió inmediatamente y vio al pelinegro levantado de la cama con un jarrón en la mano.
- Sasuke…
- ¿Lo has escuchado todo verdad? – Se limitó a mirarlo y dijo con ironía – Para que veas lo que puede hacer Sakura-Chan… - Trató de imitar la voz de Naruto, sin éxito alguno – A ver qué piensas de ella ahora…
- Teme… No sé qué decirte…
- No digas nada… - Se puso una camisa que vio en un rincón y se dispuso a salir
- ¿A dónde vas Sasuke?
- Por ahí, no quiero estar encerrado y que mis pensamientos vayan hacia ella – Sin más salió del barrio Uchiha y caminó por toda Konoha pensando cómo sería su vida sin ella.
Yo, yo quería amarte siempre
No quería sufrir más
Te quería hasta la muerte
Y me cansé de morir
- Sasuke-Kun… - Una pelirosa se encontraba en su cama llorando de la impotencia. Si tan solo no hubiese comenzado ese maldito juego… Ni siquiera le había dicho que esperaba un hijo de él. Já, seguro ni le creería, pensaría que era del Hyuuga – Este hijo es tuyo Sasuke, sólo nuestro… - Mientras se acariciaba el vientre cayó profundamente dormida a la vez que pensaba como sería un futuro sin él.
Yo, no quería abrir los ojos
Te querías divertir
No está mal si es lo que quieres
Pero no me uses a mí...
No te enamores dos veces de la misma persona, porque a la segunda… Te enamorarás sólo del recuerdo.
~Continuará…
Pues me animé a suber continuación, ya no será un One-Shot, así que convertí esta historia en un Long Fic.
Espero que no me maten por lo que acabo de hacer, pero es necesario para la trama.
Muchas gracias por leer esta historia.
~Bye!
LunosA