Introducción:

No sé si me recordas, yo si lo hago, nunca te podría olvidar, tu rostro pecoso y tus sinceros ojos marrones siempre en mi mente están presentes y nunca jamás podría sacarlos de ahí, forman parte importante de mi pasado y quiero que sigan así, por el resto de la eternidad

Ver todo aquello, recordarlo, tenerlo presente me permitía conocerte, amarte en silencio; fui tu pasado y quiero ser tu presente y tu futuro, fui tu soporte, aun que jamás te derrumbaste frente a mi, siempre impecable y fuerte, siempre me protegiste y debería haber sido al revés.

Recuerdo como hoy, todos los abrazos y saludos que compartimos, tu tan inocente, sin ser conciente que por mi mente pasaban sueños y anhelos impuros. Ahora tenia la oportunidad de verte y mostrarte, entregarte todo mi ser, aun que este ya te pertenezca desde siempre, darte la posibilidad de que me conozcas y poder, al fin, amarte en serio, como tu te mereces…

Recorda… Recordame

Cuanto tiempo pasó desde la última vez que nos vimos

Ahora te tengo parada frente a mí y me resultabas familiar pero a la vez extraño,

Un completo desconocido para mi razón

Pero no para mi corazón

Que te anhela desde tiempos inmemorables.

Me resultabas familiar, pero la oscuridad jamás me dejo ver bien…

Estoy muriendo,

Vos bien lo debes de saber,

Lo sabes,

Todos lo saben,

Pero nadie lo quiere admitir,

Me quieren condenar a vivir en una utopia donde la familia unida existe,

Pero de noche yo escucho,

Las paredes escuchan,

Todos esos susurros,

Los llantos de mama,

Los gritos de mi hermana

¿Qué puedo hacer yo?

Magia no tengo,

Y a lo único que puedo llegar a pensar,

Es en dejar todo como antes,

Para poder partir.

Ahora,

Vos y yo,

Frente a frente,

Me observas con dulzura,

No hay pena ni vergüenza en tus sinceros ojos oscuros,

Me siento en casa,

Me siento en mi verdadero hogar cada vez que los observo,

Me miras con amor,

Con ternura y yo me derrumbo,

Ya no puedo ser aquella niña fuerte que conociste,

Ya no más,

A pesar de todo me sostenes,

Me amas y yo también,

Siempre lo hice,

Pero ahora ya no lo puedo negar,

Deseo disfrutar,

La vida que se me había negado por tu partida,

Ninguno lo negara,

Ambos lo disfrutaríamos,

Allí los dos…

¿…Recordas…?

¿…Aun lo tienes presente en tu mortal mente…?

¿…Que de niñas nos obligaban a rezar…?

¿…Que todos los días era una bendita decena de aquel frío rosario…?

¿…una decena de aquellas heladas piedras que nos mandaban a llevar al cuello…?

¿…ocultas bajo esos monótonos uniformes…?

¿…Aun lo tienes presente en tu inmortal corazón…?

¿…Aun lo tienes presente en tu humano cuerpo…?

¿…Recordas…?

¿…Recordas…?

Siempre eran las mismas monótonas oraciones

Repetidas hasta el cansancio

Como premio o castigo

Siempre diez ave marías y dos padre nuestro…

Siempre uno al comienzo y otro al final

Siempre.

El broche de oro imperturbable

Jamás olvidado

Aquella que de un ángel cantaba y contaba

un supuesto guardián jamás visto…

Nunca presente…

¿…La recordas…?

Yo si…

Recuerdo todo aquello que aprendí con vos,

Lo que me enseñaste también,

Todo lo llevo grabado aun después de la muerte…

Admito,

No estuve presente como debía ser,

En mi verdadero yo que ahora deseaba mostrar…

¿Por qué ahora? ¿Por qué no antes?

Por temor tal vez,

Odio a mi mismo pero ya no más,

Frente a tus dulces ojos en breve estaré,

Entregarte mi corazón lo mínimo que podía,

Puedo y haría,

Aun quedaba mucho camino que seguir…

Ahora me veras,

Por fin acariciarte podré,

Y tus labios serian el cielo para mí,

Como siempre soñé,

Como siempre anhele,

Solo espero ser correspondido como antaño,

Como siempre soñé y jamás olvide…

Te lo agradezco…

Siempre lo voy a hacer,

Significaste mucho para mí,

Antes y ahora,

Sos mi faro en esta noche eterna de tormenta…

Sos mi luz en la oscuridad y a pesar de las circunstancias,

Siempre,

Siempre,

Te voy a amar…