¿A Quién y dondé?

Harry Potter se despertó una tarde de Junio. Hacía más de un mes que Voldemort había muerto y el había salvado a la comunidad mágica.

"Me pregunto como reaccionaran los Dursley por eso" se preguntó Harry mientras tomaba sus gafas.

Estaba en Grinmauld Place, pues, había optado por no seguir el séptimo curso de Hogwarts.

-¡Kreacher!

Y el Elfo apareció.

-Quisiera que me prepararas algo para desayunar.

-¿Qué desearía el Amo para desayunar?-preguntó el Elfo con voz ronca.

-Algo de pan tostado. Y también desearía que tu comieras un poco.-Kreacher se sorprendió; nadie lo había tratado así nunca-Y zumo de naranja.

-Como desee, Amo.-Kreacher hizo una reverencia, y desapareció.

Diez minutos después, mientras disfrutaba su desayuno, Harry oyó el chillido de una lechuza.

Fue hacía la ventana más próxima, y vio una lechuza de colores grises con blanco: parecía un buen ejemplar de lechuza.

Tenía una carta.

La leyó:

Potter

Ahora que has derrotado al Señor tenebroso, los Mortífagos queremos venganza.

Tenemos a tus amiguitos en dos edificios muggles en la ciudad: el peli naranja esta en una compañía de libros llamada Bloomsbury, con la agradable compañía de los Malfoy. Tu amiguita, la castaña, esta en otra compañía de libros llamada Scholatic, con Greyback que aún no comido, ella podría ser una "agradable comida"

Tienes dos horas para decidir a quien salvar, porque hemos hecho un encantamiento a los edificios para que, cuando salgas de el, el otro edificio sea cubierto por esa barrera que hicimos al matar a Dumbledore, así que solo podrás pasar si tienes una Marca Tenebrosa.

Recuerda: dos horas

.

R.L

Harry no podía creer lo que había leído. Tanto esfuerzo, tantas muertes, tantos sacrificios . . .

Para nada.

Pero eso no lo detendría. Debía encontrar una forma de burlar el plan de "R.L", quienquiera que fuese.

Sacó su varita del bolsillo. Salió de la casa y giró sobre si mismo.

Cuando llegó a Bloomsbury, entro por la puerta principal.

Cuando vio lo que había dentro, no pudo creerlo.

-Has caído, Potter.-rió un mortífago, que juntó con sus colegas, le apuntaba a Harry con la varita.

Allí no estaban, ni Ron, ni Hermione.

Notas del autor.

*Que engañoso ¿No