Capitulo 1: Muertos de Hambre.

Edward POV.

— ¡EMMETT DEJA DE COMERTE EL REFRIGERADOR ENTERO! — Idiota, apenas teníamos para sobrevivir y él tenía que engullir la comida como un animal.

—Relájate amigo — masculló mientras devoraba tres trozos de pizza totalmente fría al mismo tiempo.

— ¿Y tú no piensas decirle nada? — El otro imbécil tirado sobre el sofá se encogió de hombros mientras miraba expectante un partido de fut bol en el televisor.

— ¿Quién va ganando?

— Boston, oye tráeme una pizza

— ¡¿QUE SOY EL UNICO AQUÍ QUE TIENE CEREBRO? — Les grite a ambos ahora ya fuera de mis casillas.

—Te quejas como niña…

—Pues aquí nadie más se preocupa por el que comeremos mañana, o por el que pasara cuando nos echen del departamento porque no tenemos ni un centavo.

—Dramático — sin pensarlo tome la caja de pizza y la arroje sobre sus cabezas.

— ¡Ouch!

—Oye… — los ignore y me dirigí a mi habitación, cerré de golpe la puerta como un niño malcriado y me tire en la cama.

Esos dos ya me tenían hasta la coronilla. No parecía interesarles en lo más mínimo que en un par de dias nos pondrían de patitas en la calle. Y pensar que yo había pagado los dos últimos meses de la renta para mantener a ese par de inútiles.

Tome mi ipod y me coloque los audífonos, puse música a todo volumen y me quede dormido.

Al siguiente día me desperté, me bañe y me vestí para la universidad.

Era viernes, para el domingo probablemente dormiría en una banca del parque con los vagabundos.

— ¿Qué hay de desayuno?

—Busca en el refrigerador— Ambos se asomaron dentro de las dos grandes puertas blancas.

—No hay nada — Chilló Emmett

—Exacto.

Tome mis llaves y salí del departamento. Con el poco dinero que me quedaba ahorrado comí un sándwich y un café en un pequeño restaurante a la vuelta de la esquina. Me daba una gran satisfacción el saber que ni Emmett o Jasper tenían un dólar en sus bolsillos –espero les guste sufrir hambre-pensé.

Luego de pasar una hora en el restaurante y volver por mis libros me fui a la universidad. En cuanto llegué Jasper y Emmett se pusieron a quejarse que porque no habían comido, que porque les adían las tripas, que porque morirían de hambre, francamente no sé como Alice y Rose podían aguantarlos, bueno al menos no viven bajo su mismo techo y pobre de ellas el día que eso pase.

Estábamos en pleno almuerzo y nadie "Almorzaba" Jasper y Emmett se seguían quejando y yo trataba de ignorarlos. Nos sentamos en una de las mesas de la terraza de la universidad tratando de olvidar todo lo relacionado con dinero, comida o el departamento.

Durante las siguientes dos horas por mis ojos pasaban innumerables chicas que me sonreían coquetamente y hacían señas para que me acercara, como al parecer ya era una costumbre, en ninguno de los casos lo hice. Detestaba a ese tipo de mujeres, que se exhiben de una manera degradante y les importa muy poco lo inmoral que eso sea. Sin embargo ninguno de mis amigos compartía mi opinión, decían que vivo en el siglo pasado o que solo buscaba excusas.

—Ve, vamos esa chica es linda, te gustan las morenas ¿no?—Me alentó Jasper.

—No es mi tipo —

—Ninguna es tu tipo— rezongó Emmett

—Ninguna que conozca— Me defendí

—Tal vez no exista una chica que sea tu tipo.

— ¿Ah? — ¿Qué clase de apoyo es ese?

—Edward ¿seguro que no eres gay?

—NO, EMMETT

—No eres gay o ¿no estás seguro de que no eres gay?

—No soy gay.

— ¿Entonces si te gustan las mujeres?

—Sí, es solo que…

— ¿es solo que?

—Solo que no he encontrado a la indicada.

— ¿y qué pasa si la indicada no existe?

—Tiene que existir Emmett —

— ¿y si no? ¿O qué tal si no es "indicada"? y es…—

— ¡CALLATE! ¿Por qué siempre tienen que hacer eso? Si quiero tener novia o no es mi problema— Ambos cerraron sus enormes bocotas y me dejaron tranquilo.

Odiaba que se pusieran en ese plan. Desde que tenemos dieciséis años y ellos empezaron a salir con Alice y Rose me han hecho la vida imposible. Podían entender que no tuviera una relación estable con alguien, pero lo que realmente me condenaba es que tuvieran el conocimiento de que a mis veinte años seguía siendo virgen.

Idiotas, el que ellos en otra circunstancia se acostaran con la primera chica que les pasara por enfrente no quiere decir que yo también tenga que hacerlo ¿Qué sentido tendría estar con alguien a quien no quiero? Y al contrario de lo ellos pensaban no era porque no me gustaran las mujeres o que estuviera confundido, solo espero a la adecuada, eso es todo.

En todo el día no volvieron a mencionar el tema, sabían perfectamente como me pondría si continuaban y, aun cuando al principio lo dudé, tampoco eran TAN tontos. Ellos seguían lloriqueando por todos los pasillos y después de muchas suplicas consiguieron que Alice y Rose les prestaran dinero para llenar sus estómagos.

—Te he dicho cuanto te amo — le dijo Emmett a Rose mientras se atragantaba con un emparedado de cuatro tipos diferentes de panes y cinco pisos de lechuga, tomate, jamón, queso, etc. Jasper se limito a asentir mirando a Alice ya que como tenia la boca tan llena no podía decir palabra. Ambas chicas rodaron los ojos.

—Son unos tontos, debieron guardar un poco de comida.

—Yo se los dije ¿pero acaso alguien escucha a Edward? NO—Jasper me arrojo una bola de papel.

—Y chicas mejor prepárense porque lo más probable es que nos vayamos a vivir con ustedes— continuo él.

— ¡A NO! A mi casa no se van a mis padres les da un paro cardiaco, además se supone que son los novios los que le compran cosas a sus novias, no al revés— dijo Rose.

—Pero ¿A dónde iremos? — tanto Emmett como Jasper pusieron caras de gatito con botas de shreck.

—A mi casa no — volvió a negar Rosalie.

—Tranquillos chicos, tengo la solución para su problema — Alice nos sonrió cariñosamente.

—Te escuchamos.

—Bueno es que recién hace unos dias conocí a un chico… — Empezó su relato.

—Alice a nosotros no nos interesa que estés engañado a Jasper — Emmett se burlo tratando de hacerse el chistoso pero lo único que consiguió fue dos miradas matadoras y un zape, cortesía de su "dulce" novia.

—Amor…— gimoteó quejumbroso.

—Como decía… hace unos dias conocí a un chico, era muy agradable, estaba buscando con desesperación donde vivir. Había investigado departamentos por toda la cuidad pero ninguno estaba bacante.

— ¿Y…?

— ¡Hay pero como son los hombres de despistados! Me refiero a que, él necesita donde vivir, ustedes necesitan dinero, entonces…

—No, Alice — dijo Jasper. — Ya somos tres y apenas nos aguantamos — en eso tenía razón, no soportaría a otro como ellos —otros más…

—Mira pues yo les estoy dando una opción, si no la quieren es su problema. Pero tengan en cuenta que si los echan del edificio, él podrá comprarlo, y ustedes se quedaran en la calle porque no vivirán, ni con Rose, ni conmigo — Los tres nos miramos. Eso también era verdad.

—Escuchen el chico me dio su teléfono, dice que puede pagar los primeros tres meses por adelantado, eso les daría el dinero suficiente para pagar el departamento e incluso les quedaría. Claro, en lo que consiguen dinero holgazanes, tampoco los mantendrá —Ya era hora. No saben lo increíblemente molesto que podía llegar a ser el único imbécil que tenía un empleo — ¿Entendido?

—De acuerdo, aceptamos — Todos asentimos — ¿Quién es el chico? — Siempre y cuando no fuera otro gorila mastodonte como Emmett, todo estaría bien…

…O al menos, eso creía.

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Nota de la autora: Wow no puedo creer que subí el primer cap. Enserio me quede como *-* cuando vi todos los comentarios que me habían llegado yo me había puesto diez como meta y ver más del doble e me puso de un humor increíble, además de un total de 19 alertas y 23 favoritos, y tan solo con el prologo, enserio ha sido genial y espero no decepcionarlas, y si sé que es corto pero tenía que cortarlo aquí, poco a poco los hare más largos, y créanme que hare lo mejor que pueda.