Descargo responsabilidad. La serie animada Los Simpson es creación de Matt Groening y propiedad de la cadena Fox.
Un sábado en el zoológico
Es un sábado por la tarde en la ciudad de Springfield, un niño de 10 años llamado Bart Simpson y su hermana de 8 años de nombre Lisa Simpson entran al zoológico de la ciudad.
-Debes permanecer cerca de mi -advierte el muchacho a su hermana menor.
-Ya lo sé -responde Lisa.
Para la pequeña Lisa, una niña de tan sólo 8 años, era emocionante poder observar de cerca a los leones, las jirafas y demás animales exóticos. Aunque eventualmente la pequeña pensaba que tal vez los animales no eran felices en cautiverio, aún así podía disfrutar el espectáculo.
Ir allí había sido sugerencia de Bart, puesto que él sabia lo mucho que Lisa quería a los animales. El niño de 10 años había pasado un buen rato acompañando a su hermana menor, no había sido una tarde particularmente interesante, pero el chico se sentía relajado.
Los niños llevan poco más de una hora paseándose por el lugar, observando a las diferentes especies. Ellos habían visto casi todas las atracciones, desde canguros hasta serpientes venenosas.
-Mira a los pavo reales, son tan lindos -dice Lisa mientras ambos se encuentran junto al habitad de los pavos reales.
-Yo diría que son aburridos. Sería más interesante si fuera el habitad de los pavos reales mutantes -contesta el niño.
Algunos minutos más tarde Bart y Lisa llegaron junto al habitad de los monos. Bart realmente no estaba prestando mucha atención, mientras Lisa miraba divertida al grupo de primates.
De repente la niña, ve algo que le llama la atención y pregunta:
-Bart, ¿qué es lo que están haciendo esos monos?
El niño Simpson mira que era a lo que Lisa se refería. Resultó que había una pareja de monos apareándose, y la pequeña niña no entendía el significado de eso. El niño, por otro lado, reconoció la escena.
Bart realmente no quiere tocar el tema, ese se convirtió en una raro momento de incomodidad para él. Puesto que el chico rubio resultó ser más sensible de lo que él esperaba, decide evadir el asunto.
-Eh... ellos están... ¡Hey! ¡¿Quieres ver las cebras? -Bart toma a su hermana del brazo y la conduce hacia la cerca que rodeada el área de la cebras.
Lisa mira a los équidos, y para asombro de la chica y la molestia de Bart, una pareja de cebras también estaba atendiendo el llamado de la naturaleza.
-¡Mira, Bart! ¡Las cebras también lo hacen! -indica Lisa.
"Estúpidos animales lujuriosos", se queja Bart.
-¿Por qué están haciendo eso, Bart? Dime, tú sabes -dice ella.
-Ay caramba -exclama el muchacho resignado a hablar del tema-, ellos están...
Más tarde, Bart y Lisa por fin llegan a casa. Marge hace la limpieza, mientras Homero lee el periódico y Maggie ve su programa de televisión favorito, un dibujo animado sobre duendecillos.
-Se divirtieron, ¿niños? -pregunta Marge.
-Sí. Bart y yo fuimos al zoológico. Y hoy aprendí de donde vienen los bebes -contesta Lisa.
-Bien, ahora no tengo que ser yo quien te lo explique -dice Homero.
-¡Homero! -lo reprendió Marge.
-¿Qué? ¿Sabes lo molesto que es tener que hablar de eso con los hijos? Más con una niña -replica el padre de familia.
-Pues que bueno que no tuviste que hacerlo -dice Bart con sarcasmo.
-Bueno, niños, vayan a la lavarse la manos porque ya voy a servir la cena -dice Marge.
-Sí, mama -contesta Lisa y entra alegre a la cocina.
-Y tú, Bart, recuerda que si tienes alguna duda sobre... tú sabes, siempre puedes hablarlo con tu padre y conmigo.
-Gracias, pero creo me las arreglare solo -dice Bart y entra a la cocina.
-Ufff... Que bueno -declara Homero sintiéndose aliviado.
Marge no estaba de acuerdo con la actitud de su esposo, pero ella sabe que a veces resultaba inútil discutir con él. La mujer de cabello azul se limita simplemente a suspirar y entra a la cocina para servir la cena.