"3 MERODEADORES SLYTHERIN"

Autor: severusphoenix


CAPITULO 2: "El Álbum de Lily"

Vernon miró con esfuerzo y ojos empañados por una bruma inducida por el whisky a las tres figuras acurrucadas en el sofá. Ellos parecen acobardados, pensó con satisfacción. Eso no duró mucho cuando Petunia se puso de pie y lo miró con repentina confianza.

—Suban a sus habitaciones, jovencitos —dijo Petunia con firmeza.

Los niños se afanaron por pasar junto a Vernon y subir corriendo. Se detuvieron en lo alto a escuchar. Lo que fueran a hacer a continuación dependía de Vernon . . . y de Petunia. ¿Seria ella capaz de mantenerse firme?

—¿Ahora vas a permitir que el anormal duerma arriba? ¡¿Quién sabe lo que nos hará mientras dormimos?! —rugió Vernon, espantado.

—Él no hará nada, Vernon. No tiene idea como usar su magia. Su magia accidental se acciona cuando se encuentra en una situación de extrema angustia —contestó Petunia calmadamente.

—Entonces, ¿por qué no hace nada cuando es disciplinado? —dijo Vernon despectivamente.

—Tal vez él sea más fuerte de lo que tu crees; la familia Evans nunca ha tenido un miembro que no haya podido enfrentar lo que la vida le ponga por delante. Yo lo había olvidado por un tiempo, pero te aseguro que para mantener a Harry y Dudley seguros no volveré a olvidarlo —el destello en sus ojos incluso le hizo tomar noticia a la mente ahogada en alcohol de Vernon—. Tu me golpeaste la última vez que me opuse, aunque después dijiste que no lo recordabas. Si vuelves a pegarnos a alguno de nosotros de nuevo, haré lo que sea que haya que hacer para librarme de ti. Yo prefiero no hacerlo, tu eres un buen hombre cuando no estas ebrio, y cuando no se trata de Harry. Si la única forma en que te puedes comportar es pretendiendo que él no existe, entonces que sea así —con esto, ella se dio la vuelta para seguir a los niños arriba.

Los niños estaban sonriendo y mostrándoles los pulgares arriba cuando ella llegó a la parte superior. Ella sonrió y les mandó a sus camas.

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Dudley saltó a su cama animadamente, con el conocimiento de que en algún momento iba a tener magia. Él siempre se había sentido en falta de algo. Se había sumergido en juegos de video, particularmente en aquellos que tenían magia y hechicería, algo en ellos le apelaba. Ahora, sentía que sabia el porqué: él pertenecía en ese mundo. Ya no tendría nunca más que pretender.

Harry se acomodó en la cama con felicidad, de verdad capaz de estirarse para dormir, por primera vez. Tantas cosas habían cambiado en menos de un día. Ahora él tenía una habitación, montones de comida, y su Tía y su primo ya no lo odiaban. Esperaba que si todo esto era un sueño, nunca despertar. Él había pensado que su único escape sería el marcharse de allí tan pronto como fuera mayor, y salir a hacerse valer por las suyas.

Ahora, parecía que había alguien pagándole a los Dursley para hacerse cargo de él. Harry no era estúpido, la única razón por la que alguien estuviera pagando era si se trataba de dinero suyo dejado a él para mantenerlo. Si se tratara simplemente de familiares ricos, preocupados, ellos no lo hubieran dejado aquí después de ese desastre cuando el cumplió ocho años, y todas esas cosas raras comenzaron a suceder y que ahora era claro que se trataba de su magia escapando.

Harry se fue quedando dormido, soñando con un castillo y volando, como las fotografías en el álbum. Su mamá había sido muy bonita, y su papá parecía haber sido muy divertido. Esperaba poder escuchar más historias mañana... si es que el Tío Vernon no los mataba a todos para el desayuno.

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Vernon se quedó parado un rato, como si se hubiera convertido en piedra; vagamente podía escuchar a Petunia y a los chicos yendo a acostarse. Había regresado a casa esperando poner todo en el lugar que correspondía. En vez de eso, los cambios se habían vuelto aun más profundos. Trastabilló sobre el sofá y cayó pesadamente sobre este. El sofá crujió y se quejó con alarma. Condenada cosa, obviamente era de mala calidad. No se sentía con ganas de hacer algo acerca de ellos en ese momento, debía ser porque estaba tan cansado, ¡ÉL TRABAJABA DURO MALDITA SEA!. Ellos deberían respetarlo más.

Estaba sorprendido de que Dudley fuera parte de esto; ¿de seguro no querría compartir sus cosas con el anormal? Cuando él se diera cuenta de que tendría que compartir, volvería a ser como antes. Casi se sonrió, sí ese era el boleto, y Petunia nunca volvería a poner a Harry antes que a Dudley. Lo resolvería todo en la mañana, sólo necesitaba ahora descansar. Pronto estaba roncando pacíficamente en el sofá.

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Petunia había caído en un sueño irregular, despertando a cada momento ante cualquier ruido. Ella había ido a mirar a la sala de estar en cierto punto, para ver con alivio que Vernon estaba durmiendo. Había conseguido dormir un par de horas después de eso. Aun así despertó más temprano de lo normal, y se puso a preparar un desayuno enorme. Harry bajó pronto después que ella, obviamente perplejo de por qué ella estaba haciendo su trabajo. Él había estado haciendo el desayuno por años.

Harry ya se había duchado y vestido, y caminaba de puntillas alrededor de Vernon que aun roncaba. Petunia hizo una mueca, mirando sus ropas anchas de segunda mano. Vernon había rehusado comprarle nada nuevo después que él había cumplido siete años. Esa primera suma que Dumbledore le había dado ya había desaparecido para ese tiempo, no es que se hubiera gastado algo de ello en Harry. Había estado dando pagos extra para la casa y los autos, lentamente, para no alertar a la gente de los impuestos. Había hecho unas cuantas inversiones y comprado buenos muebles y habían tenido unas vacaciones esplendidas.

Debía haber sido una suma bastante grande, pensó ella. Pero finalmente se había acabado. Él se había puesto aun más mezquino con cualquier dinero gastado en Harry, y había comenzado a insistir en que 'él se ganara su manutención'. Los golpes había comenzado con su magia accidental. Afortunadamente, Albus Dumbledore había comenzado a hacer esos pagos mensuales, o Harry nunca habría sobrevivido. Uno hubiese pensado que Vernon se hubiese sentido más contento con Harry después de eso, pero había tomado a pecho la recomendación de Dumbledore acerca de que los 'chicos necesitaban disciplina', no recordando la parte acerca de 'no dejarse llevar'.

Harry se movió un poco nervioso al colocar la mesa—. Tía Petunia . . . si ese hombre le esta dando dinero a Vernon para mantenerme . . . ¿te lo daría a ti si nos marchamos, o si Vernon es obligado a irse? ¿Es suficiente para todos nosotros?

Petunia lo miró con asombro, ¡por supuesto!—. Sí, son 1000 libras al mes las que manda. No tendríamos lujos, pero estaríamos bien —Petunia entonces frunció el ceño, revolviendo los huevos con más fuerza—. Pero no estoy segura de confiar en nada enviado por Albus Dumbledore. No sé en realidad cual es su agenda, pero no estoy segura de que sea pensando en tu mejor bienestar, ni en el nuestro.

Harry asintió, también arrugando el ceño. Exprimió las naranjas aun más viciosamente para sacarles jugo. Este Dumbledore ciertamente no se había ganado el cariño de Harry. La tía Petunia y Dudley ahora podrían ser mejores, pero Vernon aun era un bast...um...matón. La Tía Petunia era aficionada a lavarle la boca incluso a Dudley si se usaban malas palabras,

Petunia despertó a Dudley con rapidez—. Dúchate y vístete, querrás estar en la mesa cuando tu padre se despierte —Dudley asintió y corrió al baño.

Petunia agarró unas píldoras y un vaso grande de jugo y caminó hacia Vernon. Ella lo había dejado hasta el último minuto, pero se pondría lívido si se atrasaba para trabajar. Ella lo sacudió para despertarlo, y él miró a su alrededor, confundido.

—Aquí hay aspirina, una píldora para el dolor, y algo para las náuseas, asegurate de beber todo el jugo. El desayuno esta esperando —Petunia esperó a que él asintiera, y se tomara la medicación.

Vernon se apuró para lavarse y cambiarse de ropa. Todo había parecido tan claro la noche anterior, y ahora estaba un poco nebuloso. Se sentó a la mesa del desayuno, y se sirvió un plato grande. Dudley estaba sirviéndose sólo un plato pequeño, ah sí, necesitaba hacer que Dudley volviera de su lado.

—Bien, yo pretendía darte un montón de ropas nuevas este mes, y quizás algunas juguetes nuevos para tu cumpleaños, Dudley, pero supongo que tendrás que compartir la diversión de comprar con Harry —Vernon suspiró con falso arrepentimiento. Pero la esperada erupción de temperamento no sucedió.

—Olvídate de ropas nuevas para mi, me he vuelto demasiado gordo —dijo Dudley con liviandad—. Voy a perder algo de peso, así que probablemente voy a volver a usar alguna de las ropas que ya me quedaban 'pequeñas' —Dudley miró a un pasmado Harry—. Voy a empezar a ir a la piscina todos los días, hay que caminar un poco, pero eso probablemente me ayudará. ¿Te importaría venir conmigo, Harry? Te enseñaría a nadar —Harry asintió su acuerdo, siempre había querido aprender a nadar.

Los padres de Dudley quedaron estupefactos, Petunia con deleite. Sin embargo, Vernon estaba horrorizado. No solamente Dudley le daba alegremente sus cosas a Harry, pero ahora pretendía matarse de hambre y convertirse en uno de esos chalados por la salud.

—Excelente, conseguiré pases de verano para nosotros tres. Podría unirme a ustedes algunos días. Todos vamos a comprar trajes nuevos para nadar y otras cosas —Petunia estaba fascinada—. Quizás nos detengamos en un centro de deportes y ejercicios, allí hay algunas cosas que te podrían gustar para tu cumpleaños. Es un poquito anticipado para comprar para tu cumpleaños, Harry, pero puedes mostrarme lo que te gusta —Harry asintió, mirando la cara púrpura de Vernon con precaución.

¡Esto era intolerable! El mundo se había vuelto loco. Vernon lanzó su servilleta y se marchó a trabajar. Ya se pensaría en alguna estrategia para hacer que su mundo volviera a funcionar.

El trío restante escuchó los portazos con inquietud—. No estoy seguro de que eso haya resultado muy bien, mamá —dijo Dudley finalmente. Los otros dos asintieron, y terminaron la comida en silencio. El lavado había concluido cuando Petunia finalmente habló.

—Se dan cuenta de que tu padre nunca aceptará a un hijo que es un mago, y tendrás que hacer una decisión con respecto a eso pronto. Tendremos que liberar tu magia dentro del próximo año, para que asistas a la escuela de los magos: Hogwarts —Petunia no estaba feliz con hacerle esto a Dudley, pero era una decisión que tenía que hacerse.

—Pienso que me di cuenta de eso cuando descubrí lo que papá había hecho que me hicieran. Pero sé que tengo que conseguir que me regresen mi magia, si no, no puedo ser lo que supone que fuera de verdad —Dudley contestó con fiereza. Aun encontraba difícil de aceptar lo que le habían hecho.

Ellos terminaron de asear y fueron a la sala de estar, sentándose una vez más en el sofá.

Petunia sacó la caja y un álbum diferente y lo abrió—. Estas son fotografías de Lily antes de ir a Hogwarts, y los años anteriores aquí —ella señaló una fotografía de Lily y de un chico de cabello negro de aspecto sombrío—. Severus Snape vivía en el mismo pueblo que nosotros, pero del lado contrario. Nos conocimos en un parque y él reconoció que Lily poseía magia, justo como él. Ellos se hicieron amigos, y me avergüenza decirlo, pero yo estaba celosa de ello; verán, ellos compartían algo que yo no tenía.

Dudley y Harry le dieron golpecitos en los brazos para reconfortarla. Dudley comprendía muy bien, se imaginaba que si no conseguía tener su magia de regreso se volvería, de hecho, muy celoso de Harry.

Ellos dieron vuelta las páginas lentamente. El chico Snape estaba casi sonriendo en muy pocas de ellas, y mientras se iban haciendo mayores, se veía más y más arisco.

—Mirando atrás, pienso que el padre de Severus era bastante abusivo, Lily decía que él no tenía magia y que no le gustaba que Severus fuera un mago. Su madre murió cuando él tenía solamente doce años, y creo que su padre se volvió entonces peor.

Los niños asintieron, ahora que se habían familiarizado con una figura masculina autoritaria, Harry podía imaginar volviéndose también bastante mal genio.

—Lily dijo que ellos habían estaban discutiendo mucho para cuando estaban en quinto año, y que él finalmente hizo algo, la insultó creo yo, y ellos nunca recobraron su amistad. Sé que debe haber sido algo más complicado que eso. Tu padre, James, y él eran rivales. Estoy segura de que él no quiso que Lily volviera a ser su amiga. Quizás Severus pueda explicarlo, cuando nos encontremos con él —Petunia suspiró; ella tenía que hallar un modo de rastrearlo.

Petunia guardó el álbum y sacó un libro—. Lily siempre decía que cualquier cosa que desearas saber de Hogwarts estaba en este libro —ella les entregó a los niños el libro grande, bellamente repujado.

—«Hogwarts, una Historia», ¡sensacional! —Harry leyó la cubierta con avidez.

Petunia se levantó y ellos comenzaron a leer con impaciencia—. Necesito revisar unas cosas, lean por un rato, nos iremos en una hora.

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Autor: Gracias a todos los que han escrito reviews. Pronto tendremos Severus.

N.d.T. Gracias a todos por la recepción. Traduciré los primeros capítulos a la brevedad, para -ejem- que no pierdan interés, y después bajaré un poco el ritmo. Aun faltan muchas sorpresas =)

El link original de esta historia esta en mi perfil y también en mis favoritas.

Harry Potter y su mundo © de J.K. Rowling y varias otras compañías. Fanfic sin fines de lucro, sólo con fines lúdicos.

Editado el 28 oct 2020 para correcciones menores.