—Por cierto, ¿Sabes algo de Kurosaki?

—¿Eh?.- la pregunta la tomó un poco por sorpresa….- ¿Por qué debería saberlo?.- contestó con un tono un poco acido.

—Bueno, viven juntos.

—Sí, pero eso no significa que estemos siempre juntos.- parecía que ella comenzaba a ponerse a la defensiva.

—Apostaría mucho a que te equivocas.- dijo acomodándose sus gafas.

—Nada de apuestas, por favor.- se adelantó un poco por el pasillo mientras frotaba su sien con la mano.

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Patio trasero, Instituto Karakura.

—Ahhh, Vamos Kurosaki, necesitas más coraje.- se decía el naranjito a si mismo.- Pero es que todas esas ideas han sido un poco… inadecuadas.- su rostro parecía contorsionarse al recordarlo, pasaba de un rojo ligero a uno intenso y luego una palidez total.

*Flash Back*

Ding-dong-dinggg-dongg

—¡Ya vaaaan! Llegaré tarde a la escuela, no alcanzaré a toparme con esa chicas de…- el castaño y delgado chico abrió la puerta, sorprendiéndose un poco al verle.- ¡Ichiiigoooo!.- graznó abriendo los brazos, a lo que el aludido respondió con un golpe.

—Hey, Keigo ¿Vas de salida?

—Sí, a la escuela como todos los días, deberías pasar por la calle de "Kiriko's" hay unas meseras nuevas que…

—Oye Keigo, quería preguntarte algo.- dijo un poco incomodo.-

—¿Qué es? Debe ser importante para que se haya tomado la molestia de venir hasta mi casa, me pregunto si tendrá que ver con todo eso de la sociedad de almas.

—Es, bueno, ¿Quieres un café?

El castaño tomó su chaqueta de la escuela, gritó a su hermana un "Onee-saaaan, me voy" y cerró la puerta. Ambos chicos bajaron y en un par de minutos se encontraban en la entrada del "Kiriko's coffe" un café sin temática pero, según Keigo, con unas meseras de 10.

El shinigami sustito eligió una mesa hasta el rincón, casi no había clientes en el local y ese era el sitio más alejado de las pocas personas que se encontraban en él.

—Viste Ichigo, la rubia ahhh ¡Es hermosa! Ayer que pasé a…- miró a su amigo que lucía muy ansioso y detuvo su relato.- Bueno, ¿Qué querías preguntarme?

Al decir esto, el pelinaranjo se sobresaltó un poco y dudó si decirle o no, comenzaba a parecerle una mala idea, después miró la cara de seriedad con que Asano Keigo le miraba y decidió arriesgarse… un poco.

—Pues, un amigo me pidió un consejo y pues yo no tengo idea de que decirle…- había repasado las palabras de modo que al decirlas le creyesen, ni de coña decía que era él quien necesitaba ayuda con eso.- Así que pensé que quizá tú podrías ayudarme.

—¿Un amigo? ¿No serás tú?.- preguntó suspicaz su acompañante.-

—¡C-claro que no!.- su rostro se tiñó de un naranja rosáceo, pero afortunadamente Asano no lo notó.- Olvídalo, de todos modos ya no me parece buena idea pedir tu ayuda.

—Oh, vamos Ichigo, puedes contármelo.- Una mueca de emoción surco en su cara, su amigo le pedía ayuda y eso no pasaba todos los días.

El sustituto dudó de nuevo.

—umm bien.- accedió.- Mi amigo tiene una amiga, yo no la conozco ni nada, bueno el caso es que ellos dos hicieron una apuesta de resistencia, si ella no logra algo en una semana pierde y si lo logra gana, obviamente.

—Aja, entiendo ¿Qué apostaron?

—Ese es el asunto.- Ichigo se rascó la cabeza algo nervioso y dudando nuevamente de si era o no una buena idea.- Aún no han quedado en nada, él no sabe que le pedirá ella, pero ese no es el problema.

—¿Entonces?

—Él no sabe qué pedirle si gana.

El enamoradizo de su amigo se quedó un par de segundos pensando y se levantó de golpe azotando sus manos contra la mesita del café.

—¡UN DESFILE DE LENCERÍA!

El kurosaki se puso morado de la vergüenza(?), mientras los demás clientes les miraban susurrando.

—¿Pero qué cojones te…- una venita saltaba de la sien del pelinaranjo y el mismo tono coral de antes pasaba por sus mejillas y sobre su nariz.

—Piensalo, Ichigo, la bellísima Kuchiki-san e Inoue-chan, en ropa interior con encajes.- decía mientras tocaba sus mejillas rojas y cerraba los ojos imaginando la peculiar escena de las dos chicas mirándole con pequeñas prendas transparentes y miradas y sonrisas que pasaban de tímidas y tiernas a unas totalmente lascivas.- Puedes aprovechar esta oportunidad y hacer que hagan lo que tu quier…

Tuvo que parar su imaginación al sentir un fuerte golpe en la mandíbula por parte de su malhumorado amigo, quien dejando unos cuantos yens en la mesa salía del recinto sujetando su nariz tratando de contener una inminente hemorragia ocasionada por imaginar a sus compañeras en una situación, si bien no tan perversa como la de keigo, bastante similar.

Caminó un rato sin rumbo, hasta que por cosa de su inconsciente llegó a la tienda de Urahara.

No Ichigo, no pensarás… este vejete es igual o incluso peor que Keigo, no puedes…

…—Y bueno, no sabe que pedirle si él gana.- Se sentía estúpido ante la mirada seria del rubio claro, la escena se le hacía algo familiar.

—Un caso bastante peculiar, las apuestas suelen ser al revés, primero piensas en lo que quieres obtener y después en cómo.

—Sí, bueno, yo no sé que ped, ¡Qué contestarle!, no soy muy…- el sombrerero le interrumpió, sonriendo perversamente bajo la sombra de su sombrero.

—Dime Kurosaki-san, has pensado en tener tu propia esclava sex..

—¡A la mierda esto!.- y más rojo que un tomate salió a paso de shumpo de la tienda.- ¿Qué carajo pasaba con ellos? ¿Qué carajo pasaba con él?

*Fin del Flash Back*

—¿Qué demonios estaba pensando cuando fui a pedirles ayuda a esos dos? Pero el colmo ha sido cuando…

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Clase 3-Instituto Karakura

Un chico delgado se encontraba frente a los alumnos de su clase, explicaba algunas cosas acerca de un evento que se llevaría a cabo el viernes a la noche.

—Bien, si no queda ninguna pregunta pasaré al siguien…

—Oi, Ishida-Kaichou, dónde podremos comprar las entradas.- preguntó la ya conocida chica de colitas.

—Cómo dije hace un momento, Miyuki-san de la clase 1-C será la encargada de venderlas durante la semana, así mismo pueden adquirirlas el día del evento ya que…

—Y si se supone que es un evento únicamente para los de último curso por qué las de nuevo ingreso venderán las entradas y recibirán tickets.

—Como también dije hace un momento.- El delegado comenzaba a impacientarse.- se ha delegado a algunos estudiantes de grados menores para que colaboren con esto, no creo que a alguno de ustedes les agrade la idea de quedarse afuera recogiendo entradas, o sirviendo bebidas, o ayudando con las proyecciones o acomodando los micrófonos.

—Oh tiene razón Ishida-san!.- comentó una chica de lentes.- siempre piensa en todo.

—Espero que hayan contratado a nenas moe.- dijo un chico con corte hongo a su compañero mientras ponía una cara extraña.- y no alguna fea como Yumi Kazo de la clase 2-D

—Cuando te parezcas a Daisuke Aka* ya podrás tener a una chica como Mayuco*, mientras confórmate con lo que hay.

—Oye Sazu, cómo que "Confórmate" ¡No somos feas!.- contesto una chica alta y voluptuosa.

—Guarden silencio.- Habló el chico Uryu con un tono de voz autoritario, dejando de piedra a sus compañeros.- Por favor.

Todos estáticos se limitaron a mirar al delegado en silencio, éste continuó.

—Pasando a otro tema, esta semana se incorporó con nosotros un nuevo alumno.

—Kyaaaa! Seguro habla de kuch.- Ishida miró a la pequeña colegiala, la cual se escurrió de nuevo en su lugar, intimidada.

—Como les decía, es posible que su estadía no sea muy larga, pero de momento estará con nosotros en clase. Por favor denle la bienvenida a nuestro nuevo compañero, Kuchiki Soujun-kun.

Un poco nerviosa, la pequeña shinigami, se acercó con paso lento, se inclinó levemente ante sus compañeros y dijo:

—Ohayou gosai masen, mi nombre es Kuchiki Soujun, es un placer conocerles.- una vez dicho esto se escurrió hasta su ya conocido lugar, junto al asiento vació de su amigo Kurosaki.

Ishida se acercó a él/ella, y le dijo:

—Muy bien, espero que continúe adecuándose al instituto y sus compañeros, debo volver a la sala de delegados, mucha suerte, Kuchiki-san.

Ella se quedó algo confundida, la había llamado Kuchiki-san, ¿Se refería a ella de esa forma por el sufijo y quería decirle señor o la había reconocido?, la idea anduvo rondando en su cabeza pero se vio interrumpida al ser rodeada por todos sus compañeros quienes le hacían miles de preguntas a la vez.

—Oi, Kuchiki-kun ¿De dónde eres?.- preguntó una chica alta.

—Yo…

—¿Tienes novia?.- se apresuró en preguntar la chica de colitas.

—No, yo no ten…

—¿Quieres una?.- dijo la misma chica guiñándole el ojo y cogiéndole de la corbata juguetonamente.

—No realmente.- dijo ella haciendo su cuerpo hacia atrás bastante nerviosa y con miedo, realmente estaba asustada.

—Oye, ese nombre tuyo, Kuchiki, no es muy común, ¿Eres pariente de Kuchiki-san?.- hablo ahora un chico alto, de complexión fornida, pero no exagerada, cabello negro, tez clara y rasgos un poco finos.- Te le pareces mucho, todos concordamos en eso, además comparten el mismo apellido, dinos, ¿Son parientes?

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Patio trasero, Instituto Karakura.

—Esos dos están realmente locos, y más loco estoy yo por pedirles consejo, sobre todo conociendo como son de ¡Aaahh! Nunca encontraré algo bueno y que no me haga quedar como un pervertido.- de repente su cara se puso tensa y empalideció un poco.- Ni siquiera la idea de Inoue.

*Flash Back*

—Umm ¿De qué se trata, Kurosaki-kun?

—P-pues verás, t-tengo un amigo que hizo una apuesta con una amiga suya, y bueno él, é-el no sabe que pedirle si él gana y me ha pedido ayuda a mi pero yo realmente no tengo ni idea.

—Joo.- musitó la chiquilla con tono infantil.- está difícil.- puso su dedo índice en su barbilla e hizo mueca de pensar mientras inflaba los cachetes.- ¿Ella es linda?

—e-eh? ¿A qué te refieres?

—Sí, a que si ella es bonita, ¿Le gusta?

—Emm, no estoy seguro, creo que sí. Definitivamente sí, ambas.- ¿Por qué?

—Pues ya sabes, puede decirle que haga algo agradable para él.- dijo guiñándole un ojo.- si le gusta cualquier cosa agradable estará bien, podría proponerle casarse con él y escapar juntos a México y vivir comiendo tacos de nopales y jalea de cacahuate.- decía mientras escurría un poco de baba de su boquita al imaginar tan "suculento" platillo.- Pero si no le agrada podría hacer que haga algo cruel bwajaja.- comenzó a reír en un intento de sonar macabra.- hacer que coma grillos o qué use un sostén de tarántulas.- se abrazó a si misma imaginando la extraña prenda y tembló poquito.- o puede dejarla en una mazmorra sucia y darle de latigazos mientras…

—E-etto, Inoue yo no creo que eso sea muy buena idea.- decía él mientras le escurría una gotita.- ¿A qué te refieres con "algo agradable para él"?.- tragó saliva nervioso.

—Umm me pregunto qué será. No conozco a tu amigo Kurosaki-kun.- sonrió.- pero si le gusta esa chica, si real real realmente le gusta, podría aprovechar para que esa apuesta le ayude a mostrarle sus sentimientos.- le miró con ojos enternecidos y demostrando ensoñación, él sonrió levemente ante su comentario.- Ojala yo hubiese hecho una apuesta con kurosaki-kun.- dijo esto último en tono bajo, más para si misma que para él, haciendo una mueca.

—¿Dijiste algo?

—Ahhh no, nada, nada.- agitaba sus brazos frente a ella en señal de necgación.- Kurosaki-kun me encantaría seguir charlando contigo, Vaya que me encantaría seguir aquí contigo Pero debo volver a la escuela, tengo un examen de algebra con Moshi-sensei, ella es algo estricta.

—Entiendo Inoue, emm gracias por tu consejo.

—Nos vemos luego, Kuroski-kun.

Salió corriendo en dirección a la escuela, después regresó recordando que le sería más fácil y rápido llegar en un autobús urbano, y era la razón por la que se encontraba en la parada de autobús, sonrió por última vez al chico y abordó el urbano que recién llegaba, dejando solo al muchacho.

*Fin del Flash back*

—Sí lo pienso bien lo que dijo Inoue no es tan descabellado, claro, si quito todas esas cosas extrañas de contexto.- Se levantó del suelo y echó a andar en dirección al edificio de la escuela.- sigo sin tener idea de cómo.

Llegó al salón y entró, no había profesor sólo un montón de estudiantes reunidos en circulo entorno a su lugar.

Rukia.- pensó, mientras imágenes de un sacrificio satánico surcaban su mente por un momento fugaz.

—E-eh, sí, somos emm, primos ¡Sí! Primos.- el nuevo Kuchiki estaba nervioso y se notaba, el chico que la interrogó le miró suspicaz.

—¿Quién es primo de quién?.- La voz del Kurosaki se escuchó por toda el aula, mientras se hacía paso entre la pequeña multitud.

—Ichigo.- habló ahora la shinigami, al tiempo que se ponía en píe.- ¿Dónde estuviste toda la mañana?

Un montón de voces se escucharon murmurando, el pelinegro miraba atento a la pareja que, a su parecer, iniciaría una discusión.

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Hola, cada vez que esto pasa me siento una persona terriblemente irresponsable (Sí, me refiero a cuando me atraso en actualizar) pero siempre terminó teniendo problemas que me impiden hacerlo (actualizar) Pero no es excusa, he aquí el capitulo 11.

Algunos datos, qué quizá ya sepan:

*Aka Daisuke y Mayako son integrantes de Aqua Timez.

*El sufijo "San" no es sólo para chicas, hace referencia a señor, señora, señorita…

*El nombre que eligió Rukia, Soujun… Sí saben quién es, ¿Cierto?

Quien sepa de quién se trata hágamelo saber, yo sé que saben.

Nos leemos pronto. Quejas o sugerencias, son bienvenidas.