Capítulo II. Una vida juntos.
Sasuke abrió los ojos, cuando los primeros rayos de luz del amanecer se filtraron a través de su ventana. Se levantó, removiendo las sábanas sobre sí, percibiendo un aroma delicioso en ésa habitación.
"Oh, ya estás despierto." Sasuke observó hacia la persona que le llamaba, encontrándose con una mujer. Ah, cierto. Ella estaba aquí, pensó recordando los eventos de la noche anterior. Después de que se presentarán Sasuke había decidido que sería mejor descansar para aclarar todo al día siguiente. Le había permitido dormir en su cama, la cual estaba en la pequeña segunda planta de la cabaña, a pesar de sus protestas. "Siéntate, ya está casi listo."
"No tenías por qué hacerlo." Dijo él, mientras se levantaba del asiento de madera sobre el que estaba, que había sido algo incómodo para dormir, y retiraba las sábanas sobre sí, para doblarlas consecuentemente. "Vengo en un momento." Se colocó otra manta más pequeña sobre los hombros, de color gris y salió de la cabaña.
Fuera, había un pozo, el cual era rodeado por algunos cultivos que vendía y que también servían para alimentarse así mismo. Cuando deseaba consumir algo proveniente de un animal, tenía que ir al pueblo. Sin embargo, en la parte trasera, dónde había un cuarto dónde guardaba sus herramientas de labranza, había un caballo color negro que su madre había traído un día para él.
Sasuke sacó algo de agua del pozo y se lavó el rostro y enjuagó su boca. No le importó el frío, de hecho lo prefería al calor. Regresó a la cabaña y se encontró con Sakura sirviendo un estofado de verduras en platos de barro. Se sentó frente a ella.
"Gracias." Dijo de pronto, sorprendiendo a Sakura y provocando que ésta sonriera alegremente. Comenzaron a comer silenciosamente.
Era extraño para él tener a alguien en casa que no fuera Mikoto, era un sentimiento algo incómodo pero de cierto modo no tan desagradable. Al terminar, ella se dispuso a recoger los platos, pero él le detuvo.
"Espera. Creo que sería bueno que habláramos ahora." Sakura asintió y se sentó frente a él, colocando nerviosamente sus manos en sus rodillas y observándole con curiosidad.
Él la observó. A su parecer, ella era más joven que él, estaba un poco desarreglada pero podía adjudicarlo a su despertar y a su huída el día anterior. Su cabello era largo hasta la cintura y de un peculiar color rosa. Sus ojos eran esmeraldas y grandes. Su vestimenta era un simple vestido largo y rosado, que ligeramente descubría parte de su pecho y sus hombros. En su cuello, colgaba un collar con un dije en forma de flor rosa de cinco pétalos puntiagudos y en el centro, era más oscuro.
"Creo que sé qué quieres saber. Permite que te cuente mi historia."
"Bien." Él cruzó los brazos frente a su pecho.
"Aquellos hombres que me perseguían anoche eran mis hermanos." Frunció el ceño. "Nuestros padres murieron hace dos años y como estamos atravesando por problemas económicos, ellos decidieron venderme a un hombre rico que conocieron en una taberna cuando pasábamos cerca de este pueblo. Al principio no lo sabía pero cuando me encerraron junto con él en una habitación y rápidamente percibí las intenciones de ése hombre de deshonrarme, le golpeé con un florero y escapé por la ventana." Sollozó.
"¿Tienes algún lugar a dónde ir?"
"Mi madre tenía una hermana llamada Tsunade en un pueblo llamado Rose, pero no sé si esté dispuesta a recibirme." Sakura se limpió las lágrimas y se quedaron pensativas. "Creo que no había una buena relación entre ellas. Pero me las arreglaré." Subió su puño, en un gesto que denotaba decisión. "Seguiré adelante sin importar qué."
Sasuke cerró los ojos y sonrió arrogantemente ante su cambiante humor.
"Hn. Creo que puedes quedarte un tiempo. No debes tener nada de dinero ni carruaje o animales para transportarte." Ella lo observó sorprendido. "¿Necesitas trabajo, no?" Asintió. "Y yo necesito alguien que me ayude con mis cultivos."
"¡¿De verdad?!" Ella exclamó emocionada y sostuvo sus manos. "Muchísimas gracias." Sasuke frunció el ceño ante el contacto. Sakura se ruborizó y liberó sus manos. "Lo siento."
Más tarde, Sakura lavó los platos mientras que Sasuke terminaba de cuidar al caballo. Sakura entró al cuarto y lo observó mientras pasaba un cepillo por el lomo del caballo. Sasuke volteó hacia dónde estaba ella.
"Es muy bonito." Dijo ella mientras los observaba con curiosidad.
"¿Te gustan los animales?"
"Sinceramente, no tengo un favorito en particular." Sasuke siguió con su tarea. "Aunque les temo un poco." Confesó, acercándose un poco. El caballo movió la cola y Sakura dio un respingo.
"No va a hacerte daño." Sasuke le hizo un gesto con la mano para que se acercara. Sakura rechazó su gesto moviendo la cabeza de un lado a otro.
"No, así está bien." Sasuke estiró su mano hacia ella y Sakura lo observó con cierta desconfianza.
"Su nombre es Sharingan. No te lastimará, acércate." Sakura dudó nuevamente pero sujetó su mano. Sasuke pudo percibir lo asustada que estaba, ya que sentía como sus manos temblaban en la suya. "Nunca te coloques detrás de un caballo, trata de permanecer a un lado. Toca su lomo con suavidad." Sasuke colocó la mano de ella en el lomo del caballo, la joven comenzó a mover su mano.
"Es muy suave." Sasuke no dijo nada y asintió. El fue retirando su mano poco a poco de la de ella y la dejó que por sí misma siguiera. "Nunca he montado un caballo." Se alejó un poco.
"Te enseñaré. Ahora mismo debemos de revisar los cultivos."
"¡Sí!" Sasuke tomó la correa del caballo y salieron de ahí. Sakura se quedó algo atrás, porque se sentía asustada. Él ató el caballo al sauce y dejo que la cuerda quedara lo suficiente larga para que éste pudiera moverse fácilmente.
Sasuke y Sakura se alejaron un poco de ahí, llegando hacia dónde iniciaban los cultivos, aún sólo podía distinguir algunas líneas en la tierra. Sasuke descendió de la colina y se acerco a la primer hilera, movió un poco la tierra.
"¿Qué buscas exactamente?"
"Si ya hay algún brote ó alguna hierba." Sasuke descubrió una pequeña plantita en un hueco en la tierra.
"¡Aquí está!" Sakura se emocionó, "¿De qué es?"
"Trigo."
"Oh. ¿Y en qué quieres que te ayude?" Sasuke le explicó que tenían que buscar hierbas malas, plagas, etc. Le explicó que el trabajo más pesado sería una vez que crecieran. Después de una hora, ambos regresaron a dónde estaba el sauce. Sasuke metió al caballo en su lugar y regresaron a casa.
Sakura se preguntaba cómo era posible que Sasuke, a pesar de trabajar en el campo tenía una piel extremadamente blanca. Ella se sentía sudorosa y la piel le ardía un poco, no estaba tan acostumbrada a exponerse al sol, pensó que ojalá esto no fuera un impedimento para ahora que el trabajo fuese más duro.
Al volver a la cabaña, Sakura observó a Sasuke quitarse la camisa azul sobre sus hombros, dejando su pecho desnudo. El Uchiha la lanzó hacia un bulto de ropa en una orilla.
"Eh…" Desvió la vista, totalmente ruborizada, Sasuke simplemente se giró hacia ella sin pensar en el efecto que estaba provocando. "Quisiera lavar mis ropas y asearme, puedo lavar las tuyas."
"No es necesa…" Sin embargo, Sakura pasó por su lado rápidamente y tomó la ropa. Después salió dejando al joven algo desconcertado ante su actitud. Aún así volvió a ponerse la camisa y salió para dirigirse a dónde estaba su caballo.
Sakura sacó agua del lago y se retiró el vestido rosa y el corsé más oscuro, quedándose simplemente en un camisón blanco. Lavó sobre una piedra la ropa y después la dejó secarse. Se sentó a la orilla de la colina y suspiró, no sin antes asegurarse de que el viento no pudiese llevarse la ropa. En la colina, se sentó a las raíces del sauce mientras observaba hacia el lago, dejando que el aire fresco agitara sus cabellos. Decidió entonces, levantarse y asearse con agua del pozo, Sasuke le había indicado dónde hacerlo, en una zona al aire libre delimitada sólo por unas paredes de madera y que no tenía una puerta.
A pesar de lo incómodo, Sakura agradeció que la fría agua relajara sus músculos y no quiso pensar en nada de lo malo que le había pasado últimamente. Al terminar, secó su cuerpo y se colocó el camisón de nuevo, no tenía más ropa que ponerse, tendría que esperar. Regresó al sauce y se quedó dormida.
Despertó y se dio cuenta de que ya era algo tarde, ya que estaba oscureciendo. Regresó por la ropa y observó que no estaba, Sakura se asustó ante esto y se encontró en la cama dónde había pasado la noche.
"¡Sasuke!" Entró rápidamente y observó al pelinegro sentado junto a la chimenea leyendo, mientras que asaba algo de carne. "Oye…"
"Ya está dentro." Dijo él de pronto.
"Oh, gracias." Respondió y de pronto notó un vestido sobre una de las sillas de madera. Era de color azul cielo y blanco, era muy hermoso, se acercó a él.
"Es para ti." Sasuke rompió el silencio y su concentración. "Mientras dormías fui al pueblo. No tenía ropa de mujer."
"¿Compraste ropa para mí?" Preguntó mientras lo tomaba en sus manos, Sakura sollozó de pronto. Sasuke se desconcertó ante esto. ¿Había hecho algo malo? Se levantó de su asiento, dejando el libro en la silla cuando sintió que Sakura lo abrazaba por la cintura de pronto. "Ni siquiera me conoces… pero aún así…" La escuchó sollozar. Se sintió algo incómodo, vivía solo y no estaba muy acostumbrado al contacto humano y menos cuando se trata de una chica. Sasuke suspiró y acarició sus cabellos.
"Tranquila." Reconfortar a alguien tampoco era uno de sus fuertes. Sasuke la dejó llorar y desahogarse, sin decir una palabra más, dejando que ella olvidará todas sus malas experiencias y preocupaciones.
"Lo siento." Se separó después de un rato y se retiró las lágrimas. "Gracias." Sonrió ésta vez, Sasuke simplemente observó su rostro. "Algún día pagaré todo esto. Lo juro."
"Hn., molesta." Sasuke sonrió arrogantemente y regresó a donde estaba la comida para retirar la que por el tiempo ya se había quemado un poco. Después de eso, se dispusieron a comer.
Gracias por sus comments.
Espero les haya gustado el capítulo y por favor sigan comentando.
También si pueden pasar por mis otros fics se los agradaceré mucho.
(Y espero que Kishi nos de un momento SasuSaku en el manga pronto) xD