Nota de autora: Después de más de dos años de Hiatus, no tengo ni cara que poner.

Sin nada más que agregar, ¡Disfruten la lectura!


.::Ella Sonríe ::.

Y sin embargo, por mucho que lo pienso se que eres lo que busco.

Algo se veía volar por sobre las casas de la ciudad, con una velocidad realmente sorprendente para una persona normal (bueno, realmente para cualquier persona en la ciudad). De cerca, podía observarse un apuesto chico con una gran capa roja y un antifaz cubriendo sus ojos. Sus pupilas azules irradiaban una alegría sincera mientras volaba hacia un lugar, hasta ahora totalmente desconocido. La verdad con él las cosas eran siempre improvisadas, hasta hace poco. Giró un poco la cabeza para observar el cielo…

La luna brilla

Pasaba por el lugar más alejado de la ciudad cuando comenzó a bajar la velocidad lentamente, solo una pequeña casa de aspecto elegante se encontraba en ese solitario lugar al que había llegado.

Una residencia que le servía de hogar y refugio a cierta chica peli morada con el obvio deseo de estar lejos de las demás personas, no porque ella quisiera realmente, sino por el enorme miedo a dañarlas gracias a sus enfermedades mentales.

Una triste chica a la que nadie visitaba, más que él, Splendid. Su único amigo además de .

El superhéroe sonrió al ver aquel sitio tan conocido para él, justo como la última vez que lo visito, sin ningún cambio. La verdad es que le gustaba que las cosas se quedaran como en los recuerdos, era mejor eso a que nunca tuvieran una forma exacta que guardar en la memoria.

Sus manos comienzan a sudar, pero esta tan contento que en vez de huir sonríe tan ampliamente como puede.

Es la hora de buscar su silueta

Pensó en eso hasta que estuvo justo en frente del lugar, jalo aire y chiflo tan fuerte como pudo, con la seguridad de que ella escucharía. Era un aviso, un mensaje que solo servía para ellos dos.

Con complacencia pudo ver el momento exacto en el que las luces de la sala se apagaron una por una, hasta que solo pudo divisarse la ultima encendida, de la única habitación que había allí, justo en el segundo piso. Esta ultima también se apago, esa era la señal.

Quisiera verte

Splendid mira hacia todos lados con sospecha, como queriéndose cerciorar de que nadie lo estuviera siguiendo u observando o algo así. Quien sabe, cosas de superhéroes.

Cuando termina con eso, una misteriosa sonrisa satisfecha se asoma nuevamente en su rostro y continúa con el plan. Vuela en silencio hasta dar con la ventana abierta de la chica, porque sabe que ella lo espera. Porque sabe que ella también lo extrañó.

Oye ven… a buscarme

Apenas vislumbra su sombra y las palabras no tardan en surgir de sus labios.

Hoy llegaste temprano.

No podía esperar a verte, ayer no pude despedirme después de que me echara afuera por la ventana.

Lo siento…

No te preocupes.

Splendid le sonríe dulcemente y ella no puede evitar enrojecer. Levanta un poco la mirada, observándolo. Sus labios, ama su sonrisa. Ella sabe que esos pensamientos solo desarmaran aun más su cordura (que de por sí es muy poca).

Y es tan raro encontrarse de ese modo. Se siente tan cómodo, intimo, incluso, casi romántico. Cuando el chico toma asiento en la enorme ventana abierta, la ve mucho mejor, iluminada por la luz que entra gracias a la luna. Ella ya no puede contenerse y toca su mano, se alegra tanto de que él siga acudiendo a esas citas.

Y ahí está él como siempre, porque casi parece ser que lo estuviste buscando con la mirada otra vez

Él sonríe como siempre. Ella abre los ojos, curiosa de lo que pueda pasar esta vez, y aunque no lo desee mucho, suelta su mano con delicadeza. Sabe que no se irá hasta mucho después, y eso la tranquiliza.

Él le relata muchas cosas haciendo ademanes exagerados y soltando risas de vez en cuando. Unas historias son graciosas, otras incluso contienen demasiada fantasía para ser verdaderas, pero todas las guarda en su memoria. No quiere olvidar nada que provenga de él.

Entonces, por muy extraño que parezca, Splendid nota algo en la chica. Sus mejillas sonrosadas, sus labios entreabiertos, la respiración acelerada, los ojos brillantes y la mirada de absoluta concentración hacia su persona. Lammy quiere besarlo, y él ni siquiera se da una idea.

Pero sin embargo, ella no le es para nada indiferente, y en un acto algo osado toca las mejillas de la chica, acunando su rostro y le sonríe. Ella se pierde en el momento, si tan solo supiera…

Cierra los ojos y guarda el momento en que la tocas

El chico de antifaz se acerca lentamente a ella algo nervioso, sus ojos se clavan en los del otro y no hay palabras para describir la sensación en sus corazones.

La chica siente como esa cálida y grande mano abandona su mejilla, acomoda un bucle de cabello detrás de su oreja y ella enrojece. La mano no vuelve a su mejilla y ella abre los ojos con algo de miedo.

Es casi como si despertara. Ahora solo siente una fuerte opresión en el pecho

No desea alejarse, esta vez no quiere que todo termine así. Se concentra en la sensación que invadió su cuerpo al ser tocada de esa forma tan dulce, es simplemente… maravilloso.

Pero no todo es tan bueno como parece, sus miedos siempre están ahí torturándola, ¿Por qué Splendid la está tocando de esa forma tan… dulce? No es que no le guste pero, ¿Él realmente la quiere? ¿Por qué no se lo dice si es así? No desea pensar en eso, porque duele, duele mucho. Una vez escucho que el corazón solo sirve para bombear sangre, y que es incapaz de sentir emociones, pero entonces, que alguien le explicara, ¿Por qué el suyo latía tan rápido con un simple roce de pieles?, ¿Y qué pasaba cuando su pecho se oprimía de esa forma tan dolorosa con solo pensar en que él no compartía los mismos sentimientos por ella? Que alguien le explicara por favor, porque se sentía morir cuando lo veía sonreír con otra chica que no fuera ella.

"Se llama amor" le dijo una vez una mujer de cabello azul adornado con una flor cuando la encontró murmurando sola, en una de las pocas salidas que hacía al supermercado.

Con eso en mente, se dijo que ya no importaba lo demás, y sin pensarlo, Lammy abre sus brazos y lo atrapa.

Quisiera abrazarte

Alguien tiene que dar el siguiente paso, y para sorpresa de ambos, es el chico quien lo hace. La acerca más y comienza a acariciar su espalda, enredando con suavidad algunos mechones de cabello morados. Es tan satisfactorio que la chica casi ronronea.

Para ella es simplemente reconfortante estar entre sus brazos.

Para él es lo mejor que le ha pasado en años.

Se aprietan un poco más, buscando un refugio. Splendid está más que nervioso ante la nueva sensación de tener a alguien abrazándolo tan dulcemente, con esas intenciones, y aunque no lo desee solo puede pensar una cosa.

Quisiera… besarte

No lo repasa demasiado, pues sabe que el coraje se esfumara tan rápido como vino, y en un movimiento rápido, lo hace…

Sus labios se tocan lentamente. Nadie dice nada, pero el contacto se siente tan bien, tan correcto.

Se separan con algo de bochorno y un suspiro divertido, las mejillas les hormiguean causándoles las ya tan conocidas mariposas en el estomago. Finalmente ella también sonríe.

Pero... ¿Qué son ahora?


Nota de autora: La siguiente pareja se trata de:

"Handy y Petunia"

Se despide:

- Saori Bell Lawliet Black -