¡Hola! Bueno antes que nada quiero agradecerles a todos por su apoyo con Aventura con mi Jefe! Este es mi segundo Fic y espero tener el mismo apoyo, esta basado en un manga One-shot que lei hace tiempo, tendrá muchos cambio no será completamente igual xD bueno no dire el nombre hasta que termine el fic hahahaha! Espero que les guste :D
Capitulo 1:
Las risas se podían escuchar por todo el patio de la casa, dos niñas pelinegras corrían sin parar detrás del pequeño animal que les seguía el juego.
-Ven conmigo pequeño Kon- le grito una de ellas al perrito
El animal miro divertido a la niña y la rodeo corriendo directamente hasta la otra, la niña se agacho y tomo el cachorro en sus brazos.
-Lo siento Rukia- se disculpo su hermana riendo- parece que me eligió a mi-
-Sí, eso veo Hisana-
La familia Ishida era una de las más prestigiadas de toda la ciudad, Ryuken Ishida era el dueño de la mejor Clínica de todo Karakura, Su esposa Katagiri Ishida era una reconocida publicista, pero además de eso era una encantadora y tierna mujer que se dedicaba también a su familia, ambos adoraban a sus tres Hijos.
Uryu Ishida era el hermano mayor, un niño sumamente relajado y tranquilo, muy inteligente para orgullo de su padre, ya que aspiraba que su primogénito pudiera seguir sus pasos y heredar la clínica, el estaba más que feliz de seguir los pasos de su padre, lo respetaba e Idolatraba.
Hisana y Rukia Ishida eran las hermosas y alegres niñas que jugaban en el patio, eran el segundo embarazo del matrimonio Ishida, las gemelas eran 3 años menor que su hermano, eran idénticas en cuanto a la apariencia, en personalidad se distinguían fácilmente. Hisana era alegre, espontanea y extrovertida, muy al contrario de Rukia, la cual era más callada y prefería no destacar.
Rukia admiraba mucho a su hermana mayor, era una luz brillante que rodeaba todo lo que tocaba, podía ganarse a cualquier persona con solo conocerla un instante, Hisana era realmente adorable.
-¡Niñas vengan a comer!-
Escucharon el llamado de su madre desde la puerta que daba al patio donde jugaban, Hisana bajo al cachorro tomo la mano de Rukia y ambas salieron corriendo hasta donde estaba su madre.
Al llegar encontraron a su padre leyendo el periódico y a su madre acomodando los platos, la puerta de la entrada se abrió avisándole a los presentes que el hijo mayor había llegado.
-Ya llegue mama- grito el niño de unos 13 años
-Estamos en el comedor- respondió su madre
Uryu entro acompañado de un niño de singular cabello naranja y hermosos ojos ámbar que tenía su misma edad, Rukia se sonrojo al ver que el niño sonreía mirándola, Hisana se bajo de su asiento y tomo el brazo del niño.
-Me alegra verte Ichigo- dijo sonriendo
-A mi también Hisana- dijo devolviéndole la sonrisa
-Ya estamos a punto de comer- decía Katagiri mientras serbia un plato mas- siéntate Ichigo-
-Muchas Gracias- dijo sentándose junto a su mejor amigo
Hisana se sentó también conversando alegremente con Ichigo, Uryu le comentaba a su padre lo bien que le había ido en la escuela mientras él lo escuchaba atentamente.
Rukia observaba a Hisana conversar alegremente con Ichigo, había descubierto hacia más de 1 año que estaba enamorada de él, pero… no creía que Ichigo sintiera lo mismo, tal vez si fuera como Hisana, el podría fijarse en ella.
Después de la comida Uryu e Ichigo se fueron a jugar con su consola de video juegos, Rukia suspiro, si ella fuera más vivas como su hermana ella podría lograr que Ichigo se fijara en ella.
Su madre las llamo pidiéndoles que fueran a recoger su cuarto, Rukia recordó que había dejado regado su cuaderno de dibujos y sus colores, fue corriendo hasta el cuarto en donde Hisana ya estaba acomodando sus juguetes, Rukia tomo su cuaderno y sus colores para meterlos en su cajón, sus papeles de origami también estaban regados así que los acomodo.
Pensó en Ichigo, ¿Podría cambiar? No estaba segura, quizás si se acercaba a él, si interactuaba mas con el podría hacer que el supiera que ella existía y que estaba enamorada de él.
¿Podría lograrlo?
10 años después…
Suspiro por tercera vez sentada en la banca del parque, miraba a los niños jugar y columpiarse, desvió la mirada al ver a una pareja ir tomados de la mano y reírse, el nudo en la garganta que había tenido desde hace tres semanas volvió a aparecer, en ese momento se odio a si misma por ser tan débil.
Se acomodo un largo mechón detrás de la oreja que había sido desacomodado por el viento, una pequeña risa se le escapo en ese momento, es demasiado estúpido, se dijo Rukia, había dejado crecer su cabello para no parecerse tanto a Hisana, se había acercado más a Ichigo para que él se fijara en ella y solo en ella, pero lo único que había logrado era que el la viera como una hermanita… muy al contrario que Hisana, se dijo recordando lo que había pasado hace tres semanas
Flash Back
-¡Rukia!, ¡Rukia!- llamaba Hisana emocionada a su hermana
-Aquí estoy Hisana- respondió la menor saliendo de la habitación a su encuentro
No le dio tiempo de reaccionar, cuando sintió como su hermana se abalanzaba encima de ella abrazándola con fuerza.
-¿Estás loca? Casi nos caemos- dijo sonriendo ante la emoción de su gemela
-¡Es que estoy tan feliz Rukia! No tienes idea-
-Bueno… dime qué es eso que te tiene tan feliz- pidió la menor curiosa
-Es Ichigo- la sonrisa de Rukia desapareció al oír ese nombre- Ichigo me pidió matrimonio Rukia-
Hisana salto de la emoción y volvió a abrazar a su hermana la cual estaba paralizada, no podía dejar de escuchar en su mente las palabras "Ichigo me pidió matrimonio Rukia".
Una lágrima descendió por su mejilla, todas sus esperanzas se habían quebrado junto a su corazón, había sido tan estúpida al albergar un sentimiento que nunca podría ser correspondido. Hisana se separo de ella y vio las lágrimas en el rostro de su hermana.
-¿Por qué lloras Rukia?- pregunto preocupada
-Porque estoy muy feliz por ti- mintió
-Gracias hermanita… te adoro y quiero que seas la madrina de mi boda-
-Claro… estaría muy feliz- mintió de nuevo
La voz de Ryuken se escucho desde la planta baja avisando que ya estaba en casa.
-Voy a darle la noticia a papa, estoy seguro que estará más que feliz-
Rukia asintió y vio como su hermana bajaba feliz al encuentro con su padre, respiro hondo y se fue directamente al baño, tranco la puerta y se dejo caer pegando la espalda a la puerta, allí dejo correr las amargas lágrimas que estaban acumuladas.
Se iban a casar, su hermana se iba a casar con el hombre que ella amaba, le tenía envidia, lo reconocía, ella siempre era la escogida… pero ¿Cómo no iba a serlo? Ella era un rayo de luz, siempre tan alegre, tan viva… ¿Cómo no iba a ser ella la escogida?
Hundió su cabeza entre las piernas y comenzó a llorar, dejando salir el amargo llanto, le dolía como nunca pensó que lo haría
End Flash Back
Respiro hondo nuevamente para tratar de retener el llanto, definitivamente era una masoquista ¿Qué hacia allí? Debería de haber puesto una excusa, inventar que tenía algún compromiso, pero era tan difícil decirle que no.
El sonido del teléfono la saco de sus pensamientos, abrió la cartera y localizo el aparato que seguía sonando, vio el nombre de su hermano reflejado en la pantalla, suspiro y contesto.
-¿Dónde estás?- pregunto Uryu
-Hola hermanito que gusto en saludarte- le respondió Rukia
-A mi no me vengas con sarcasmos, mama me dijo que quedaste de verte con Ichigo ¿se puede saber para qué?-
-Me pidió que lo acompañara a comprar el anillo de compromiso de Hisana- dijo preparándose para la reacción de su hermano
-¡Eres una condenada Masoquista!, ¿Por qué te castigas así?-
Rukia suspiro, sabía que su hermano tenía razón, los únicos que sabían de sus sentimientos por Ichigo eran su madre y su hermano, su madre los conocía a los tres como la palma de su mano, ella sabía que algo no estaba bien en la actitud de Rukia e insistió hasta que ella se rindió y le confesó todo, y su hermano había escuchado una de las tantas conversaciones con su madre y no le quedo de otra que admitirlo.
-Estaré bien Uryu, el me lo pidió de favor- escucho a su hermano suspirar
-Eres muy buena Rukia, tal vez demasiado, dile que te traiga a la casa-
-De acuerdo- dijo colgando justo en el momento en que Ichigo llegaba
-¿Has esperado mucho?- pregunto sonriendo
Rukia negó con la cabeza por qué no confiaba en su propia voz, el corazón comenzó a latirle en el preciso momento en que él había hecho acto de presencia, los años le habían caído como anillo al dedo, su cuerpo tenía una musculatura delgada y atlética, era alto y guapo… muy guapo.
Rukia se reprendió una vez más, ¿cómo podía estar babeando por el novio de su hermana?, era una locura, el seria su cuñado en poco más de un mes, y ella tendría que aceptar que nada podía haber entre los dos.
-Gracias por acompañarme Rukia, no sé qué haría sin ti-
Rukia sonrió tímidamente, odiaba que la tratara con tanto cariño, no era eso lo que quería, ella quería que él la amara.
-No tienes porque agradecer, lo hago con mucho gusto, además necesitas una ayuda para esto-
-Bueno no te llame solo por eso-
-¿No?-
-Solo quería pasar un rato agradable con mi mejor amiga antes de que te vayas a Tokio a estudiar arte-
Rukia volvió a sonreír, dentro de 3 días se iba a Tokio a estudiar en la escuela de Artes más prestigiosa de todo Japón, solo se podía entrar por audición, y ella había podido obtener uno de los pocos cupos que daban cada año, era una oportunidad realmente única, y decidió aprovecharla, sabía que poner distancia era lo mejor que podía hacer.
-Estoy orgulloso de ti, es una oportunidad que no se repetirá, es bueno para tu futuro-
-Lo sé, Muchas Gracias Ichigo-
-Pero debes prometerme que estarás aquí para mi boda con tu hermana-
-Aquí estaré… la madrina no puede faltar- dijo fingiendo alegría
-Exacto… nos sentiríamos muy tristes sin ti-
Rukia no respondió, solo le dio una sonrisa, siguieron caminando hasta llegar a una joyería, Ichigo entro emocionado, sin embargo a Rukia le entraron unas ganas de salir corriendo, pero no lo haría, esto le serviría para convencerse de que Ichigo nunca seria para ella y que irse a Tokio era lo mejor para todos.
Tal vez cuando estuviera en Tokio y comenzara una nueva vida todo estaría mejor, podría concentrarse en las clases, en pintar que era su escape, conocería nuevas personas y en una de esas se enamoraría, así la próxima vez que viera a Ichigo solo lo vería como lo que era… Su cuñado.
-¡Rukia! ¿Pasa algo?-
Rukia lo miro de pie frente a las vitrinas que exhibían los hermosos anillos, se dio cuenta que se había quedado paralizada en la entrada, negó con la cabeza y sonrió hiendo hasta el.
-¿En qué puedo ayudarlos?- pregunto la encargada
-Quisiera ver los anillos de compromiso- le dijo Ichigo
-¡Que tierno! Ha traído a su novia a elegir el anillo- dijo la encargada ocasionando un sonrojo en Rukia
-¡No!, no… ella es mi Cuñada- se apresuro a corregir Ichigo, Rukia cambio el sonrojo por una mirada de tristeza
-¡Oh! Lo siento… vengan por aquí-
La encargada saco varias joyas hermosas, Rukia solo podía observar como se le iluminaban los ojos a Ichigo al ver los anillos, trago para tratar de deshacer el nudo que se le había formado en la garganta, suspiro tres veces para poder retener las lagrimas, ¡Tienes que ser fuerte!, le grito su yo interna.
-¿Qué opinas tu? ¿Cuál crees que es el mejor?-
Rukia observo los anillos encima del mostrador, todos eran hermosos y ella se hubiera conformado con cualquiera… pero no eran para ella, siguió observando hasta que pudo ver uno que estaba dentro del mostrador.
El anillo era de plata, era doble anillo adornado por diminutos diamantes, con uno mediano en el centro que parecía unir a los dos aros, ella lo miro y sonrió, ese era… se parecía tanto a su hermana, era sofisticado, hermoso y Brillaba, tal como ella, si tenía que describirla a ella y a su hermana definitivamente Hisana seria la luz y ella la oscuridad.
-Yo creo que este- dijo señalándolo encima del vidrio
Ichigo desvió la mirada a donde señalaba Rukia y vio el anillo, sonrió, era perfecto, agradecía al cielo que Rukia hubiera aceptado venir con él, hubiera estado perdido sin ella.
Le pidió a la encargada que lo sacara para poder observarlo, solo tuvo que verlo 5 segundos para estar seguro de que era el adecuado, después de pagar y que la encargada envolviera la cajita en regalo y lo metieran en una bolsa salieron de la tienda.
-Estoy Feliz de que hayas venido Rukia no se que hubiera hecho sin ti- dijo pasándole un brazo por los hombros y besando la coronilla de su cabeza
Rukia lucho por parecer tranquila pero su corazón estaba latiendo tan rápido que podía sentirlo retumbar en sus oídos.
-No fue nada, espero que a Hisana le guste- dijo
Ichigo lo quito el brazo y ella pudo respirar más tranquila
-Estoy seguro que le gustara, después de todo tu lo elegiste, es tu gemela- Rukia vio como se adelantaba unos pasos y luego lo siguió-¡Mi Vida está en su mejor momento! Ya tengo mi título de médico y comenzare a formar mi propia familia-
Rukia miro su espalda, era tan ancha, estaba segura que debía ser reconfortante estar en sus brazos, lo vio detenerse un momento para mirar la vitrina de una tienda, desvió la de ella para saber que había llamado su atención y pudo divisarlo, un maniquí que exhibía un hermoso vestido de novia.
-¡Estoy Feliz! No puedo esperar para ver a Hisana con su vestido de Novia-
Y allí estaba, solo eso había bastado para que ella se quebrara, no pudo seguir conteniendo las lágrimas que se habían acumulado en sus hermosos ojos, Su hermano tenia Razón era una condenada Masoquista. Ichigo la miro y se sorprendió al verla llorar
-¿Qué pasa Rukia?- pregunto preocupado-¿Estás bien? ¿Te duele algo?-
-No… estoy bien… solo, algo sentimental- dijo secándose las lagrimas- prométeme que cuidaras de mi hermana, y que van a ser muy felices-
-Te lo prometo Rukia- le dijo Ichigo quitando una lágrima de su mejilla con una caricia
Solo por un momento permitió perderse en sus ojos, sus hermosos ojos que en ese momento la miraban solo a ella. Pero el momento fue muy corto Ichigo desvío la mirada de nuevo hacia el vestido, de seguro pensando en Hisana.
Rukia Dio dos pasos distraída, quería alejarse de allí, ya era mucho para ella, todo lo que vino después fue confuso, Oyó al peli naranja gritar su nombre y sentir un fuerte empujón por su espalda, la joven callo dando dos vueltas y quedando inconsciente.
Ichigo la había visto dar pasos hacia atrás distraída, había llegado a la carretera justo cuando un carro venia a toda velocidad, sus instintos fueron los que lo guiaron, soltó la bolsa que tenía en la mano y corrió hasta ella quitándola de un empujón, no le dio tiempo de reaccionar cuando sintió el impacto del golpe en su cuerpo.
El impacto del choque del auto contra su cuerpo lo elevo hacia atrás ocasionado un fuerte golpe al caer en el pavimento de la carretera, algo de sangre se le escapo por la boca al momento del impacto, el rebote causo que el peli naranja le pegara la frente a la cera de la calle perdiendo la conciencia.
Escuchaba murmullos y el movimiento de algo halándole el brazo, trato de acostumbrarse a la luz al abrir los ojos, se sentía desorientada, al tratar de levantarse sintió un dolor punzante en la rodilla y en el brazo, ¿Qué le había pasado?
-¡Gracias a dios que despertó! Afortunadamente sus heridas son leves, ya viene la ambulancia-
¿Heridas leves? ¿Ambulancia?, llevo una mano a su cabeza tratando de recordar lo que había pasado, pero no lograba tener una idea clara, solo recordaba el empujón que la hizo caer nada mas, una voces llegaron hasta ella.
-La Ambulancia está tardando- dijo un hombre desesperado
-¿Crees que esté vivo? ¿Aguantara hasta que llegue?- pregunto una chica angustiada
-No deberíamos esperar más, ¡hay que llevarlo al hospital!- dijo un joven
-No seas impulsivo, es peligroso moverlo, espera hasta que llegue la Ambulancia-
Rukia Trato de levantarse pero no pudo, le dolía la rodilla, enfoco la vista para tratar de divisar que era de lo que hablaban y allí lo vio.
Estaba boca abajo tirado en la calle, estaba inconsciente y la sangre salía de su cabeza y le bañaba el rostro, el corazón de Rukia comenzó a latir a mil por hora mientras sentía un dolor en él, el desespero comenzó a apoderarse de ella, mientras las lágrimas se deslizaban por su mejilla.
Se levanto como pudo dispuesta a correr hasta el, cuando unos brazos la detuvieron.
-Es peligroso para él, no lo puedes mover- le dijo un hombre
-¡ICHIGO!- fue el grito de dolor emitido por la pelinegra
Continuara…
Bueno hasta aquí el capi xD espero que les haya gustado y tener su apoyo! Acepto criticas en cuanto sean constructivas y sin insultos! Muchas gracias por leerme! Se les quiere! Será hasta la próxima!